Radiografía del estado de la nube en Andalucía
Los negocios almerienses y jienenses son los más conocedores de las posibilidades de la nube mientras que las empresas de Jaén, Granada, Sevilla y Málaga son las que han desarrollado más proyectos de cloud computing. A la cola del mundo cloud en Andalucía se sitúan Huelva y Córdoba, según un estudio de Eticom.
El modelo de entrega de servicios cloud, esencial para que las pymes puedan emprender proyectos TIC a un coste asumible, está asentándose poco a poco en el mercado español y por extensión, en cada una de las regiones del país. Pero el nivel de desarrollo en materia cloud varía mucho entre las distintas CCAA y no hablemos entre provincias.
Tal es el caso de Andalucía, comunidad sobre la que Eticom ha realizado una encuesta entre más de 1.000 empresas del sector TIC y que ha arrojado interesantes conclusiones sobre las diferencias entre las provincias de esta CCAA.
Así, Almería y Jaén se posicionan como las provincias en donde las empresas conocen mejor las tecnologías cloud y sus posibilidades, en contraposición a Huelva y Córdoba que son las que menos información poseen acerca de este nuevo paradigma.
No es de extrañar que tanto Huelva como Córdoba (junto a Almería en este caso) sean las zonas en que menos empresas están desarrollando proyectos cloud. Jaén, Granada, Sevilla y Málaga lideran la cantidad de iniciativas en la nube desarrolladas hasta el momento.
Por otro lado, entre las empresas andaluzas que desarrollan proyectos utilizando tecnologías en la nube destacan las pequeñas y medianas empresas sobre las microempresas y las grandes empresas y el desarrollo de nuevas aplicaciones o productos constituye la tipología de proyecto cloud más destacada.
Respecto a la facturación, en el 70% de las iniciativas emprendidas por las empresas TIC de la región representan menos del 20 por ciento de su facturación. En el extremo opuesto se encuentra un 2% de empresas, para las que estos proyectos suponen más del 80 por ciento de la facturación.
Las principales barreras existentes para la transición de las empresas al modelo cloud son "la desconfianza, principalmente, de la clientela y las necesidades de financiación, infraestructuras, tecnología y/o personal, así como el desconocimiento de cómo trabajar bajo el nuevo modelo son los mayores inhibidores de la implantación de entornos cloud", concluye el estudio de Eticom.