La nube lidera las tendencias de almacenamiento
La preocupación por la seguridad de la información hace que el modelo se oriente hacia la cloud privada
Con 15 petabytes de datos nuevos al día y un volumen de crecimiento continuo, la capacidad de almacenar de forma sencilla con un acceso fácil es un reto para los proveedores y departamentos de TI. Los métodos tradicionales para guardar la información resultan costosos, ineficientes e incapaces de seguir el ritmo de las necesidades del mercado. Están empezando a ocupar su lugar métodos más eficientes e inteligentes.
De manera simultánea al crecimiento exponencial del volumen de datos (IDC predice una tasa de casi el 60% anual), aparecen una variedad de atractivas ofertas de almacenamiento cloud, tanto en modelos privados, públicos como híbridos. Los tres ofrecen servicios a gran escala, una mejor capacidad de planificación y más flexibilidad para satisfacer las demandas del usuario, pero debido a la creciente preocupación por la vulnerabilidad de los datos en las nubes públicas, la mayoría de las inversiones se dirigen al modelo privado.
Gartner predice que en 2012 las empresas de TI de Global 1000 gastarán más dinero en construir servicios privados cloud que en contratar ofertas a los proveedores.
Algo que se hace evidente para las empresas que están impulsando el cambio hacia la nube es que el statu quo no es suficiente. Los procesos antiguos de almacenamiento y gestión de la información no pueden seguir dando soporte al nuevo modelo. El aluvión de datos, en combinación con la crisis económica, está forzando a la innovación. Están apareciendo nuevas soluciones que integran el almacenamiento virtual con otros elementos basados en la misma tecnología y parece que aumentará la agregación de software, lo que conducirá a incrementar el rendimiento a gran escala y a la aparición de soluciones de alta disponibilidad y bajo coste. Los clientes también van a buscar una mayor eficiencia del sistema, como funciones de compresión en tiempo de real, eliminación de duplicados y migración de datos.
Infraestructura convergente
Estas soluciones conducirán a una infraestructura convergente que se mantendrá unida a través del software de gestión de servicios. A medida que se vaya utilizando la clasificación y ubicación automatizada de datos, para asegurar que los recursos adecuados se aplican a las necesidades empresariales correctas, las demandas de almacenamiento también aumentarán. Se buscarán proveedores que puedan ofrecer una capa de gestión de servicio capaz de integrarse con servidores, almacenamiento, software y creación de redes en una sola oferta.
Los clientes necesitan solucionar la optimización de la eficiencia en el uso de los activos de su infraestructura, la mejora de la respuesta a los fallos de hardware, nuevas normas u oportunidades de negocio y el ajuste de las funciones de la infraestructura con los objetivos del negocio y sus políticas, todo bajo un único techo.
También se observa un aumento en la necesidad de disponer de una clasificación de datos más inteligente, ya que el volumen es demasiado grande como para que la manejen los departamentos de TI, y los requisitos reglamentarios se están volviendo más estrictos en cuanto a seguridad, conservación y acceso. Los datos deben gestionarse de manera que satisfagan estas necesidades y cumplan con su potencial para usarse como herramienta para la innovación empresarial. Se clasificarán para tener una ubicación óptima como datos calientes, siempre disponibles y con acceso ilimitado, y datos fríos, que se almacenarán para utilizarlos posteriormente. Todo esto se llevará a cabo por etapas para permitir que los clientes gestionen los datos críticos y los datos secundarios de manera diferente.
Una vez estén clasificados, podrá accederse a ellos a través de varias tecnologías de almacenamiento como unidades de estado sólido, en cinta o disco.
Funciones de la cinta
También se están observando nuevas oportunidades para el almacenamiento en cinta. Aunque últimamente el almacenamiento en disco ha crecido en popularidad, el de cinta está experimentando un resurgimiento gracias al aumento de la cantidad archivos digitales.
Muchos factores están impulsando el uso continuo de la cinta: cuesta una quinta parte, es 290 veces más económico en términos de coste energético, su duración es de 30 años o más y el compromiso de los proveedores para mantener la relevancia de esta tecnología garantiza que no se convierta en algo obsoleto.
De manera simultánea al crecimiento exponencial del volumen de datos (IDC predice una tasa de casi el 60% anual), aparecen una variedad de atractivas ofertas de almacenamiento cloud, tanto en modelos privados, públicos como híbridos. Los tres ofrecen servicios a gran escala, una mejor capacidad de planificación y más flexibilidad para satisfacer las demandas del usuario, pero debido a la creciente preocupación por la vulnerabilidad de los datos en las nubes públicas, la mayoría de las inversiones se dirigen al modelo privado.
Gartner predice que en 2012 las empresas de TI de Global 1000 gastarán más dinero en construir servicios privados cloud que en contratar ofertas a los proveedores.
Algo que se hace evidente para las empresas que están impulsando el cambio hacia la nube es que el statu quo no es suficiente. Los procesos antiguos de almacenamiento y gestión de la información no pueden seguir dando soporte al nuevo modelo. El aluvión de datos, en combinación con la crisis económica, está forzando a la innovación. Están apareciendo nuevas soluciones que integran el almacenamiento virtual con otros elementos basados en la misma tecnología y parece que aumentará la agregación de software, lo que conducirá a incrementar el rendimiento a gran escala y a la aparición de soluciones de alta disponibilidad y bajo coste. Los clientes también van a buscar una mayor eficiencia del sistema, como funciones de compresión en tiempo de real, eliminación de duplicados y migración de datos.
Infraestructura convergente
Estas soluciones conducirán a una infraestructura convergente que se mantendrá unida a través del software de gestión de servicios. A medida que se vaya utilizando la clasificación y ubicación automatizada de datos, para asegurar que los recursos adecuados se aplican a las necesidades empresariales correctas, las demandas de almacenamiento también aumentarán. Se buscarán proveedores que puedan ofrecer una capa de gestión de servicio capaz de integrarse con servidores, almacenamiento, software y creación de redes en una sola oferta.
Los clientes necesitan solucionar la optimización de la eficiencia en el uso de los activos de su infraestructura, la mejora de la respuesta a los fallos de hardware, nuevas normas u oportunidades de negocio y el ajuste de las funciones de la infraestructura con los objetivos del negocio y sus políticas, todo bajo un único techo.
También se observa un aumento en la necesidad de disponer de una clasificación de datos más inteligente, ya que el volumen es demasiado grande como para que la manejen los departamentos de TI, y los requisitos reglamentarios se están volviendo más estrictos en cuanto a seguridad, conservación y acceso. Los datos deben gestionarse de manera que satisfagan estas necesidades y cumplan con su potencial para usarse como herramienta para la innovación empresarial. Se clasificarán para tener una ubicación óptima como datos calientes, siempre disponibles y con acceso ilimitado, y datos fríos, que se almacenarán para utilizarlos posteriormente. Todo esto se llevará a cabo por etapas para permitir que los clientes gestionen los datos críticos y los datos secundarios de manera diferente.
Una vez estén clasificados, podrá accederse a ellos a través de varias tecnologías de almacenamiento como unidades de estado sólido, en cinta o disco.
Funciones de la cinta
También se están observando nuevas oportunidades para el almacenamiento en cinta. Aunque últimamente el almacenamiento en disco ha crecido en popularidad, el de cinta está experimentando un resurgimiento gracias al aumento de la cantidad archivos digitales.
Muchos factores están impulsando el uso continuo de la cinta: cuesta una quinta parte, es 290 veces más económico en términos de coste energético, su duración es de 30 años o más y el compromiso de los proveedores para mantener la relevancia de esta tecnología garantiza que no se convierta en algo obsoleto.
