Nokia muestra cómo será la tecnología del futuro
Los días 23 y 26 de mayo la división Nokia Networks España puso en marcha “La Puerta de Nokia al Futuro”, un evento donde los asistentes comprobaron el protagonismo que va adquiriendo la tecnología, integrándose de forma plena en nuestra vida diaria.
Bajo la visión de Nokia, la evolución tecnológica pasa por: el mundo Wap –permite conectar a Internet a través del teléfono móvil-; el mundo GPRS –ofrece una mayor velocidad y capacidades en la circulación de datos entre el teléfono y el ordenador-; y el mundo 3G –con acceso a aplicaciones infinitas como el envío de mensajes multimedia, videoconferencia, videotelefonía, postales móviles y comercio electrónico-. El mundo 3G no introduce un concepto nuevo, se trata de la tercera generación de redes de telefonía móvil, denominada UMTS, operativa a finales de año en Europa, pero que no estará en uso hasta agosto de 2001 en nuestro país. En este momento se trata de un sistema experimental, y ni siquiera se conoce el formato de los terminales, aunque Nokia ya ha afirmado que las primeras entregas de UMTS vendrán a España de su mano, pues ya se conoce que en el verano del año 2001 prestarán sus servicios en España cuatro operadores de tercera generación. En este sentido, Masha Lloyd, responsable de comunicación de Nokia Networks España, afirmaba “fuimos los primeros en GSM y queremos ser los primeros en ofrecer móviles para la tercera generación”.
A pesar de todo, este modelo de sociedad de la información móvil, que entre otros predica Nokia, donde el usuario tendrá movilidad total, accederá a la información allí donde se encuentre y dispondrá de Internet en su bolsillo, aún es un futurible. Puede que la tecnología esté disponible en breve, pero aún deberemos evolucionar más. Resulta muy cómodo poder alquilar un coche, reservar una habitación de hotel, o transmitir el archivo que un usuario acaba de recibir en su teléfono móvil, pero aún tiene asociado un coste muy alto, y los tiempos de acceso dejan mucho que desear, por lo que inexorablemente el usuario se lo pensará muy bien antes de cambiar de sistema.