Trabaja (en grupo), pero seguro.
La mayor parte de los fabricantes consideran el concepto del trabajo en grupo como uno de los pilares sobre los que se asientan una gran parte de las tecnologías actualmente emegentes. Si bien esta premisa parece ya comunmente aceptada, aún existen lagunas tanto en la existencia de productos como en la utilización de los ya existentes.
Si se pretende fijar como premisa inicial la noción de entornos de trabajo distribuidos como fundamental en la nueva concepción de la informática con la que se ha de encarar el futuro, ha de tenerse bien claro, que el trabajo en grupo ha de ser tenido en cuenta como una base imprescindible para su implantación y desarrollo. En las conclusiones de quienes se dedican a estudiar las complejas implicaciones que los cambios de la tecnología pueden traer aparejadas, la afirmación sobre la necesidad del cambio en las estructuras departamentales, es algo común.
La productividad de los distintos departamentos, se perfila como una de las claves del éxito de los procesos de downsizing y pieza fundamental en los entornos distribuidos.
Esta opinión es plenamente compartida por los dos proveedores y pioneros de la puesta a punto y comercialización de este tipo de productos. Así, tanto Lotus como Microsoft consideran, que el concepto de grupos de trabajo, es susceptible aún de madurar.
Una portavoz de Microsoft expresaba recientemente sus dudas, sobre la claridad de conceptos que los usuarios pueden tener en este momento con respecto al nuevo concepto. La expresión grupos de trabajo, no puede ser aplicada a cualquier tecnología que permite a la gente trabajar junta compartiendo una misma tarea. El concepto va mucho más allá, comentaba dicha portavoz. El aumento de la eficacia por individuo y su productividad, constituyen en palabras de esta especialista, el centro de la nueva tecnología.
De nada sirve la posibilidad que brinda a los usuarios, el compartir ficheros de una base de datos, si dicha capacidad no aumenta las posibilidades de compartir el resto de los recursos que los nuevos productos pueden ofrecer. Una verdadera aplicación de grupos de trabajo, ha de permitir tanto el compartir los datos, como la gestión personal e individualizada del acceso a los ficheros, así como el establecimiento de una serie de rutinas que permiten ahorrar horas de trabajo.
NetWare Lite, LANtastic y Windows para trabajo en grupos, son en este momento, las principales ofertas de los fabricantes de software para este entorno. Sin embargo desde la propia Microsoft, por ejemplo, se reconoce, que si bien el éxito y la aceptación entre los usuarios de WFW ha sido satisfactoria, el producto se está vendiendo más como un Windows para máquinas clientes conectadas a red, que como la base idónea para aplicaciones de trabajo en grupo. Uno de los obstáculos a superar, en una opinión también compartida por Lotus, es la escasez de aplicaciones. La filosofía de las antiguas aplicaciones de ofimática, es tan radicalmente distinta a la nueva distribución del trabajo, que su migración hacia entornos distribuidos no resulta adecuada. Por otra parte y para los usuarios, la implantación de esta filosofía informática departamental con NetWare o LAN Manager, no resulta fácil.
Por otra parte, no existe hasta el momento por parte de los dos fabricantes líderes, Microsoft y Lotus, una oferta global que facilite la implantación de productos capaces de cubrir todas las necesidades. Mientras que los esfuerzos de Microsoft se han centrado en la creación de un sistema operativo sólido, la oferta de Lotus, hasta el momento no deja de ser un entorno para compartir bases de datos o facilitar las reuniones y conferencias departamentales.
Desde el punto de vista de los usuarios, la optimización de las funciones de gestión de la redes sigue siendo la base fundamental sobre la que ha de asentarse el futuro de los grupos de trabajo. Para algunos grandes usuarios corporativos, que han expresado su deseo de implantar esta nueva concepción del trabajo, hasta que la gestión de redes no esté total y absolutamente garantizada de forma rápida y barata, la gestión de diversas aplicaciones simultáneamente seguirá siendo una ilusión.