Las principales entidades de medios de pago inician el suministro de la firma electrónica avanzada
Tras la reciente aprobación, mediante Real Decreto, de la Ley de Firma Electrónica, comienzan a presentarse las diferentes ofertas de este tipo dirigidas tanto a las empresas como al usuario residencial. Englobadas bajo ACE, las principales entidades de medio de pago disponen certificados de firma electrónica avanzada especialmente concebidos para sectores como el sanitario o el industrial, mientras que su coste será mínimo para el usuario particular. El sistema de autentificación y confidencialidad para envío de mensajes por redes con tecnología Internet de ACE contará en principio con la tecnología de Bull.
Como tercer país de la Unión Europea en legislar la firma electrónica, el Congreso de los Diputados dió vía libre el pasado 17 de septiembre a la implantación de este sistema de confidencialidad y autentificación por Internet con un Real Decreto, tras la Propuesta de Derechos Europeos de Firma Digital. Su utilización proveendrá tanto desde empresas como particulares y además, en su versión avanzada, supone la equiparación a efectos legales de este proceso digital con la firma tradicional.
En este contexto, la Agencia Española de Certificación pretende comenzar la implantación de estos certificados, especialmente aplicables en las transacciones empresariales. Formada por las principales entidades de medios de pago en España, Sermepa, CECA, Sistemas 4B, Visa y Mastercar, ACE se trata de una de las cuatro entidades geopolíticas con potestad para emitir certificados digitales, esto es, con capacidad para transferir estos sistemas de confidencialidad a nivel mundial. La actividad internacional de Visa y Mastercard así como el desarrollo en de los servicios en castellano propician que ACE centre su próxima actividad en nuestro país e iberoamérica.
De acuerdo con sus responsables, las aportaciones básicas de estos procesos marcan la diferencia en cuanto a lo que hasta ahora supone el envío de archivos y transferencias por Internet. Confidencialidad y autentificación del emisor/receptor, no repudio e integridad del mensaje son las claves que ofrece la firma electrónica, con el avance de que la modalidad avanzada mantendrá el mismo valor legal que la firma tradicional. ACE pretende basar su negocio en el sector empresarial, especialmente en los procesos internos de las empresas, la industria y el sector sanitario, mientras que en su oferta para particulares carecerá según sus responsables de ánimo de lucro. A pesar de ello, el coste de estos certificados se derivará del precio final puesto por las entidades financieras u operadoras de Internet, organizaciones barajadas para adquirir los certificados de las entidades emisoras y ofrecerlos a los clientes finales o empresariales.
Como parte del inicio de esta actividad real en nuestro país, ACE contará en primer lugar con Bull como socio tecnológico, aunque este acuerdo no es exclusivo. De este modo, la alianza se divisará en tres áreas como formación de sectores, consultoría e implantación de proyectos globales. En este último apartado, Bull cuenta con experiencias de reconocido éxito a nivel mundial como el proyecto de negocios electrónicos Infomarket dentro de la ciudad digital Infoville. Por su parte, la empresa francesa se compromete a desarrollar una línea de productos para este tipo de aplicación, que incluirán el Sello de Confianza ACE, así como seminarios de formación e inclusión de certificados en aplicaciones desarrolladas.
La aplicación y utilidad de la firma digital es contemplada desde Bull como un proceso de autentificación y confidencialidad que alcanzará su máximo desarrollo en los dispositivos móviles. Este segmento, repetidamente anunciado como próxima fase de Internet (Internet móvil), supone para una ventaja en el caso del mercado español por el hecho de contar con un parque de teléfonos celulares con un ratio de crecimiento tan elevado. Es este sentido, el almacenamiento de las claves pública y privada de este tipo de procesos tienden hacia la tarjeta inteligente como dispositivo seguro. Portable y personal, desde los responsables de Bull se considera adecuada para su uso desde el propio teléfono móvil. En cuanto a la situación actual de este mercado, aún sin un estándar de tarjeta inteligente alcanzado por los implicados, Bernardo Villazán, director de la división de servidores y BullSoft, considera la tarjeta Java o con soporte de esta lenguaje multiplataforma, la solución para el rápido desarrollo de estos servicios.
www.ace.es
www.bull.es
www.visa.es
www.telefonica.es
www.4B.es
En este contexto, la Agencia Española de Certificación pretende comenzar la implantación de estos certificados, especialmente aplicables en las transacciones empresariales. Formada por las principales entidades de medios de pago en España, Sermepa, CECA, Sistemas 4B, Visa y Mastercar, ACE se trata de una de las cuatro entidades geopolíticas con potestad para emitir certificados digitales, esto es, con capacidad para transferir estos sistemas de confidencialidad a nivel mundial. La actividad internacional de Visa y Mastercard así como el desarrollo en de los servicios en castellano propician que ACE centre su próxima actividad en nuestro país e iberoamérica.
De acuerdo con sus responsables, las aportaciones básicas de estos procesos marcan la diferencia en cuanto a lo que hasta ahora supone el envío de archivos y transferencias por Internet. Confidencialidad y autentificación del emisor/receptor, no repudio e integridad del mensaje son las claves que ofrece la firma electrónica, con el avance de que la modalidad avanzada mantendrá el mismo valor legal que la firma tradicional. ACE pretende basar su negocio en el sector empresarial, especialmente en los procesos internos de las empresas, la industria y el sector sanitario, mientras que en su oferta para particulares carecerá según sus responsables de ánimo de lucro. A pesar de ello, el coste de estos certificados se derivará del precio final puesto por las entidades financieras u operadoras de Internet, organizaciones barajadas para adquirir los certificados de las entidades emisoras y ofrecerlos a los clientes finales o empresariales.
Como parte del inicio de esta actividad real en nuestro país, ACE contará en primer lugar con Bull como socio tecnológico, aunque este acuerdo no es exclusivo. De este modo, la alianza se divisará en tres áreas como formación de sectores, consultoría e implantación de proyectos globales. En este último apartado, Bull cuenta con experiencias de reconocido éxito a nivel mundial como el proyecto de negocios electrónicos Infomarket dentro de la ciudad digital Infoville. Por su parte, la empresa francesa se compromete a desarrollar una línea de productos para este tipo de aplicación, que incluirán el Sello de Confianza ACE, así como seminarios de formación e inclusión de certificados en aplicaciones desarrolladas.
La aplicación y utilidad de la firma digital es contemplada desde Bull como un proceso de autentificación y confidencialidad que alcanzará su máximo desarrollo en los dispositivos móviles. Este segmento, repetidamente anunciado como próxima fase de Internet (Internet móvil), supone para una ventaja en el caso del mercado español por el hecho de contar con un parque de teléfonos celulares con un ratio de crecimiento tan elevado. Es este sentido, el almacenamiento de las claves pública y privada de este tipo de procesos tienden hacia la tarjeta inteligente como dispositivo seguro. Portable y personal, desde los responsables de Bull se considera adecuada para su uso desde el propio teléfono móvil. En cuanto a la situación actual de este mercado, aún sin un estándar de tarjeta inteligente alcanzado por los implicados, Bernardo Villazán, director de la división de servidores y BullSoft, considera la tarjeta Java o con soporte de esta lenguaje multiplataforma, la solución para el rápido desarrollo de estos servicios.
www.ace.es
www.bull.es
www.visa.es
www.telefonica.es
www.4B.es
