Las caídas de Gmail perjudican la imagen de Google como suministrador empresarial
La última caída importante de la popular aplicación Gmail de Google –debida a una sobrecarga de tráfico en los servidores de la compañía- podría disuadir a algunos gestores de TI de la idea de permitir a sus trabajadores utilizar este sistema de correo electrónico para tareas laborales, según los analistas.
“Cuanto más importantes y populares se hagan las aplicaciones incluidas en la oferta para empresas Google Apps, como Gmail, más negativa será la reacción ante la caída de cualquiera de ellas, y mayor la decepción de los usuarios con Google”, explica Dan Olds, analista de Gabriel Consulting Group.
“El correo electrónico es una aplicación de misión crítica durante el tiempo en que los usuarios están trabajando. Si los clientes perciben que Gmail no es fiable, dejarán de adoptarlo. Cada caída de Gmail hace que las compañías vuelvan a pensárselo dos veces antes de adoptar cualquier solución de correo electrónico gratuito”, continúa este analista.
Por su parte, Matt Cain, analista de la firma de investigación Gartner, sugiere que Google podría evitar estos inconvenientes utilizando infraestructuras separadas para ofrecer Gmail a usuarios corporativos y consumidores. “Google debería garantizar que los servicios comerciales (es decir, de pago) y los de consumo (gratuitos) son independientes unos de otros, y que los primeros ofrecen tiempos de funcionamiento de al menos un 99,9%, el estándar para la mayoría de los servicios de correo electrónico SaaS comerciales”, opina Cain.
El principal problema para la compañía en tal caso sería, según Cain, segmentar el tráfico comercial del de consumo dentro de Gmail.
En cualquier caso, pese a la última caída de alcance mundial de Gmail, Google sigue manteniendo que el servicio es inherentemente más estable que las ofertas on-premise de sus competidores, como el servidor Exchange de Microsoft o el software de colaboración Lotus Notes de IBM.