"Hemos adaptado nuestra oferta a los nuevos retos de seguridad, al vídeo y a la nube"
Miguel Ángel Martos, country manager de Blue Coat para España y Portugal
Tras ocho meses como country manager de Blue Coat para España y Portugal, Miguel Ángel Martos prevé cerrar el presente año fiscal siguiendo la misma evolución positiva registrada por la compañía en los últimos años. Para ello Martos confía en los puntos fuertes de Blue Coat en sus dos áreas de negocio: seguridad web y aceleración. En ambas el fabricante está adaptando su porfolio a las tendencias clave del mercado como el vídeo y cloud computing. Ahora Blue Coat abre además una nueva etapa de desarrollo tras su compra por un grupo de firmas de inversión liderado por Thoma Bravo.
¿Con qué objetivos asume la dirección de Blue Coat en España?
- He llegado a Blue Coat con el reto de mantener la inercia positiva que lleva registrando la compañía en España y Portugal en los últimos años, en línea con nuestro éxito a escala global. El pasado año fiscal fue muy bueno, especialmente en seguridad web, y mi objetivo es seguir creciendo, además de mantener cohesionado nuestro equipo local.
¿Para qué sectores y tipos de empresa están más indicadas las soluciones de Blue Coat?
- Aunque estamos más presentes en las muy grandes organizaciones, nuestra intención es ganar cuota también en las medianas. Por otro lado, hemos constatado que el perfil de cliente al que nos dirigimos está evolucionando al igual que lo hace la economía, y en consecuencia en este ejercicio hemos tenido menos éxito en la Administración por razones presupuestarias. Y prevemos que en 2012 sucederá algo parecido. Podemos decir por ello que en la actualidad son el sector financiero y el industrial nuestros mayores mercados.
¿Qué grandes tendencias están afectando al negocio de seguridad web?
- En este segmento hay básicamente dos tendencias principales que están afectando al comportamiento de las empresas. La primera es que los mecanismos tradicionales de protección de malware ya no son útiles porque los ataques hoy son del tipo de ‘día cero’, que, como duran pocas horas, precisan respuestas en tiempo real y proactivas. La segunda es que los ataques proceden hoy de sitios considerados fiables hasta ahora, como buscadores y redes sociales, por lo que tampoco son aplicables aquí las soluciones convencionales.
Para dar respuesta a estas dos carencias hemos desarrollado una tecnología que, por un lado, inspecciona el tráfico de nuestros clientes en tiempo real para identificar amenazas antes de que lleguen a sus redes y, por otro, busca constantemente patrones de comportamiento en Internet para detectar la creación de redes de despliegue de malware. Esto es posible gracias a que los 75 millones de usuarios están conectados constantemente a un servicio en la nube donde investigamos todas las conexiones. En el momento en que detectamos una amenza potencial la notificamos a toda nuestra base instalada para evitar que prospere.
¿Y al negocio de optimización WAN?
- Una vez que muchas de las aplicaciones que estaban en las oficinas locales, y que no estaban creadas de origen para trabajar en remoto, se han trasladado al data center central, ya no basta con incrementar el ancho de banda de la WAN. Por ello fue necesario crear tecnología de aceleración WAN que hiciera posible que esas aplicaciones se comportarán en remoto igual que en local. Hoy, además, es necesario adaptarse a la nueva naturaleza del tráfico WAN, en el que el vídeo cada vez tiene mayor presencia. En la actualidad el 50% del tráfico es de vídeo y acelerar este tipo de transmisiones es muy complicado. De hecho, somos el único fabricante del mercado con tecnologías de optimización WAN especialmente diseñadas para soportar tráfico de vídeo.
¿Cómo afecta cloud computing al tráfico WAN?
- Cloud computing es otra de las grandes tendencias que está afectando a la aceleración WAN, puesto que no permite interoperar con la nube pública para optimizar el flujo de datos que llegan a la empresa ya que el cliente pierde el control de uno de los extremos. Para solventar este inconveniente hemos desarrollado tecnología de ‘optimización asimétrica’, que también acelera el tráfico que procede de la nube. Es decir, cloud es ahora para nosotros también una fuente de negocio, especialmente cuando implica tráfico pesado.
¿Las soluciones de Blue Coat se suministran de forma tradicional o también se pueden adoptar bajo el modelo cloud computing?
- En seguridad web sí ofrecemos también un modelo de suministro en la nube que complementa el modelo convencional basado en la instalación de equipos en la sede del cliente. Además hay una tercera opción que consiste en un servicio híbrido donde el cliente puede instalar físicamente dispositivos en su sede, con las ventajas que eso conlleva en cuanto a control, al tiempo que securiza otras partes de sus infraestructuras con nuestros servicios cloud. Lo acabamos de anunciar y tiene un gran futuro por delante.
“Todo seguirá igual”
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¿Supondrá algún cambio estratégico la venta de Blue Coat a Thoma Bravo por 1.300 millones de dólares?
- Como ha comentado nuestro vicepresidente, Steve Daheb, nuestro negocio sigue funcionando de la misma manera. Aunque la propiedad de las acciones haya cambiado, nosotros seguimos trabajando para los mismos mercados y clientes. Seguiremos ofreciendo valor a través de nuestros productos y seguiremos desarrollándolos.
¿Con qué objetivos asume la dirección de Blue Coat en España?
- He llegado a Blue Coat con el reto de mantener la inercia positiva que lleva registrando la compañía en España y Portugal en los últimos años, en línea con nuestro éxito a escala global. El pasado año fiscal fue muy bueno, especialmente en seguridad web, y mi objetivo es seguir creciendo, además de mantener cohesionado nuestro equipo local.
¿Para qué sectores y tipos de empresa están más indicadas las soluciones de Blue Coat?
- Aunque estamos más presentes en las muy grandes organizaciones, nuestra intención es ganar cuota también en las medianas. Por otro lado, hemos constatado que el perfil de cliente al que nos dirigimos está evolucionando al igual que lo hace la economía, y en consecuencia en este ejercicio hemos tenido menos éxito en la Administración por razones presupuestarias. Y prevemos que en 2012 sucederá algo parecido. Podemos decir por ello que en la actualidad son el sector financiero y el industrial nuestros mayores mercados.
¿Qué grandes tendencias están afectando al negocio de seguridad web?
- En este segmento hay básicamente dos tendencias principales que están afectando al comportamiento de las empresas. La primera es que los mecanismos tradicionales de protección de malware ya no son útiles porque los ataques hoy son del tipo de ‘día cero’, que, como duran pocas horas, precisan respuestas en tiempo real y proactivas. La segunda es que los ataques proceden hoy de sitios considerados fiables hasta ahora, como buscadores y redes sociales, por lo que tampoco son aplicables aquí las soluciones convencionales.
Para dar respuesta a estas dos carencias hemos desarrollado una tecnología que, por un lado, inspecciona el tráfico de nuestros clientes en tiempo real para identificar amenazas antes de que lleguen a sus redes y, por otro, busca constantemente patrones de comportamiento en Internet para detectar la creación de redes de despliegue de malware. Esto es posible gracias a que los 75 millones de usuarios están conectados constantemente a un servicio en la nube donde investigamos todas las conexiones. En el momento en que detectamos una amenza potencial la notificamos a toda nuestra base instalada para evitar que prospere.
¿Y al negocio de optimización WAN?
- Una vez que muchas de las aplicaciones que estaban en las oficinas locales, y que no estaban creadas de origen para trabajar en remoto, se han trasladado al data center central, ya no basta con incrementar el ancho de banda de la WAN. Por ello fue necesario crear tecnología de aceleración WAN que hiciera posible que esas aplicaciones se comportarán en remoto igual que en local. Hoy, además, es necesario adaptarse a la nueva naturaleza del tráfico WAN, en el que el vídeo cada vez tiene mayor presencia. En la actualidad el 50% del tráfico es de vídeo y acelerar este tipo de transmisiones es muy complicado. De hecho, somos el único fabricante del mercado con tecnologías de optimización WAN especialmente diseñadas para soportar tráfico de vídeo.
¿Cómo afecta cloud computing al tráfico WAN?
- Cloud computing es otra de las grandes tendencias que está afectando a la aceleración WAN, puesto que no permite interoperar con la nube pública para optimizar el flujo de datos que llegan a la empresa ya que el cliente pierde el control de uno de los extremos. Para solventar este inconveniente hemos desarrollado tecnología de ‘optimización asimétrica’, que también acelera el tráfico que procede de la nube. Es decir, cloud es ahora para nosotros también una fuente de negocio, especialmente cuando implica tráfico pesado.
¿Las soluciones de Blue Coat se suministran de forma tradicional o también se pueden adoptar bajo el modelo cloud computing?
- En seguridad web sí ofrecemos también un modelo de suministro en la nube que complementa el modelo convencional basado en la instalación de equipos en la sede del cliente. Además hay una tercera opción que consiste en un servicio híbrido donde el cliente puede instalar físicamente dispositivos en su sede, con las ventajas que eso conlleva en cuanto a control, al tiempo que securiza otras partes de sus infraestructuras con nuestros servicios cloud. Lo acabamos de anunciar y tiene un gran futuro por delante.
“Todo seguirá igual”
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¿Supondrá algún cambio estratégico la venta de Blue Coat a Thoma Bravo por 1.300 millones de dólares?
- Como ha comentado nuestro vicepresidente, Steve Daheb, nuestro negocio sigue funcionando de la misma manera. Aunque la propiedad de las acciones haya cambiado, nosotros seguimos trabajando para los mismos mercados y clientes. Seguiremos ofreciendo valor a través de nuestros productos y seguiremos desarrollándolos.
