Se descubre una red de ciberespionaje sobre 103 países
Una investigación de diez meses de duración sobre espionaje en la red ha revelado que 1.295 ordenadores en 103 países diferentes y pertenecientes a instituciones internacionales han sido espiados. Algunas evidencias circunstanciales señalan hacia China como posible origen de las actividades ilícitas.
Los resultados de esta investigación están recogidos en un documento de 53 páginas presentado el pasado fin de semana. En él se ofrecen algunas de las más incuestionables evidencias y detalles de los esfuerzos de los hackers con motivaciones políticas, a la vez que se plantean cuestiones importantes sobre las relaciones de éstas actividades con operaciones de ciberespionaje autorizadas por los gobiernos.
En concreto, el documento describe una red que los investigadores que han colaborado en su desarrollo llaman GhostNet. Tal red utiliza principalmente un programa de software malicioso llamado gh0st RAT (Remote Access Tool) para robar documentos sensibles, controlar Webs y tomar por completo el mando de los ordenadores infectados.
“GhostNet consiste en una red de ordenadores infectados residentes en localizaciones de medios de comunicación, instituciones económicas y entidades políticas de alto valor, y extendida a través de numerosos países de todo el mundo”, se explica en el documento. Éste ha sido elaborado por diversos analistas en colaboración con el proyecto de investigación Information Warface Monitor de SecDev Group, think tank especializado en el asunto, y con Munk Center for International Studies de la Universidad de Toronto.
“En el momento de escribir este informe, las organizaciones afectadas en su mayoría no eran conscientes de la situación comprometida en que se hallaban”, señala los autores del documento, quienes, en cualquier caso, dicen no saber si la información obtenida por la red de ciberespionaje resultó finalmente valiosa para los objetivos de los hackers, si ha sido vendida o si ha pasado a manos de alguna agencia de inteligencia.
