Un modelo hecho en España con calidad internacional
Muy pocas organizaciones tienen la oportunidad y capacidad de ser reconocidas oficialmente con algún nivel CMM, y a nivel mundial, sólo el 6% de las organizaciones que aplican CMM han obtenido su máximo nivel. Coritel (Grupo Accenture) disfruta de ese privilegio desde 1999, y ostenta, desde el año 2003 el máximo nivel posible.
Accenture ha utilizado CMM para certificar que estamos en la excelencia”. Así al menos explica Juan Marín, socio director de Coritel, las razones que motivaron que la consultora alcanzara, por primera vez en España, el nivel 5 de CMM para sus centros de desarrollo de software. La obtención del máximo grado de certificación de calidad a finales de 2003, “fue una consecuencia, más que una motivación, así como el reconocimiento internacional de un modelo realizado en nuestro país”, indica Marín.
Aunque los comienzos de Coritel se remontan a finales de los años 80, el verdadero despegue de la marca se produce en los 90, coincidiendo con la explosión de la globalización de los servicios de TI. En un período donde el mercado comenzaba a asimilar positivamente conceptos como la deslocalización de los servicios, los proveedores pusieron en marcha sus primeras iniciativas en la creación de centros de desarrollo de software fuera de sus fronteras naturales. Aunque en un principio todas la miradas de los responsables de Accenture se dirigían hacia el sudeste asiático (India, Malasia o Filipinas), lo cierto es que la filial española supo aprovechar la coyuntura que vivía el mercado para mostrar al mundo el modelo de centro de desarrollo puesto en marcha por Coritel en nuestro país. El modelo “gustó”, y a partir de ese momento, Coritel convive con una dualidad funcional. Por un lado, se presenta como proveedor de servicios a proyectos internacionales, y por otra parte, actúa como coordinador de la exportación de su modelo de negocio bajo la denominación de Accenture Technology Solutions (ATS) en el resto de países.
Claves del éxito
El éxito del modelo de Coritel, según su principal responsable, radica en tres pilares básicos que lo forman. En primer lugar, las oficinas del cliente, donde conviven los usuarios y los equipos de trabajo de Accenture y Coritel. Un segundo pilar, formado por los Centros de Desarrollo Especializado, con conocimientos de un segmento de la industria o una solución específica. En tercer lugar, se encuentran los centros de desarrollo globales, ubicados en lugares que permiten reducciones de coste adicionales. Bajo estas premisas, los centros de desarrollo de software de Coritel pasaron de un nivel 3 al máximo nivel de certificación de CMM en menos de un año. “Pero una cosa es cierta, -indica Ulises Arranz, director asociado de Accenture-, no se habría alcanzado esos niveles de excelencia, prestigio y reconocimiento, sin la guía y ayuda que han supuesto ISO9001:2000 y SW-CMM. Claves, ambas, en la implantación de la mejora continua como un hábito de la organización, marcando una agenda, un calendario y unos retos que han empujado una evolución constante”.
Una mención especial en el organigrama del modelo de Coritel lo merecen los Centros de Desarrollo Especializado. La creación en 1992 de los primeros centros en Madrid y Málaga han permitido a la filial española de Accenture dar respuestas al desarrollo de soluciones en un contexto internacional. Prueba de ello, es que a día de hoy, y siempre según cifras de Accenture, los Centros españoles centran el 60% de su actividad en la exportación de tecnología, con un 70% de clientes europeos y un 30% de americanos.
Problemas de implantación
El alcanzar un nivel de certificación de calidad no es un proceso sencillo. Así, para la obtención de los niveles 2 y 3 de CMM el principal obstáculo “fue la universalización de los procesos y no tanto su definición, que ya existía en la compañía”, indica Arranz. Para los niveles posteriores, los problemas “fueron mayores”. “Nuestro programa de métricas, iniciado en 1996, estaba muy ligado al producto y no tanto a los procesos”. Fue precisamente el incremento en el número de métricas de 6 a 39 lo que incorporó mayor complejidad en la obtención de la certificación.
Beneficios
El reconocimiento del mercado es uno de los principales beneficios que se ha obtenido de la certificación de CMM, además “nos ha permitido consolidar una práctica de mejora continua de todos los procesos y personas que forman parte del ciclo de desarrollo del software en los centros”, indica Marín. “E incrementar la certidumbre sobre los resultados y minimizar el riesgo de desarrollo de software con un nivel de desviación inferior al 2%”, indica. En valores cuantitativos, el nivel 5 ha elevado la reusabilidad en el desarrollo de software en 11 puntos, desde 52% a un 63%. En líneas de código por persona y día se ha llegado a las 405. Además, “un 95% de las entregas se hacen antes o en fecha, mientras que el retraso no supera los dos días”, apunta Arranz.
Accenture afronta un nuevo período de actualizaciones de nivel 5 de CMM a un mismo nivel pero en CMMi, “que se alcanzará, presumiblemente, en este año”, indica Arranz.
Cifras de Coritel
-----------------------
• 332 millones de euros de facturación en su año fiscal de 2004 (finalizado en agosto 2004). Un crecimiento del 29% si se compara con el año fiscal anterior.
• 6.350 profesionales repartidos por todo el mundo.
Accenture ha utilizado CMM para certificar que estamos en la excelencia”. Así al menos explica Juan Marín, socio director de Coritel, las razones que motivaron que la consultora alcanzara, por primera vez en España, el nivel 5 de CMM para sus centros de desarrollo de software. La obtención del máximo grado de certificación de calidad a finales de 2003, “fue una consecuencia, más que una motivación, así como el reconocimiento internacional de un modelo realizado en nuestro país”, indica Marín.
Aunque los comienzos de Coritel se remontan a finales de los años 80, el verdadero despegue de la marca se produce en los 90, coincidiendo con la explosión de la globalización de los servicios de TI. En un período donde el mercado comenzaba a asimilar positivamente conceptos como la deslocalización de los servicios, los proveedores pusieron en marcha sus primeras iniciativas en la creación de centros de desarrollo de software fuera de sus fronteras naturales. Aunque en un principio todas la miradas de los responsables de Accenture se dirigían hacia el sudeste asiático (India, Malasia o Filipinas), lo cierto es que la filial española supo aprovechar la coyuntura que vivía el mercado para mostrar al mundo el modelo de centro de desarrollo puesto en marcha por Coritel en nuestro país. El modelo “gustó”, y a partir de ese momento, Coritel convive con una dualidad funcional. Por un lado, se presenta como proveedor de servicios a proyectos internacionales, y por otra parte, actúa como coordinador de la exportación de su modelo de negocio bajo la denominación de Accenture Technology Solutions (ATS) en el resto de países.
Claves del éxito
El éxito del modelo de Coritel, según su principal responsable, radica en tres pilares básicos que lo forman. En primer lugar, las oficinas del cliente, donde conviven los usuarios y los equipos de trabajo de Accenture y Coritel. Un segundo pilar, formado por los Centros de Desarrollo Especializado, con conocimientos de un segmento de la industria o una solución específica. En tercer lugar, se encuentran los centros de desarrollo globales, ubicados en lugares que permiten reducciones de coste adicionales. Bajo estas premisas, los centros de desarrollo de software de Coritel pasaron de un nivel 3 al máximo nivel de certificación de CMM en menos de un año. “Pero una cosa es cierta, -indica Ulises Arranz, director asociado de Accenture-, no se habría alcanzado esos niveles de excelencia, prestigio y reconocimiento, sin la guía y ayuda que han supuesto ISO9001:2000 y SW-CMM. Claves, ambas, en la implantación de la mejora continua como un hábito de la organización, marcando una agenda, un calendario y unos retos que han empujado una evolución constante”.
Una mención especial en el organigrama del modelo de Coritel lo merecen los Centros de Desarrollo Especializado. La creación en 1992 de los primeros centros en Madrid y Málaga han permitido a la filial española de Accenture dar respuestas al desarrollo de soluciones en un contexto internacional. Prueba de ello, es que a día de hoy, y siempre según cifras de Accenture, los Centros españoles centran el 60% de su actividad en la exportación de tecnología, con un 70% de clientes europeos y un 30% de americanos.
Problemas de implantación
El alcanzar un nivel de certificación de calidad no es un proceso sencillo. Así, para la obtención de los niveles 2 y 3 de CMM el principal obstáculo “fue la universalización de los procesos y no tanto su definición, que ya existía en la compañía”, indica Arranz. Para los niveles posteriores, los problemas “fueron mayores”. “Nuestro programa de métricas, iniciado en 1996, estaba muy ligado al producto y no tanto a los procesos”. Fue precisamente el incremento en el número de métricas de 6 a 39 lo que incorporó mayor complejidad en la obtención de la certificación.
Beneficios
El reconocimiento del mercado es uno de los principales beneficios que se ha obtenido de la certificación de CMM, además “nos ha permitido consolidar una práctica de mejora continua de todos los procesos y personas que forman parte del ciclo de desarrollo del software en los centros”, indica Marín. “E incrementar la certidumbre sobre los resultados y minimizar el riesgo de desarrollo de software con un nivel de desviación inferior al 2%”, indica. En valores cuantitativos, el nivel 5 ha elevado la reusabilidad en el desarrollo de software en 11 puntos, desde 52% a un 63%. En líneas de código por persona y día se ha llegado a las 405. Además, “un 95% de las entregas se hacen antes o en fecha, mientras que el retraso no supera los dos días”, apunta Arranz.
Accenture afronta un nuevo período de actualizaciones de nivel 5 de CMM a un mismo nivel pero en CMMi, “que se alcanzará, presumiblemente, en este año”, indica Arranz.
Cifras de Coritel
-----------------------
• 332 millones de euros de facturación en su año fiscal de 2004 (finalizado en agosto 2004). Un crecimiento del 29% si se compara con el año fiscal anterior.
• 6.350 profesionales repartidos por todo el mundo.
