El robo de información por parte de los empleados se convierte en una importante preocupación para las compañías
De acuerdo a un estudio publicado por Iron Mountain, el 20% de las empresas europeas consideran que el robo de datos por parte de empleados es el mayor riesgo de seguridad al que se enfrentan, por encima de las amenazas externas o los desastres naturales.
La seguridad se está convirtiendo en el tema de moda en el mundo TIC y es que cada vez son más las amenazas y los riesgos a los que se encuentran expuestas las compañías en tanto que se popularizan tendencias (consideradas inseguras) como la consumerización o la nube.
Pero parece que el principal riesgo para las empresas no viene de ningún avance tecnológico ni de un cambio de paradigma que provoque un agujero en la seguridad de la infraestructura TIC. De hecho, la mayor amenaza para las compañías es mucho más simple y se remonta a tiempos ancestrales del hombre: el robo por parte de los propios empleados.
En ese sentido, un reciente estudio llevado a cabo por Iron Mountain revela que el 20% de las empresas europeas consideran que el robo por parte de empleados es el mayor riesgo de seguridad informática al que se enfrentan. Este riesgo se percibe como mayor que los fallos informáticos, el cibercrimen o los desastres naturales.
Parece que esta preocupación no está del todo fuera de lugar. Un estudio publicado el mes pasado por la especialista en redes Verizon reveló que, mientras que solo un 17% de las brechas o fallos en los datos tenían que ver con personal interno, el impacto potencial de posibles robos por parte de empleados es mayor que la amenaza externa: hay tres veces más riesgo de robo de propiedad intelectual dentro de una empresa por parte de los propios empleados que por parte de personas ajenas a la empresa.