Windows 8 puede liderar la migración del PC a dispositivos móviles
Según Joachim Kempin, ex-responsable del negocio OEM de Microsoft y directivo de la compañía hasta 2002, Windows 8 es lo que Microsoft necesita para aprovechar la migración irreversible de los PC a los dispositivos portátiles, incluyendo iPads, iPhones y otros factores de forma que aún no se ha diseñado.
Así como Windows 7 ganó enseguida popularidad después de la debacle de Vista, Windows 8 está a punto de capturar a los líderes de negocios de teléfonos y tablets como Apple, afirma Joachim Kempin, ex vicepresidente senior de Microsoft responsable del negocio OEM, que trabajó para la compañía desde 1983 hasta 2002.
"Windows 7 encabezó un rejuvenecimiento comparativamente pequeño", escribe Kempin en su libro recién publicado "Resolve and Fortitude: Microsoft´s Secret Power Broker Breaks his Silence". "Mi presentimiento es que Windows 8 se preparó como un arma letal de asalto mucho más destructiva".
Kempin explica que la intención principal de Windows 8 es impulsar el sistema operativo en dispositivos móviles de baja potencia con procesadores ARM frente a los chips tradicionales x86. El ex directivo mantiene que cuando Microsoft lanzó Windows 8 hace casi dos años "revolucionó el mundo de las TI mediante una tablet operativa sobe una CPU basada en ARM de NVidia"
Kempin afirma que el cambio potencialmente señala el fin de los portátiles y PC, y no sólo las tablets multimedia. Una de las ventajas de Windows 8 es su interfaz común y la navegación en todos los dispositivos, dice.
"No hay necesidad de preocuparse por tener que recordar diferentes combinaciones de teclas o gestos cuando nos conectemos entre dispositivos u operamos con un ratón o pantalla táctil", dice Kempin. "Ni Apple ni Google han logrado nunca tal uniformidad".
Kempin elogia el diseño de dos modelos de tablet Surface de Microsoft , pero les condena a un fracaso pues mantiene que enfadará a los OEM que trabajan en sus propias tablets Windows 8 y portátiles y que ahora les lleva a fabricarlos con Linux o el sistema operativo de Google.
Además, duda de que los propios dispositivos pueden ser rentables. “MS no tiene fábrica y tiene un amplio historial de problemas con los proveedores de componentes de hardware y dispositivos que producen tan barato como sus competidores", dice.
En su opinión, Microsoft debería crear una start-up con la misión de fabricar dispositivos Windows 8, que establezcan cierta distancia entre los dispositivos y la propia organización, y crear otra OEM que compita con los actuales fabricantes de sus equipos.