Telemedicina: servicios sanitarios sin barreras

La reciente aparición del concepto Telemedicina en nuestra sociedad ha provocado una auténtica “revolución” tanto en la forma de concebir la asistencia sanitaria como en el modo de ejercer la profesión médica . La adopción de las tecnologías de la información por la medicina arranca en los años cincuenta cuando los científicos de la NASA preocupados por los efectos de la ingravidez en los astronautas desarrollaron un sistema de asistencia médica que les permitía vigilar constantemente las funciones fisiológicas de los mismos . Posteriormente, se han llevado a cabo proyectos similares cuyo denominador común fue siempre la superación de las barreras del tiempo y la distancia .

Cuarenta años después de estos primeros ensayos, la Telemedicina sigue suscitando un enorme interés alimentado, en gran medida, por los avances en el campo de las telecomunicaciones donde el desarrollo de tecnologías cada vez más sofisticadas, como la realidad virtual, abren nuevas perspectivas .

Internet y los sistemas de vídeoconferencia son, hoy por hoy, los instrumentos de telecomunicaciones que mayor protagonismo ejercen en el desarrollo de la “medicina a distancia” . En la medida que el tiempo de la búsqueda de la información, en el caso de la Red, y el delay de imagen y sonido de que adolecen los sistemas de vídeoconferencia se reduzcan, las posibilidades que ofrecen dichas tecnologías para el ejercicio de la Telemedicina se multiplicarán . Actualmente, Internet proporciona ya algunos servicios de Telemedicina como formación en medicina preventiva, asistencia en casos de urgencia y diagnóstico y apoyo a los pacientes .

Especialidades

De acuerdo a las definiciones que en torno a este concepto se han formulado, la Telemedicina se considera, básicamente, el suministro de servicios de asistencia sanitaria, en los que la distancia constituye un factor crítico . En este sentido, la Telemedicina abarca tantas especialidades como la medicina tradicional; sin embargo, hoy en día, las posibilidades técnicas se muestran insuficientes en algunos casos, para que todas las modalidades médicas se lleven a cabo vía Internet o sistemas de videoconferencia .

Dentro de las especialidades de la Telemedicina habría que diferenciar entre las que se realizan utilizando imágenes fijas ( Telemedicina de almacenamiento y retransmisión ) y las que se llevan a cabo por medio de imágenes móviles ( Telemedicina en tiempo real e interactiva ) . Dentro de las primeras, conocidas bajo el rótulo de teleimaginización, destaca la telerradiología . La radiografía informatizada es una técnica en la que la imagen digital se capta directamente sin necesidad de película como en el caso de la radiografía tradicional . Una vez obtenida la imagen en formato digital se comprime mediante determinadas técnicas con lo que se consigue incrementar tanto la eficacia del almacenamiento como la transmisión de la misma a un lugar distante . Los primeros ensayos en este campo se realizaron en Suecia durante la década de los setenta entre el Hospital de la Universidad de Lund y el Hospital General de Halmö . Actualmente, la transferencia de radiologías es la modalidad de la Telemedicina más difundida .

A diferencia de la radiología tradicional, que necesitó adaptarse al formato digital, otras técnicas de diagnóstico por rayos como la termografía computada ( CT ) , la resonancia magnética ( MR ) , la termografía, la fluoroscopia y la angiografía se integraron perfectamente en este nuevo concepto, al tratarse todos ellas, de imágenes en soporte digital .

Entre las especialidades de Telemedicina que, pueden realizar diagnósticos ya sea por medio de la transferencia de imágenes móviles como de imágenes fijas, se incluyen la telepatología y la teledermatología . Con la telepatología, la medicina ha conseguido reducir al mínimo las limitaciones tradicionales de la patología en la medida de que, gracias a las tecnologías de la información, se hacen innecesarias condiciones especiales para el almacenamiento de muestras a sí como su traslado a centros especializados de análisis . El primer proyecto piloto de telepatología tuvo lugar en Suecia en el año 76; el éxito de las primeras pruebas llevó al gobierno sueco a abordar un proyecto nacional en 1992, gracias al cual todos los departamentos de patología de hospitales suecos pudieron comprobar cómo las telecomunicaciones podrían ser un gran aval en el diagnóstico de enfermedades . Por su parte, la teledermatología ha demostrado, tras la experiencia de investigación con varios centros internacionales que, gracias a la tecnologías de la información, se lograrían importantes avances en la precisión del diagnóstico y a la prescripción de un tratamiento clínico .

Por último, mencionar la telecirugía, una especialidad de la Telemedicina considerada como complemento informatizado de la cirugía tradicional, gracias al cual el cirujano puede operar utilizando imágenes virtuales que muestran en pantalla partes invisibles del cuerpo del paciente . Actualmente, el alto coste, la complejidad técnica y la ausencia de reproducción del sentido táctil del cirujano son los principales razones por las que esta modalidad de Telemedicina no se encuentre ampliamente difundida .

Prestación de los servicios de telemedicina

Si algo está claro, es que las aplicaciones de telemedicina deben evaluarse en cada sistema sanitario antes de su implantación . Para ello es necesario realizar un estudio pormenorizado entre las organizaciones implicadas y las estructuras de asistencia sanitaria disponibles . El Informe Bangemann, Europa y la sociedad mundial de la información, propone el interfuncionamiento de los sistemas de asistencia sanitaria en tres niveles: redes que transportan la información ( como teléfono, satélite y cable ) , servicios que permiten utilizar las redes ( correo electrónico, teleconferencia, vídeo interactivo ) ,y aplicaciones que ofrecen soluciones especializadas a grupos de usuarios ( por ejemplo, teleconsulta y enseñanza a distancia ) . De este modo, la cadena de valor de la telemedicina podría desarrollarse de distintas maneras en los países en desarrollo . Una manera de prestación sería a través de personal médico auxiliar, que se desplazaría de una localidad a otra equipado con un teléfono por satélite y otros dispositivos para consultar con un hospital o un proveedor de servicios a distancia . Otra posibilidad es la instalación de un servicio de telemedicina en una clínica rural o en un pequeño hospital . Como tercera alternativa, las aplicaciones podrían distribuirse a través de un telecentro o centro comunitario polivalente, en el que pueden agruparse todas las necesidades de comunicación de varios grupos de usuarios .

Ventajas y riesgos de la telemedicina

Podemos analizar las ventajas que ofrece esta disciplina según el grupo beneficiario de sus servicios . Así, los pacientes dispondrían de diagnósticos y tratamientos más rápidos, verían reducidos el número de exámenes suplementarios y evitarían tener que trasladarse a distintos hospitales para ser reconocidos por otro médico . Los médicos generalistas, por su parte, contarían con nuevas posibilidades para efectuar consultas con especialistas y evitarían los inconvenientes de desplazamientos por este motivo . En el caso de los hospitales, la reducción del peligro de pérdida de imágenes, una mayor rapidez y precisión en los tratamientos, y la utilización más eficaz de los servicios, son citados en consideración para hacer uso de estos servicios . Para otros grupos, como las familias de los enfermos, estos servicios les permitirían estar más cerca de los pacientes y, en el caso de los estudiantes, éstos podrían asistir a operaciones realizadas en cualquier parte del mundo, e incluso comunicarse directamente con el cirujano .