La casa inteligente, más cerca de la realidad

Los sistemas de automatización aplicados a edificios y viviendas están cada vez más dejando de ser una cuestión de ciencia ficción, y evolucionan tecnológicamente hacia la integración de protocolos de comunicación.

La domótica, tecnología convergente entre la microelectrónica, las telecomunicaciones y la informática, en un nuevo campo, las tecnologías de la comunicación, busca ahora su integración con las necesidades de tratamiento de la información, transmisión y automatización de funciones, a través de Internet.

¿Qué es la domótica?
Por Domótica, según la CEDOM (Asociación Española de Domótica) se entiende “la incorporación de una sencilla tecnología al equipamiento de la vivienda, para que permita gestionar de forma energéticamente eficiente, segura y confortable para el usuario, los distintos aparatos e instalaciones domésticas tradicionales que conforman una vivienda ( la calefacción, la lavadora, la iluminación, etc)”. La Domótica busca el aprovechamiento al máximo de la energía adecuando su comportamiento a nuestras necesidades.

El protocolo EIB (European Installation Bus), el más implantado en Europa y que goza del apoyo institucional de la Unión Europea, está destinado a la automatización de edificios y viviendas, conectando entre sí a los distintos dispositivos que actúan bajo el mismo bus de campo, o isla de automatización, que recibe a través de sensores las órdenes que el usuario le dicta, y las envía a un actuador a través de la línea de bus, que puede ser de cable de par trenzado, coaxial, por infrarrojos, red eléctrica, ultrasonidos, o radiofrecuencia. Mediante estos sistemas de interconexión y el protocolo EIB, es posible que un usuario regule el sistema de iluminación, climatización, vigilancia, etc, de su casa, a través de un sistema de control de todo un área, que puede abarcar hasta 64 elementos compatibles EIB en una línea, y unir hasta 12 líneas vinculadas entre sí.

El funcionamiento de una red básica de domótica dispone de tres elementos fundamentales. Un sensor que capta los datos de los dispositivos conectados a la red, el procesador, que determina qué hacer con esa información, y por último el actuador, que ejecuta la acción en función del sensor. Según el tipo de procesador, los sistemas pueden ser centralizados, descentralizados, o distribuidos, siendo más o menos escalables los nodos que forman esa red.


Integración con Internet
El protocolo EIB está regulado por un organismo a nivel europeo, el EIBA, destinado a hacer del EIB un estándar europeo como protocolo para cualquier desarrollo en domótica europeo. Recientemente, este organismo ha terminado el desarrollo de un nuevo protocolo para conectar las redes EIB con Intranets e Internet. La iniciativa Anubis, como se ha bautizado este sistema, define una serie de estándares abiertos y especificaciones para desarrollos de terceras partes, y que ya ofrece compatibilidad con protocolos e interfaces USB, OPC, SOAP, Ethernet, Gigabit Ethernet, redes locales inalámbricas, FireWire, conexiones por módem bajo protocolo PPP (V90/92), RDSI, ADSL, TV por cable, entre otras especificaciones.

Productos reales
Los primeros productos bajo el protocolo Anubis ya han comenzado a comercializarse, como un servidor y un software de sobremesa con soporte para XML. La mayoría del software disponible para aplicarlo a sistemas domóticos están disponibles en Internet como shareware, para Windows, Linux e incluso Macintosh, pero sin embargo, el hardware es aún escaso y de un alto precio. Por ejemplo, ya existen en el mercado dispositivos como interruptores y controladores de alarmas, persianas, lámparas, luces, etc; sensores, actuadores, o acopladores tanto para protocolo EIB como para el protocolo americano X-10, el más extendido mundialmente, al utilizar la red eléctrica como medio de transmisión, y con numerosos dispositivos desarrollados al llevar este protocolo más tiempo en el mercado que el EIB. En este punto, según datos proporcionados por CEDOM, el 21% del mercado de la domótica en España responde al protocolo EIB.

Iniciativas en España
Anubis será el protocolo que permitirá, por tanto, conectar el sistema automático de control domótico con redes inalámbricas remotas, permitiendo el control de las funciones domésticas desde cualquier dispositivo. De hecho, ya existen soluciones para el control domótico desde teléfonos WAP. En España, por ejemplo, el portal Domotica.net dispone de Domocasa, un servicio gratuito que permite controlar un sistema domótico, al que se le asigna una IP localizable desde un navegador o un móvil WAP. El sistema no requiere, por tanto, estar conectado permanentemente a Internet, ya que la llamada a la dirección IP sólo se realiza por cada petición que hace el usuario, y el software que controla la casa se encarga de ejecutar las peticiones del usuario, a través de los servidores de Domonica.net, enviándolas al PC de casa por medio de una conexión segura.
A esta experiencia piloto ya se han unido 12 personas en España, una cifra que puede parecer pequeña, pero hay que tener en cuenta que se trata de una tecnología que se encuentra naciendo, más aún en España, donde poco a poco comienzan a surgir las primeras iniciativas de domótica, cada vez menos asociadas a entornos de empresa o viviendas de lujo, y siguiendo ejemplos como los de Francia, donde la domótica ha tenido mayor implantación desde hace unos años.


Asociación Española de Domótica: www.cedom.org
Protocolo X-10: www.x10.org
Protocolo EIB: www.eiba.com
Anubis: www.eiba.com/technology.nsf/frameAN?OpenFrameSet
Domótica en España: www.domotica.net

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

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