Sony, a la zaga de los teléfonos inteligentes
La recuperación de la rentabilidad de la compañía se paraliza al no tener grandes planes para países como China o Estados Unidos, según fuentes citadas por Reuters.
El plan de Kazuo Hirai de volver a colocar a Sony Corp en la senda de la rentabilidad duradera, descansa en gran parte en que sus teléfonos inteligentes sobrepasen a sus rivales para convertirse en el tercer gran fabricante mundial después del iPhone de Apple y el Galaxy de Samsung.
Pero el objetivo está fuera de curso de alguna manera. El CEO de Sony, elegido el año pasado con un objetivo de darle la vuelta a la situación de pérdidas de la compañía, ha afirmado que Sony no tiene grandes planes para los dos mayores mercados de telefonía móvil del mundo, China y Estados Unidos.
En su lugar, Hirai ha dicho que Sony, que quiere llegar a la tercera posición mundial desde su situación actual de séptima, focalizará su negocio en Europa y en su mercado interior en Japón, que en conjunto representa el 60% de sus ventas de teléfonos inteligentes.
“Esas dos son las áreas más importantes para nosotros, y vamos a poner recursos importantes ahí. Pero todavía no para los Estados Unidos y China”, ha declarado Hirai a los periodistas. “No es realista intentar hacer todo al mismo tiempo. En los Estados Unidos empezaremos gradualmente”.
En los Estados Unidos, sólo el cuarto operador T-Mobile US Inc ofrece teléfonos de Sony. Mientras tanto, Sony no ha podido competir en China con las marcas locales, de ZTE a CoolPad a pesar de tener contratos con los tres mayores operadores.
Sony no está entre las cinco mayores marcas de teléfonos inteligentes en ninguno de esos mercados, según la firma de estudios de mercado IDC. Su cuota global del mercado de teléfonos inteligentes era un modesto 2,2 por ciento en el segundo trimestre del año, según la firma de investigación Gartner, detrás de empresas como LG Electronics y Lenovo Group, igual que Apple Inc y Samsung Electronics.
Hirai ha posicionado los dispositivos móviles como uno de los tres pilares para la recuperación de la unidad de electrónica de consumo de la compañía, que tuvo la ayuda de un yen débil para anunciar beneficios en el último trimestre, su primer beneficio trimestral en dos años.
Las otras dos divisiones clave son los juegos, donde la consola PlayStation 4 que se presenta el mes próximo ha obtenido fuertes pedidos prelanzamiento, y la imagen digital, donde Sony domina la fabricación de sensores de imagen para las cámaras de los teléfonos móviles.
En este panorama, los teléfonos móviles podrían terminar siendo el punto débil de la estrategia.
“Sus dispositivos están bien, pero francamente no son tan atractivos. Están bien, pero no son excepcionales” ha dicho Benedict Evans, un analista independiente de telecomunicaciones y telefonía móvil desde Londres.
“Pero el problema de fondo es que cuando vendes dispositivos basados en la plataforma de otro, es extremadamente difícil diferenciarse”, ha continuado.
Incluso en su mercado interior, donde Sony fue número 2 en el último trimestre por detrás de Apple, el panorama se ha vuelto más difícil. El último mes, el mayor operador japonés, NTT DoCoMo Inc, que en su campaña de verano favoreció al Xperia de Sony frente a otras marcas, ha cerrado un acuerdo con Apple para llevar el último iPhone.
Aun así, Hirai ha afirmado que la establecida reputación de Xperia en Japón ayudaría a enfrentarse al reto de Apple. “Tenemos un fuerte reconocimiento de marca aquí para el hardware y servicios de Xperia”, ha dicho Hirai.
La compañía ha establecido un objetivo de venta de 42 millones de teléfonos a nivel mundial en el año fiscal hasta marzo, un incremento del 27% frente a hace un año.
En 2012 Samsung vendió 218,2 millones de teléfonos Galaxy mientras Apple vendió 135,9 millones de iPhones, según IDC.