La escasez de información o la complejidad, principales barreras para la adopción de la e-factura
Según un estudio realizado por la consultora DNX y encargado por DocOnTime, los ahorros, sobre todo en recursos materiales, y el beneficio ecológico que representa su introducción, son los dos factores principales que motivarían el uso progresivo de la factura digital en las empresas. No obstante, las empresas, y en particular las pymes, aun encuentran grandes barreras para su adopción.
Otros factores inhibidores señalados en el estudio son la carga de trabajo derivado del proceso de cambio al entorno digital; el aumento en el número de incidencias, tales como duplicados de documentos y fallos de red; y la amenaza laboral que supone la eliminación de tareas manuales. De acuerdo con David de Prado, consultor de DNX, “las pymes no pueden asumir el coste de adopción de los actuales sistemas de facturación electrónica, y más concretamente las actuales redes .edi con las que se ven obligadas a trabajar por imposición de las grandes compañías o los famosos portales de clientes y proveedores; lo que les traslada a las pymes los costes derivados de su relación comercial. Además, este modelo les genera costes adicionales mucho más difíciles de medir como la pérdida de productividad e ineficiencias propias de un modelo de relación en el que las pequeñas empresas, por necesidad, se ven obligadas a estar. Si las pymes hoy hacen factura electrónica es por imposición y desde luego, muy pocos se están realmente beneficiando de las ventajas y ahorros que puede llegar a generar y que curiosamente, identifican en cuanto les mencionas “Facturae”.