Canoma 1.0
Generación de gráficos 3-D para la Web
Las aplicaciones de 3-D ya llevan entre los usuarios de Macintosh varios años, por lo que no siempre sorprende ver lo que son capaces de realizar, intentando recrear por ordenador escenas y animaciones con una calidad (a veces) próxima a la realidad. Lo que sí sorprende es la particular visión del 3-D que, de la mano de Metacreations, tiene su representante en el producto que nos ocupa en este primer contacto: Canoma 1.0.
La mejor forma de entender lo que representa este producto es explicar su filosofía de trabajo. Si en las aplicaciones tradicionales de 3-D se trabaja partiendo de un modelado al que, posteriormente, se aplica una textura o una serie de éstas (como si se tratase de la piel que recubre una superficie), en Canoma se da la vuelta al funcionamiento de la generación. En este caso se parte de una imagen o imágenes (generalmente fotografías) para proporcionales posteriormente volumen mediante la asignación de polígonos multilínea básicos a cada una de las partes de la imagen. De este modo, aquellos usuarios que no tengan una especial habilidad a la hora de modelar objetos complejos, encontrarán en este producto un modo excelente y tremendamente sencillo.
Incluso los requerimientos que deberá tener el equipo destinado a trabajar con Canoma son más bajos que los encontrados en la mayoría de las aplicaciones de 3-D, lo que también supone una ventaja adicional. En concreto, los usuarios Apple deberán disponer de un Power Mac con 32 MB de memoria RAM, 50 MB de espacio libre en disco duro y el Mac OS 8.0 o superior. En el caso de los usuarios que va-
yan a utilizar esta aplicación con un equipo compatible Windows, la cantidad necesaria de RAM y espacio en disco duro son los mismos, salvo que se recomienda su uso a partir de equipos con procesadores Pentium. En cuanto a sistema operativo, Canoma es compatible con Windows 95/98 y NT 4.0.
Interfaz de usuario. Metacreations ha sido una compañía de software que, desde sus orígenes y a lo largo del paso de los años y cambios de nombre de la empresa, siempre ha mantenido constante la presencia de unas interfaces de usuario espectaculares. Canoma sigue con esta tradición en la que se intenta simplificar la forma de acceder a las diferentes opciones y elementos de la aplicación, aunque también están accesibles todas las funciones mediante los típicos menús.
La forma de trabajo es realmente sencilla, ya que al encontrarse recogidas las funciones comunes bajo un mismo módulo los usuarios no se verán perdidos entre las herramientas de esta aplicación. Uno de estos módulos es el encargado de contener la imagen o imágenes que servirán como plantilla base o bien como texturas de apoyo para aplicar en un mismo proyecto; en la parte inferior de la interfaz, tras hace clic en la pestaña “Create” se podrá acceder a todos los polígonos (tales como cubos, triángulos, esferas, pirámide, pirámide truncada, arco, escaleras, etc.) que el usuario podría necesitar para asignar a cada una de las partes de la fotografía sobre la que se esté trabajando.
Por otro lado, bajo el epígrafe de controles de cámara se podrá seleccionar entre el modo de edición o el de “visualización”. Este último se corresponde, realmente, a la generación (render) de proyecto hasta el momento y, por tanto, se podrán utilizar los controles de giro (hasta 360 grados) para ver el resultado en 3-D de la imagen original.
Además de los polígonos, que podríamos llamar de extrusión, Canoma facilita otras herramientas mediante las cuales el usuario podrá desde crear un plano de tierra hasta realizar operaciones destinadas a facilitar la tarea de edición: alineamiento de diferentes elementos, edición en modo de línea, añadir puntos (muy útil para realizar pliegues) y los evidentes controles de ampliación para poder ajustar la asignación de los vértices de un polígono determinado con el correspondiente objeto en la fotografía bidimensional.
Otros botones de la interfaz permiten ajustar la profundidad de campo para la cámara e incluso rotarla; especialmente útiles para la generación de animaciones (aspecto que describiremos posteriormente).
La calidad final dependerá de la propia calidad de la fotografía original, pues el resultado final utiliza ésta como textura para cada una de las caras de los objetos en el resultado 3-D. Adicionalmente, Canoma permite retocar las imágenes (o texturas) desde un editor externo, por lo que el usuario ganará en flexibilidad sin tener que preocuparse de aspectos tales como la perspectiva de los elementos.
Pero la interfaz de Canoma también presenta algunas deficiencias que pueden hacer el manejo de esta aplicación un tanto incómodo en los equipos con una superficie de monitor un tanto reducida (por ejemplo, 17 pulgadas). En primer lugar, si se ha realizado una ampliación en una zona de la imagen y se selecciona un nuevo objeto, éste no aparecerá dentro del encuadre de ampliación, lo que motiva que deba dar unos cuantos paseos para ubicarlo y llevarlo a la posición deseada. Además, cuando se trabaja con imágenes complejas, el uso de más de 10 objetos llega a ralentizar excesivamente el proceso de asignación de vértices.
Animación. Dando un paso más, Canoma también pone en manos del usuario la posibilidad de generar animaciones aunque, eso sí, con opciones bastante básicas. La generación de una animación se basa en el uso de fotogramas de referencia, por lo que no se puede decir que el usuario disponga de excesiva flexibilidad
La mejor forma de entender lo que representa este producto es explicar su filosofía de trabajo. Si en las aplicaciones tradicionales de 3-D se trabaja partiendo de un modelado al que, posteriormente, se aplica una textura o una serie de éstas (como si se tratase de la piel que recubre una superficie), en Canoma se da la vuelta al funcionamiento de la generación. En este caso se parte de una imagen o imágenes (generalmente fotografías) para proporcionales posteriormente volumen mediante la asignación de polígonos multilínea básicos a cada una de las partes de la imagen. De este modo, aquellos usuarios que no tengan una especial habilidad a la hora de modelar objetos complejos, encontrarán en este producto un modo excelente y tremendamente sencillo.
Incluso los requerimientos que deberá tener el equipo destinado a trabajar con Canoma son más bajos que los encontrados en la mayoría de las aplicaciones de 3-D, lo que también supone una ventaja adicional. En concreto, los usuarios Apple deberán disponer de un Power Mac con 32 MB de memoria RAM, 50 MB de espacio libre en disco duro y el Mac OS 8.0 o superior. En el caso de los usuarios que va-
yan a utilizar esta aplicación con un equipo compatible Windows, la cantidad necesaria de RAM y espacio en disco duro son los mismos, salvo que se recomienda su uso a partir de equipos con procesadores Pentium. En cuanto a sistema operativo, Canoma es compatible con Windows 95/98 y NT 4.0.
Interfaz de usuario. Metacreations ha sido una compañía de software que, desde sus orígenes y a lo largo del paso de los años y cambios de nombre de la empresa, siempre ha mantenido constante la presencia de unas interfaces de usuario espectaculares. Canoma sigue con esta tradición en la que se intenta simplificar la forma de acceder a las diferentes opciones y elementos de la aplicación, aunque también están accesibles todas las funciones mediante los típicos menús.
La forma de trabajo es realmente sencilla, ya que al encontrarse recogidas las funciones comunes bajo un mismo módulo los usuarios no se verán perdidos entre las herramientas de esta aplicación. Uno de estos módulos es el encargado de contener la imagen o imágenes que servirán como plantilla base o bien como texturas de apoyo para aplicar en un mismo proyecto; en la parte inferior de la interfaz, tras hace clic en la pestaña “Create” se podrá acceder a todos los polígonos (tales como cubos, triángulos, esferas, pirámide, pirámide truncada, arco, escaleras, etc.) que el usuario podría necesitar para asignar a cada una de las partes de la fotografía sobre la que se esté trabajando.
Por otro lado, bajo el epígrafe de controles de cámara se podrá seleccionar entre el modo de edición o el de “visualización”. Este último se corresponde, realmente, a la generación (render) de proyecto hasta el momento y, por tanto, se podrán utilizar los controles de giro (hasta 360 grados) para ver el resultado en 3-D de la imagen original.
Además de los polígonos, que podríamos llamar de extrusión, Canoma facilita otras herramientas mediante las cuales el usuario podrá desde crear un plano de tierra hasta realizar operaciones destinadas a facilitar la tarea de edición: alineamiento de diferentes elementos, edición en modo de línea, añadir puntos (muy útil para realizar pliegues) y los evidentes controles de ampliación para poder ajustar la asignación de los vértices de un polígono determinado con el correspondiente objeto en la fotografía bidimensional.
Otros botones de la interfaz permiten ajustar la profundidad de campo para la cámara e incluso rotarla; especialmente útiles para la generación de animaciones (aspecto que describiremos posteriormente).
La calidad final dependerá de la propia calidad de la fotografía original, pues el resultado final utiliza ésta como textura para cada una de las caras de los objetos en el resultado 3-D. Adicionalmente, Canoma permite retocar las imágenes (o texturas) desde un editor externo, por lo que el usuario ganará en flexibilidad sin tener que preocuparse de aspectos tales como la perspectiva de los elementos.
Pero la interfaz de Canoma también presenta algunas deficiencias que pueden hacer el manejo de esta aplicación un tanto incómodo en los equipos con una superficie de monitor un tanto reducida (por ejemplo, 17 pulgadas). En primer lugar, si se ha realizado una ampliación en una zona de la imagen y se selecciona un nuevo objeto, éste no aparecerá dentro del encuadre de ampliación, lo que motiva que deba dar unos cuantos paseos para ubicarlo y llevarlo a la posición deseada. Además, cuando se trabaja con imágenes complejas, el uso de más de 10 objetos llega a ralentizar excesivamente el proceso de asignación de vértices.
Animación. Dando un paso más, Canoma también pone en manos del usuario la posibilidad de generar animaciones aunque, eso sí, con opciones bastante básicas. La generación de una animación se basa en el uso de fotogramas de referencia, por lo que no se puede decir que el usuario disponga de excesiva flexibilidad
