La Comisión Europea anuncia la creación del Área Europea de Investigación
Para acortar el vacío existente con respecto a EE.UU. y Japón
Phillip Busquin, comisario de Investigación de la Unión, aseguró que “esto significa la creación de un área sin fronteras para la investigación, donde las distintas fuentes y recursos científicos existentes sirvan para crear más trabajo en el seno de la unión”. La estrategia se ha recogido en un comunicado de 650 páginas titulado “Hacia un Área Europea de Investigación”, donde se desglosan los distintos elementos que comprimirían una política eficaz y competitiva para Europa en este terreno. De hecho, algunas de las cuestiones que formarían parte a la hora de crear esta área son ya antiguas preocupaciones por parte de la Unión, tales como los planes de formación de una patente paneuropea o la necesidad de encarar los riesgos de inversión de capital existentes en la Europa de los Quince.
Centros de excelencia
Han sido precisamente los quince países que forman parte de la Unión los que han aprobado esta decisión, en la que se incluiría, asimismo, la creación de una red de “centros de excelencia” que, aunque ya existen, generalmente no traspasan las fronteras nacionales de los países en los que han sido creados.
La realidad ha sido la que ha primado en esta decisión, ya que la propia Unión Europea ha reconocido que las distancias con respecto a los otros dos grandes focos de desarrollo del mundo (Norteamérica y Japón) han ido creciendo a lo largo de los últimos años. Actualmente, los Quince destinan un 1,8% del PIB como media a proyectos de investigación, en contraposición al 2,8% y al 2,9% de EE.UU. y Japón, respectivamente. De acuerdo con el informe, la UE registra un déficit en productos de alta tecnología desde hace 10 años, “y este déficit está creciendo irremisiblemente”, puntualiza la Comisión. Como propuestas concretas, la CE optará por la creación de redes de alta velocidad y ancho de banda para unir esos centros de excelencia. Además, el informe añade que dos iniciativas desarrolladas en EE.UU. (Internet2 y Next Generation Internet, o NGI) han provocado una mayor adaptabilidad de estos centros y una mejor conexión entre los mismos. Asimismo, la Unión también pretende hacer andar un proyecto de interconexión que incluya todas las redes nacionales diseñadas en cada uno de los países miembros, para incrementar sus niveles de capacidad de los 155 Mbps. hasta los 622 Mbps., y en donde el último objetivo sería conseguir capacidad gigabit. Aunque la Comisión asegura que una de las prioridades será alentar la inversión, no propone aún medidas concretas para conseguirlo.