GMV abre en Madrid un laboratorio robótico avanzado de pruebas de Sistemas y Misiones Espaciales
El centro está indicado para la realización de pruebas en tierra de Sistemas y Misiones Espaciales relacionadas con la captura de basura espacial, exploración de la superficie de otros planetas, descenso lunar y misiones de vuelo en formación.
El platform-art de GMV ya está en funcionamiento. El primer laboratorio robotizado europeo, que permite la realización de pruebas en tierra antes de su lanzamiento de Sistemas y Operaciones Espaciales, ha contado en su inauguración con la presencia de Ignacio González, Presidente de la Comunidad de Madrid, y Mónica Martínez Walter, Presidenta del GMV.
Con unas medidas de 20x6x5, el Laboratorio hace uso de las últimas tecnologías en áreas de robótica móvil. El laboratorio, en cuanto a prestaciones, diseño y concepción es 100% español y de 100% GMV. Con una inversión cercana al millón de euros, ha involucrado a un equipo unas 50 personas. Este laboratorio va a permitir que GMV pueda afrontar en mejores condiciones el desarrollo y validación de sistemas completos de Guiado, Navegación y Control (GNC) de vehículos espaciales. Adicionalmente, la compañía ofrecerá el laboratorio a otras empresas del sector dentro y fuera de España para su uso como entorno de validación flexible para un amplio espectro de misiones espaciales: misiones de captura de basura espacial, misiones de vuelo en formación, misiones de exploración de la superficie de otros planetas y descenso sobre la Luna, entre otras.
Por su propia naturaleza, las misiones espaciales requieren de una validación previa en tierra lo más exhaustiva posible pues, por temas de coste y oportunidades de vuelo, las pruebas en vuelo (por ejemplo en una misión de aterrizaje lunar) son difícilmente viables y lo habitual es que los sistemas de Guiado, Navegación y Control que van a controlar el vehículo espacial vuelen por primera vez en la misión, en muchas ocasiones única, cuyo resultado va a depender directamente del comportamiento de dicho sistema. Para ello, se recurre a entornos que emulan con alto grado de realismo la dinámica espacial, con el objeto de que el resultado de las pruebas sea lo más aplicable posible a la misión real.