María José Talavera (VMware): "Los costes actuales del legacy están mermando la capacidad de innovación de las empresas"
Un año después de su nombramiento al frente de VMware en España y Portugal, ComputerWorld entrevista a María José Talavera sobre el liderazgo en el mercado de la virtualización, la competencia y el futuro de la compañía.
Más de 500.000 clientes en todo el mundo entre los cuales está todo el IBEX35, 55.000 partners, un crecimiento en su último ejercicio fiscal del 22% con un margen operativo del 19%, un 40% de su plantilla formada por ingenieros dedicados exclusivamente al desarrollo. Éstas son en líneas generales los grandes números de una empresa que parece inmunizada a los estragos de la crisis. Hablamos de VMware.
El uno de marzo cumplió un año en su actual responsabilidad. ¿Se han cumplido sus retos en este año?
VMware es una empresa sumamente atractiva y mi incorporación se produce en un momento de cambio profundo de la propia compañía; así, mi primer reto pasaba por trasladar esa transformación a la operativa de las filiales de España y Portugal. Puedo afirmar que hemos cumplido y hemos conseguido un alineamiento perfecto con las pautas corporativas. Ha sido un proceso duro, pero también sumamente enriquecedor. Ahora el reto es capturar todo el valor que somos capaces de generar en ambos mercados que, precisamente, no se encuentran en una situación muy positiva.
Según las consultoras, el crecimiento del sector se articulará sobre Big Data, Cloud, Redes Sociales y Movilidad. ¿Cuál es la propuesta de valor de VMware en ellos?
El gran acierto de esta compañía se sitúa cuando en 1998 tuvieron la visión de posicionar a la virtualización como el concepto que iba a cambiar el mundo TI. Y así se ha demostrado. En estos momentos nuestro foco se sitúa en demostrar a todas las capas de la tecnología que la virtualización de la capacidad de cómputo es trasladable a todo el CPD. De hecho, en estos momentos estamos demostrando las capacidades de la virtualización en la capa de las comunicaciones, al almacenamiento y a la seguridad. Conceptos todos ellos implícitos en esos cuatro pilares.
¿Cuándo podremos ver un CPD totalmente virtual?
En un futuro inmediato. De hecho, uno de los ejes de nuestra transformación es lo que denominamos como el centro de datos definido por software, basado en trasladar todas las capacidades de la virtualización al resto de los componentes del data center. Lo que hacemos es materializar tecnológicamente ese modelo de negocio que toda la industria define como cloud. Un modelo que implica poder entregar servicios de tecnología al negocio de una manera ágil, flexible y responder a la variabilidad de la demanda que viene desde la línea de negocio y a la impredecibilidad de esa demanda; y esto, solamente se puede hacer con un CPD dirigido por software.
¿Cómo está evolucionando la virtualización en procesos de misión crítica?
Un entorno virtualizado supone más seguridad que si no lo tienes, ya que permite aprovisionar servicios ante cualquier imprevisto. Por esta razón, la virtualización es casi una obligación en los procesos de misión crítica.
¿La virtualización va más allá del ahorro de costes?
Creo que, obviamente, se inicia con el objetivo real de ahorro de costes, ya que éste es inmediato y pueden alcanzar entre el 30 y el 70% tanto en gasto operativo como de inversión. Pero la virtualización va mucho allá: es la respuesta inmediata a un entorno de negocio cambiante y difícil de predecir.
¿La virtualización es una apuesta segura? ¿Las compañías asumen algún riesgo?
Ningún riesgo. Aunque entiendo que existan cierto tipo de reticencias a priori, ya que el mundo físico parece mucho más controlable, pero es justamente todo lo contrario. Hacemos realidad que, ante cualquier incidencia o caída, se puedan trasladar cargas de trabajo de un sitio a otro, puesto que se aprovisiona en tiempo real. Y todo esto con riesgo cero.
La independencia con mayúsculas parece ser uno de los ejes en la estrategia de VMware, ¿es así?
Efectivamente, el mensaje de independencia es muy importante en VMware ya que si la virtualización supone la independencia de los servidores físicos e incluso del sistema operativo, ahora lo que hacemos es elevarla a la capa de las aplicaciones y del usuario final. Y esto es ofrecer independencia con mayúsculas. Al hilo de esto, nuestra última propuesta se centra en la posibilidad de gestionar usuarios en vez de dispositivos.
Se habla de las excelencias de la virtualización del servidor y no tanto de las del puesto de trabajo, ¿por qué?
En VMware somos capaces de gestionar entornos de puestos de trabajo virtualizados y no virtualizados. Es necesario recordar que en la virtualización del puesto de trabajo los ahorros de costes no salen tan rápidamente como en el entorno de servidores. Lo que ocurre es que, y ésta es mi opinión, lo hay que valorar es si puedes asumir el coste de no transformar.
¿Qué supone gestionar dispositivos y no usuarios?
Manejamos informes de Forrester que apuntan a que hoy más de un 40% de los empleados intentan acceder a las aplicaciones corporativas con smartphones o tabletas de su propiedad. Desde los departamentos de TI no se está dando una respuesta a esta realidad, ya que se intenta restringir el acceso con esos dispositivos, que no son propiedad de la empresa, pero tampoco les proveen de dispositivos similares en cuanto a sofisticación, y esto lo que puede provocar son agujeros de seguridad y la seguridad es una máxima para cualquier organización. En este sentido, nuestra propuesta se centra en gestionar en vez de restringir. Con el lanzamiento de la suite Horizon lo que se gestiona son usuarios no dispositivos, asumiendo que uno puede tener diferentes dispositivos.
Parece que la crisis no afecta a VMware. Alianzas con los líderes del sector, una cuota de mercado que sigue creciendo...¿Cómo le afecta la competencia?
La competencia es sana y, por supuesto, existe. Aunque lo cierto es que no existe ninguna empresa tan enfocada y especializada como la nuestra, y no puede haberla porque nuestra evolución e historia nos avalan.
Si surge un proyecto de virtualización, ¿VMware sale en la foto sí o sí?
Cierto, pero no es algo gratuito, sucede por una razón muy sencilla. VMware, desde 1998, se ha dedicado de forma exclusiva a la virtualización; además, más del 40% de la plantilla la forman ingenieros. Al año, dedicamos lo generado en un trimestre a I+D y toda nuestra de fuerza de trabajo está comprometida con la innovación. Pero, por encima de todo, no hay que olvidar que VMware “invento” la virtualización en el entorno de los servidores x86. Nuestros productos no fallan y por eso hemos conseguido que no haya reparo en la virtualización de aplicaciones de misión crítica.
¿Existe diferencial tecnológico en la virtualización?
Absolutamente. Es ese diferencial el que nos permite gestionar entornos con o sin virtualización. Ofrecemos la capacidad de gestionar y permitimos acceso desde cualquier dispositivo respetando la experiencia nativa. Y no sólo eso, nuestra tecnología nos permite la gestión de un entorno virtualizado aun cuando la virtualización haya sido desarrollada por nuestra competencia.
Uno de los ejes en la evolución de VMware se basa en una perfecta articulación del mapa de alianzas…
Es una de las claves de nuestro éxito. Tenemos un ecosistema muy sólido, potente y fiel. Y nos está permitiendo abordar uno de los tres mensajes que será uno de nuestros mantras: la cloud hibrida. Somos capaces de decirle a nuestros clientes que si montan una cloud con nosotros y pasado el tiempo por los motivos que sean: eficiencia, coste…decide externalizar parte de las aplicaciones a un proveedor de servicios, no hay ningún problema, ya que más del 95% lo van a gestionar exactamente igual y con la misma tecnología que in-house. Vendemos tanto a proveedores de servicios como a clientes finales; de hecho, un cliente final puede decidir si externaliza o “vuelve a internalizar” determinadas cargas con la garantia de que ese puente será fácil de pasar porque nos movemos en el mismo entorno tecnológico. Ésta es una de nuestras grandes diferenciaciones.
Vmware se fundó en 1998, ¿si no existiera habría que inventarlo?
Sí, sin duda alguna. Alguien, hace ya unos años, tuvo una capacidad de visión importante. Sin esa visión hecha realidad los costes del día a día de las organizaciones serían insostenibles. Pero voy más allá, si VMware hubiera nacido antes habría sido capaz de liberar a las empresas de los altos costes del legacy, lo que les permitiría invertir mucho más en innovación. No hay duda de que los actuales costes del legacy están mermando la capacidad de innovación de las empresas.
¿Puede surgir una réplica a Vmware?
Puede, pero no va a tener el mismo foco que nosotros, porque tenemos 3 mensajes claros a las organizaciones: entender el software como el eje del data center; cloud hibrida y la gestión de usuarios no dispositivos.
En lo últimos tiempos parece que todo es cloud, ¿es así?
Cloud no es una tecnología y no hay ningún proveedor de tecnología cloud, sino proveedores de servicios cloud. Cloud es un modelo de negocio centrado en el pago por uso.
¿Qué papel se le otorga a VMware en el futuro?
Estoy convencida de que hemos pasado a formar parte de la industria como uno de los grandes contribuidores al cambio y a la transformación y no vamos a dejar de serlo. Me cuesta mucho ver el sector tecnológico en el futuro sin la presencia y el peso de VMware. Creo que somos de las pocas compañías tecnológicas que si desaparece no hay un reemplazo automático; en cambio, el resto de empresas TIC pueden tener un sustituto de forma no muy difícil. Hay que tener en cuenta que el 85% de las cargas a nivel mundial que están virtualizadas han confiado en nuestra tecnología. Por lo tanto, si llegáramos a desaparecer los costes de todas estas compañías se duplicarían.