Windows 8 afronta el lento camino hacia el entorno corporativo

Muchas son los planteamientos que se presentan respecto al despliegue del nuevo sistema operativo de Microsoft, Windows 8. Así, se afirma que el reconocido liderazgo de Microsoft en el ámbito de la informática de uso personal puede empezar a notar la altísima competitividad que presentan los jugadores de un nuevo mundo en el que el PC está perdiendo enteros frente al surgimiento de otro tipo de dispositivos como las tablets o los smartphones en los que Microsoft no es el líder. En este sentido, y durante su lanzamiento en Nueva York, el CEO de Microsoft, Steve Ballmer aseguró que Windows 8 supone un cambio absolutamente radical frente a su predecesor Windows7, “Windows ha sido concebido para proveer de un único interface a un amplio abanico de dispositivos, desde los smartphones hasta los tablets pasando por los tradicionales PCs” Asimismo, apuntó que ahora ya es posible presentar una alternativa clara y real a iOS de Apple o a Android de Google. En este mismo sentido, portavoces de Microsoft apuntaron que Windows 8 puede marcar un nuevo éxito similar al que registró Windows7 que se certifica en unas ventas de 670 millones de licencias. Referente a esto, Gartner apunta que efectivamente el crecimiento de Windows8 deberá generarse por el mercado de consumo ya que el entorno corporativo no parece muy dispuesto a iniciar de forma rápida las tareas de migración.”Por el momento no existen imperativos de negocios que impulsen el movimiento hacia Windows 8. No será por lo menos hasta 2014 cuando el entorno corporativo inicie su cambio hacia Windows8”. Aún así, la firma de análisis quiso puntualizar que “esto no significa que el despliegue de Windows8 no sea efectivo sino que las grandes corporaciones nunca se han movido de forma muy rápida hacia las nuevas versiones del sistema operativo de Microsoft ya que hay muchas aplicaciones que deben ser testadas perfectamente y todo esto consume periodos de tiempo considerables”. Aún así, el analista de Gartner apunta que la única clave para que se produzca ese rápido movimiento hacia Windows 8 se sitúa en la posibilidad de que el mercado de tablets supere rápidamente al mercado de PCs.