¿Qué pasa con los usuarios de HP y Compaq?

Muy bien; ya tenemos la segunda mega-compañía del sector; capaz de hacer sombra a IBM y competir, desde una posición de clara superioridad, con una buena parte de la industria actual de TI, condenada —tal y como están las cosas— a reinventarse o desaparecer. La lógica de la operación parece clara (aunque ni HP ni Compaq hayan sido capaces de explicarla) y la sinergia resultante (aunque insuficiente) resulta evidente. Ahora bien; ¿qué pasa con los usuarios de HP y Compaq? Los hechos demuestran que ante ellos se abre un largo período de incertidumbre y preocupación. Aunque Carly Fiorina y Michael Capellas han asegurado que ya han decidido las líneas de negocio que desaparecerán tras la fusión definitiva, no han querido hacer pública esta lista hasta que no estén preparadas “las estrategias de migración a otras plataformas”. Exceptuando el área de impresoras, donde HP mantiene una clara posición de liderazgo y Compaq no cuenta con oferta propia, el resto de segmentos de mercado muestran un abrumador solapamiento. En un ejercicio puramente especulativo, podríamos apostar que HP-UX prevalecerá sobre Tru64 y que una parte de los usuarios del sistema operativo de Compaq se decantará por arrojarse en brazos de Sun o IBM, huyendo del previsible caos post-fusión. También parece lógico, según IDC, que pese a que la marca Compaq desaparecerá, HP podría conservar los nombre de algunas líneas de productos del fabricante en el mundo PC como iPaq o Proliant, que cuentan con un gran reconocimiento en el mercado. HP asegura que deben esperarse importantes sinergias derivadas de la operación, pero lo cierto es que si la compañía no ha conseguido todavía generar sinergias dentro de su propia organización, hacerlo en el proceso de integración de Compaq se antoja una misión imposible.