El malware móvil aumentó en 2013 un 135%
El 62% de las aplicaciones maliciosas son elementos de botnets móviles, que son más estables que las de ordenadores ya que los smartphones están casi siempre encendidos.
El mundo de los dispositivos móviles es el área de la seguridad informática en la que el malware se está desarrollando con más rapidez. En 2013, el problema de la seguridad de los smatphones y las tablets se ha agravado mucho por el crecimiento cuantitativo y cualitativo de las amenazas móviles. Si 2011 fue el año en el que se estableció el malware móvil y 2012 se convirtió en el del desarrollo de su variedad, 2013 ha sido el año del inicio de su madurez.
Y es que los riesgos para la seguridad se parecen cada vez más a las amenazas en los ordenadores personales en cuanto a los métodos y técnicas aplicadas por los cibercriminales. Según el Informe sobre las tendencias en seguridad TI en 2013 realizado por Kaspersky Lab, la cantidad de programas maliciosos móviles se ha triplicado llegando a las 148.778 muestras de malware.
En 2013 no ha habido grandes cambios, en cuanto los sistemas operativos más vulnerables. Android continúa siendo el principal objetivo de los cibercriminales hacia el se dirigen el 98,05% de los ataques. Tres motivos los propician: el sistema operativo de Google sigue siendo líder en el mercado, existen muchas tiendas de aplicaciones independientes y su arquitectura es abierta, gracias a la cual tanto los desarrolladores como los ciberdelincuentes pueden crear programas con facilidad. Al ser la plataforma más atacada, ha sufrido varios ataques relevantes a lo largo de 2013.
El número total de programas maliciosos para móviles, que se ha detectado, es de 148.778, de los cuales 104.427 se descubrieron en 2013, por lo que el crecimiento es de casi un 135%. Sólo en octubre aparecieron 19.966 modificaciones. En comparación, Kaspersky Lab detectó la mitad de esa cantidad en todo el año 2012. Por suerte, esta cifra todavía dista mucho de la situación para ordenadores personales.
De las aplicaciones maliciosas, el 62% son elementos de botnets móviles con una gran funcionalidad: muy pronto empezará su comercialización. Los escritores de virus comienzan a estár pendientes del desarrollo de los servicios de banca móvil y tras la infección, verifican si el smartphone está vinculado a una tarjeta bancaria.
Los troyanos bancarios móviles han sido también uno de los métodos más usados por los cibercriminales. Estos ataques incluyen el phishing móvil, el robo de información sobre tarjetas de crédito y la transferencia de dinero. En 2013 también aparecieron troyanos móviles capaces de comprobar el saldo de la cuenta de la víctima para que los “ingresos” de los delincuentes crezcan. La mayoría de estas aplicaciones maliciosas móviles están orientadas al robo de dinero y sólo en segundo lugar, para robar información personal para venderla en el mercado negro.