Robinson XXI logró sobrevivir 29 días encerrado en una casa con conexión a Internet

Iñaki de la Torre ha conseguido su objetivo, sobrevivir 29 días encerrado en una casa con la única ayuda de un ordenador conectado a Internet y una tarjeta de crédito. Pero la hazaña no ha supuesto un camino de rosas para este periodista, que ha comprobado que no todo era tan fácil como parecía. Internet ofrece la posibilidad de subsistir, pero no de vivir con todo lujo de comodidades, como por ejemplo una aspirina o un abridor de botellas.

Iñaki entró a la casa con lo puesto: unos calzoncillos. Después de casi un mes de estancia en un modesto apartamento, ha conseguido vestirse de pies a cabeza. La casa que sólo contaba con un ordenador como decoración, aparecía amueblada tímidamente, trabajo que le llevó cuatro días enteros. Y es que para comprar en Internet las ideas tienen que estar muy claras, puesto que es mucho el tiempo que se emplea para buscar y pocos los artículos que se pueden comparar en relación a modelos y precios.

La Red ha permitido a Iñaki la posibilidad de tener comida caliente en casa en 50 minutos, de llenar el carro de la compra en 40, el pedido a domicilio, libros, música, una guitarra e incluso caviar y vino en periodos que oscilan entre las 24 y las 48 horas. Sin embargo ha sido imposible encontrar aspirinas o un abridor para botellas y latas.

Iñaki que es redactor de la revista Quo, abanderada de la experiencia, ha navegado una media de seis y siete horas al día con un promedio final de 611 correos electrónicos contestados y más de 60 horas de chat con las que ha combatido la soledad de su apartamento.

La Red te ofrece unos niveles de comodidad relativamente buenos en caso de vivir en ciudades como Madrid y Barcelona y en un supuesto como este la experiencia de usuario cuenta bastante. Ser inexperto en la navegación por Internet convertiría el experimento en una pesadilla puesto que la búsqueda del material sería bastante difícil. Robinson XXI tardó una hora y media en encontrar una página web para comprar electrodomésticos, tres horas de navegación para buscar objetos de menaje y cuatro horas para encontrar muebles. Y eso que estaba suficientemente preparado.

Por lo demás y salvo algún pequeño problema de salud como por ejemplo dificultades visuales y falta de riego sanguíneo a lo que se añade una ligera agorafobia o aversión a los espacios abiertos al estar tanto tiempo encerrado, Iñaki ha superado la prueba satisfactoriamente.

Quo: www.quo.es

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Robinson XXI tendrá que subsistir durante un mes conectado a la Red
www.idg.es/iworld/noticia.asp?id=18317&sec=iworld
   

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

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