Un perfil de negocio

Mesa redonda

Aunque todo hacia indicar que el vocablo CIO (Chief Information Officer) era ya una realidad en nuestro país, varias son las voces que avisan que su adopción tanto en el sector público como privado ha sido más un cambio de nombre que una evolución hacia nuevas responsabilidades de gestión de un área de negocio. Lo cierto es que en la mayor parte de los casos, el rol del responsable de Sistemas evoluciona y cambia según la importancia que tiene la tecnología para la empresa.

Rubén Muñoz (Correos).- La figura del CIO existe en nuestro país. En los últimos años ha existido un cambio de percepción, en la empresa privada y en la Administración sobre cuál es la función que debe tener el responsable de Sistemas. Hasta ahora su función se centraba en conseguir que los servicios informáticos funcionaran, pero cada vez más la empresa se ha dado cuenta de la importancia de la informática para conseguir los objetivos de negocio de la empresa. Cada vez más, en las empresas no existen áreas aisladas de informática sino más bien una interrelación entre los departamentos. En este escenario, el responsable de Sistemas cuenta con una postura privilegiada ya que tiene una visión completa e integral de todos los procesos y de toda la organización.
Antonio Fernández (Cepsa ELF Gas).- Las nuevas responsabilidades del director de Sistemas son un paso más de la evolución económica. En España, como en cualquier otro país, las empresas toman conciencia de las Tecnologías de la Información. Las empresas se han dado cuenta que sin las TI no van a ninguna parte. Por ello, la introducción de las TI en el sector industrial no ha sido una consecuencia sino más bien una imposición.
Eladio Quintanilla (Tesorería General de la Seguridad Social).- Atrás se ha quedado la concepción del director de Sistemas donde se preocupaba más por descubrir nuevos dispositivos que por desarrollar el negocio. La cultura informática se ha impuesto en la sociedad del mercado principalmente por la evolución de la propia informática. Por otra parte, y debido a que la informática está presente en casi todos los puntos de decisión de la empresa, el director de Sistemas puede ofrecer una visión general del negocio. Así, desde hace unos años, el director de Sistemas ha entrado a formar parte del Consejo de Administración debido al peso que cada vez más está teniendo la informática en la Seguridad Social.
Jesús Marquina (Bankinter).- Pertenezco a una empresa donde no se sabe hacer nada sin tecnología, donde la esencia de los sistemas es una realidad. Por su parte, el rol del director de Sistemas ha evolucionado mucho en los últimos años. En su inicio, lo único que se le exigía al director de Sistemas era que proporcionara una buena calidad de servicio. Hoy por hoy, en Bankinter nadie se preocupa por eso ya que es algo que se da por supuesto. Por tanto, la prioridad del director de Sistemas es saber invertir adecuadamente el presupuesto y paralelamente, tener una preocupación por el negocio.

La importancia de las TI en el negocio
Rubén Muñoz (Correos).- La presencia del director de Sistemas en el Consejo de Administración no es tanto un mérito del responsable de informática sino más bien una evolcución natural del mercado. Así, en de las 200 nuevas iniciativas identificadas en el Plan Estratégico de Correos más de la mitad requieren de un soporte tecnológico.
Antonio Fernández (Cepsa ELF Gas).- La integración de la tecnología no es un proceso sencillo. Son admirables los resultados conseguidos tanto en la Seguridad Social como en Correos. En otros casos, si bien consideran que las Tecnologías de la Información son un elemento necesario para el negocio no tienen muy claro que sean vitales para su desarrollo.
Jaime García (IDC).- No hay más remedio que convencer a la dirección de la importancia de la tecnología. Por ello se buscan perfiles de director de Sistemas que sepan dar credibilidad a la tecnología. Así, es necesario que el CIO priorice la rentabilidad de la inversión tecnológica. La presencia del director de Sistemas en el Consejo de Administración no debe ser una prioridad sino que es más bien un hecho anecdótico.
Jesús Marquina (Bankinter).- En la banca, entendida como un negocio de información, cualquier desarrollo o iniciativa debe ir obligatoriamente unido a la tecnología. La tecnología es el propio negocio porque el negocio es información. En Bankinter, la entrada de la tecnología ha sido fruto de una evolución natural del propio convencimiento de la empresa.
Antonio Fernández (Cepsa ELF Gas).- Muchos son los casos en donde una de las principales excusas que se esconde dentro de una inversión en Tecnologías de la Información es la competencia de mercado. Por otra parte, resulta imprescindible que el director general de la compañía sea sensible a la inversión en Tecnologías de la Información.
Jesús Marquina (Bankinter).- En una entidad como Bankinter, el consejero delegado es un hombre con fe en el desarrollo de la tecnología. Sólo un apersona con estas condiciones es capaz de irse cuatro meses al MIT (Massachusets Institute of Technology) a aprender cosas que tengan que ver con tecnología.
Eladio Quintanilla (Tesorería General de la Seguridad Social).- A diferencia de la empresa privada, en la Administración Pública no tiene con fin último ganar dinero sino más bien dar ser servicio al ciudadano. Por otra parte, la introducción cada vez más de las Tecnologías de la Información en el mensaje político ha facilitado la demanda de recursos pero también ha supuesto una mayor presión, ya que se exigen resultados y beneficios.

La exigencia del ROI
Antonio Fernández (Cepsa ELF Gas).- La exigencia del ROI está muy acorde con la importancia o magnitud del proyecto que se lleve a cabo.
Jesús Marquina (Bankinter).- Actualmente, existe una presión para exigir el ROI de una inversión tecnológica. En este sentido, en Bankinter se ha adoptado una nueva iniciativa de profesionalización de las inversiones de negocio. De esta forma se evitan pasionalidades y que se dedique el dinero hacia aquellos aspectos que desde un punto de vista objetivo vayan a obtener un ROI. Y todo ello a través de una patrón de análisis común. Esto implica una postura de humildad y de renuncia a cuota de poder.
Jaime García (IDC).- Hoy en día, el ROI está muy bien pero el objetivo de una empresa es ofrecer algo más enfocado a la prestación de servicios.
Rubén Muñoz (Correos).- El ROI no puede ser siempre la clave de todo proyecto ya que no es tan fácilmente medible. El criterio debe ser analizar la oportunidad del gasto, no valorando sólo los beneficios económicos sino también los valores intangibles.
Jesús Marquina (Bankinter).- La decisión última de inversión en TI debe corresponder tanto a la gente de negocio como a la de tecnología, asumiendo todos el riesgo.
Rubén Muñoz (Correos).- No debe sorprender cuando al desarrollar un sistema de información para una funcionalidad específica de la compañía, el responsable de informática sea quien defienda el proyecto ante el Consejo de Administración a pesar de que la solución presentada tiene una relación directa con un área de n

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

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