Bull se rinde ante Itanium 2 con sus nuevos NovaScale
Itanium 2 ha conquistado también a Bull. La compañía francesa ha decidido apostar por la segunda generación del procesador de 64 bits de Intel y ha lanzado nuevos servidores de gama alta basados en éste y en su arquitectura multiprocesador FAME (Flexible Architecture for Multiple Environments). NovaScale, que es el nombre de la nueva línea y que, de momento, integra tres modelos diferentes, se dirige a grandes corporaciones y al mercado científico y técnico.
Unir el mundo mainframe con los sistemas abiertos y crear puentes entre el primero y los sistemas operativos Windows y Linux. Éste es, según Bruno Pinna, director de la división de servidores Intel de Bull, el objetivo de la compañía francesa con su anuncio realizado el pasado 21 de marzo en París, con el que emprende una fuerte apuesta por el mundo Itanium 2. Un lanzamiento con el que la empresa vuelve a sus raíces, después de la venta, en los últimos dos años, de su unidad de tarjetas inteligentes CP8, su división de software PSI Indian y su actividad de servicios fuera de Francia e Italia.
En concreto, la empresa gala ha lanzado tres modelos de servidores NovaScale, todos apilables en racks estándar de 19 o 36U de altura y basados en un estándar de construcción de bloques que, según la compañía, abaratará los costes de estas máquinas sin afectar a su rendimiento, que se incrementa. Los tres modelos son NovaScale 4040, NovaScale 5080 y NovaScale 5160. El primero, un modelo compacto que soporta hasta cuatro procesadores Itanium 2, es ideal como servidor de aplicaciones pequeñas o para clustering y tiene un precio que parte de los 25.000 euros. Los otros dos, NovaScale 5080 y 5160, soportan hasta 8 y 16 procesadores, respectivamente, y son adecuados por su arquitectura tolerante a fallos y redundante, para soportar grandes bases de datos. Su precio es de unos 85.000 euros el primero y 95.000 el segundo. El modelo 4040 ya está disponible y los otros dos lo estarán desde finales de marzo. Todos soportan Linux, Windows Advanced Server Limited Edition 1.2 de Microsoft y, cuando esté disponible Windows Server 2003. “Hemos trabajado muy duro con nuestros partners para que los nuevos servidores soporten las aplicaciones de Oracle, Microsoft, SAP, Bea Systems, etc...” –asegura Pinna- Nuestro objetivo es que funcionen correctamente todas las aplicaciones de los ISVs (vendedores independientes de software)”.
Incremento de la gama
Estos tres modelos no son los únicos que integrará la nueva gama NovaScale. De hecho, Pina señaló la intención de Bull de lanzar a lo largo de este año y los siguientes otros modelos de 8 y 16 vías que integrarán sus propios desarrollos y, en especial, el particionamiento físico del hardware. Además, según Pinna, más adelante Bull presentará una nueva versión de su sistema operativo propietario para mainframes, GCOS 8, para los nuevos NovaScale bajo la forma de una máquina virtual que corre sobre el sistema operativo Linux. Este software, llamado Helios, precisará de mayor potencia que se podrá conseguir, según Pierre Bonelli, CEO de Bull, con la futura generación de Itanium 2, conocida por el nombre en código Madison y que no estará disponible hasta finales de año. La compañía gala ya ha lanzado Diane, una versión de su sistema operativo GCOS 7, que corre sobre servidores basados en Windows y construidos con procesadores de 32 bits de Intel.
Los nuevos servidores se dirigen tanto al mercado de las grandes corporaciones como al científico y técnico, este último, según Pinna, el más avezado en este tipo de máquinas y el que primero las adoptará.
En concreto, la empresa gala ha lanzado tres modelos de servidores NovaScale, todos apilables en racks estándar de 19 o 36U de altura y basados en un estándar de construcción de bloques que, según la compañía, abaratará los costes de estas máquinas sin afectar a su rendimiento, que se incrementa. Los tres modelos son NovaScale 4040, NovaScale 5080 y NovaScale 5160. El primero, un modelo compacto que soporta hasta cuatro procesadores Itanium 2, es ideal como servidor de aplicaciones pequeñas o para clustering y tiene un precio que parte de los 25.000 euros. Los otros dos, NovaScale 5080 y 5160, soportan hasta 8 y 16 procesadores, respectivamente, y son adecuados por su arquitectura tolerante a fallos y redundante, para soportar grandes bases de datos. Su precio es de unos 85.000 euros el primero y 95.000 el segundo. El modelo 4040 ya está disponible y los otros dos lo estarán desde finales de marzo. Todos soportan Linux, Windows Advanced Server Limited Edition 1.2 de Microsoft y, cuando esté disponible Windows Server 2003. “Hemos trabajado muy duro con nuestros partners para que los nuevos servidores soporten las aplicaciones de Oracle, Microsoft, SAP, Bea Systems, etc...” –asegura Pinna- Nuestro objetivo es que funcionen correctamente todas las aplicaciones de los ISVs (vendedores independientes de software)”.
Incremento de la gama
Estos tres modelos no son los únicos que integrará la nueva gama NovaScale. De hecho, Pina señaló la intención de Bull de lanzar a lo largo de este año y los siguientes otros modelos de 8 y 16 vías que integrarán sus propios desarrollos y, en especial, el particionamiento físico del hardware. Además, según Pinna, más adelante Bull presentará una nueva versión de su sistema operativo propietario para mainframes, GCOS 8, para los nuevos NovaScale bajo la forma de una máquina virtual que corre sobre el sistema operativo Linux. Este software, llamado Helios, precisará de mayor potencia que se podrá conseguir, según Pierre Bonelli, CEO de Bull, con la futura generación de Itanium 2, conocida por el nombre en código Madison y que no estará disponible hasta finales de año. La compañía gala ya ha lanzado Diane, una versión de su sistema operativo GCOS 7, que corre sobre servidores basados en Windows y construidos con procesadores de 32 bits de Intel.
Los nuevos servidores se dirigen tanto al mercado de las grandes corporaciones como al científico y técnico, este último, según Pinna, el más avezado en este tipo de máquinas y el que primero las adoptará.
