La pizarra digital llega a las aulas de Castilla-La Mancha de la mano de Ibermática
Durante el próximo curso, los alumnos castellano-manchegos de tercer ciclo de educación primaria contarán con pizarras digitales interactivas (PDI). Esta decisión se enmarca dentro de una iniciativa adoptada por la Consejería de Educación, Ciencia y Cultura de Castilla-La Mancha para dar un nuevo impulso a la digitalización de las aulas de los centros públicos de la comunidad autónoma.
Con esta nueva herramienta educativa se ofrece al profesor la posibilidad de dirigir sus clases utilizando un dedo o una pluma, de igual forma a como lo haría con un ratón en su ordenador. Mientras imparte clase puede manejar aplicaciones, navegar por Internet y escribir con tinta digital dentro de las mismas aplicaciones y sitios web. De esta forma, es posible hacer de las lecciones un todo más atractivo y documentado. Por ejemplo, en una asignatura de geografía, el profesor puede llevar a sus alumnos a conocer la cordillera del Himalaya con mapas digitales (que puede ampliar y minimizar), emplear imágenes de alta resolución para ver las vistas desde el Everest y visualizar un vídeo que recree virtualmente los frecuentes movimientos sísmicos de la cordillera.
Mediante este proyecto, cada aula será dotada con un “paquete digital” compuesto por una pizarra digital interactiva (videoproyector) y un sistema multimedia (altavoces estéreo y sistema de audio-video), que sirven para potenciar el aprendizaje visual de los alumnos y para aumentar su participación. Todos estos dispositivos estarán a su vez conectados con el ordenador del profesor, que en todo momento tendrá el control de la implantación de la nueva herramienta en el aula.
Formación para docentes
Antes de utilizar una pantalla interactiva, es importante conocer cómo funciona la tecnología y cómo puede utilizarse en un aula. Por ello, la consultora también facilitará cursos de formación certificada para los centros docentes de la región con el objetivo de explotar al máximo el uso educativo que se puede hacer de la tecnología. La formación, con cursos de hasta 30 horas de duración, abarcará todas las prestaciones didácticas que ofrecen los dispositivos tecnológicos.