La Comisión Europea crea un grupo de asesoramiento para RFID
La Comisión Europea ha creado un grupo cuya misión será asesorarla sobre las tecnologías de identificación por radiofrecuencia (RFID). El grupo incluirá tanto representantes de la industria como de asociaciones de consumidores.
El potencial de crecimiento del mercado RFID es enorme. Se estima que en el entorno de la UE aumentará de los 500 millones de euros que representó en 2006 a 7.000 millones de euros en 2016, según datos facilitados por Viviane Reding, comisaria europea para Medios y Sociedad de la Información.
“Somos un mercado fuerte en movilidad, wireless y fabricación de chips, y debemos aprovechar nuestra posición para favorecer también el desarrollo de RFID”, ha subrayado Reding, quien advertido que, no obstante, la industria deberá prestar una mayor atención a las cuestiones relacionadas con la privacidad y la seguridad. “Tenemos que hacer entender a la industria que la `Internet de las cosas´ debe ser una `Internet para las personas´”.
Es en este contexto en el que se ha gestado la iniciativa para la creación del nuevo grupo encargado de aconsejar a la Comisión, que planea proponer a mediados de año una serie de enmiendas a la directiva e-Piracy Directive para recoger en ella las aplicaciones RFID.
Basándose en el trabajo del nuevo grupo encargado de aconsejar a la Comisión, que pretende publicar un conjunto de recomendaciones para los estados miembros sobre cómo gestionar la seguridad y privacidad de los datos que afectan al uso de RFID.
De cualquier modo, la Comisión ha dejado claro que su enfoque intentará evitar cualquier exceso de regulación que pudiera dificultar el desarrollo del mercado RFID. Por otra parte, el brazo ejecutivo de la UE está trabajando estrechamente con los gobiernos de Estados Unidos, China, Japón y Corea para promover el desarrollo de estándares internacionales para RFID, según Reding.