Progreso permanente en la carrera profesional
Liderazgo personal
Hay dos cuestiones que están presentes hoy en todo momento para los directores de Tecnologías de la Información: cómo retener a sus mejores profesionales TI y cómo conseguir que mantengan sus capacidades y conocimientos y progresen en su carrera profesional. La primera es ya de por sí bastante difícil. Las dos en combinación pueden llevar a los líderes TI al límite de su resistencia mental.
Resolver la primera cuestión puede hacer mucho más fácil obtener una solución para la segunda. Es más probable que los empleados permanezcan en una empresa cuando se sienten valorados, observan que se invierte lo necesario en ellos y consideran su trabajo como un desafío. Aunque el dinero es importante, los empleados están dispuestos a ceder algo en ese aspecto si observan que tienen posibilidades de progresar profesionalmente y de ejercer un verdadero impacto en la empresa. Un estudio reciente realizado por las empresas CIO Communications e Icex sobre prácticas de recursos humanos apoya la idea de que las empresas que abordan de forma sistemática el desarrollo personal de sus empleados observan que son menos los que las abandonan.
Crear un entorno adecuado para la formación y el progreso profesional continuado en áreas comerciales y personales -un entorno de mayor alcance y más flexible que los programas de “formación y desarrollo” típicos- puede resolver estas dos cuestiones. Hay una nueva energía entre los profesionales TI, una energía que procede de aprender cosas nuevas.
Una compañía puede llevar a cabo de muchas formas la creación de un entorno de formación y progreso profesional permanentes.
Visión de futuro
El valor comercial de la formación no consiste sólo en conservar a los profesionales TI, sino también en poder aumentar sus niveles de rendimiento. Algunas empresas utilizan tres expresiones básicas para resumir su visión de una formación y progreso profesional permanentes, que pueden servir de guía para diseñar un entorno de rendimiento excepcional:
Aprender a crear un futuro mejor: Una actividad de estudio basada en el deseo de cada persona de desarrollarse y progresar a niveles tanto profesionales como personales.
Aprender lo que hay que saber en cualquier parte, en cualquier lugar. Crear unas herramientas de formación determinadas por la demanda y que estén disponibles cuando se necesiten (y no bajo un plan de fechas predeterminado) y en cualquier parte en la que se encuentre una persona.
Aprender fuera de los límites de la organización TI. Comprender que no todos en la empresa realizan actividades TI al mismo nivel y que el entorno de formación permanente no debe estar limitado a la organización TI ni a las clases en las que se imparte la enseñanza. Cualquiera que realice una actividad TI deberá aprender continuamente.
Muchas organizaciones TI recurren a sus departamento de recursos humanos para crear sus cursos de formación. No obstante, dada la complejidad y el riesgo de promover profesionalmente y retener a los profesionales TI, ¿No sería conveniente para el departamento TI convertirse él mismo en propietario de este esfuerzo? Asumir personalmente la propiedad del programa de estudios es la única forma de crear la confianza y el compromiso necesarios para el desarrollo profesional de los empleados. Al desplazarse cada vez más el desarrollo de nuevos conocimientos desde los cursos de formación al lugar del trabajo, mejorar el rendimiento continuará siendo la tarea más importante. Por lo tanto, el aprendizaje y la formación deberán ser (y deberán considerarse) como parte del trabajo.
Posibilidad de elegir
“El principio básico para el progreso y el crecimiento está en la capacidad de elegir que tienen los seres humanos”, escribió la novelista Mary Ann Evans, más conocida como George Eliot, hace 122 años. Una mayor capacidad de elegir la forma de progresar ayuda a las personas a hacerse dueñas de su actividad de formación y a controlar su propio futuro. En algunas organizaciones se aconseja a las personas del departamento de TI que participen en proyectos innovadores en los que puedan probar nuevos roles y conocimientos dentro de un entorno en el que se les ofrezca el apoyo necesario. Así, algunos directores de proyecto pueden ofrecerse a gestionar nuevos proyectos, y los desarrolladores de aplicaciones mainframe pueden optar por formar parte de un proyecto cliente/servidor. Además, se induce a las personas a establecer una agenda de actividades personal y aprovechar aquellas oportunidades que indican con claridad cuáles son sus oportunidades de progreso profesional.
Confiar en el orden natural
Un entorno de formación permanente da lugar también a un cambio cultural. Al cambiar la cultura de una empresa, hay un principio que es necesario seguir: Deberá abordarse la empresa allí donde está y hacerla avanzar paso a paso. Respetar el orden natural de las cosas significa implementar un entorno de formación y progreso permanentes, dividido en varios niveles:
Nivel I: Crear la infraestructura adecuada para adquirir los conocimientos TI necesarios (es decir, una red de formación permanente, un sitio Web, cursos bajo demanda).
Nivel II: Crear el entorno apropiado para que los profesionales TI aprendan y progresen en sus conocimientos sobre el negocio y en sus “skills” o capacidades “blandas” (es decir, un sentido del valor que tiene el tiempo para el estudio, la colaboración, la comunicación y la capacidad de elegir).
Nivel III: Incorporar el nuevo proceso de formación a la cultura de la empresa, evaluar los resultados y reforzar las actividades mediante mecanismos de apoyo, como asesores y proyectos innovativos).
Quienes abordan con seriedad la formación -que es lo que todo el mundo desea que hagan los profesionales TI- necesitan herramientas que permitan que esa formación resulte fácil, agradable y productivo.
Todo el mundo se esfuerza por crear en su empresa la capacidad de formación necesaria. Este esfuerzo es esencial para retener a las personas más capacitadas en Tecnología de la Información y para conseguir que su capacidad aumente en el futuro.
Progreso continuo
Diez principios que sirven de guía al sólido
proceso de estudio y a la cultura corporativa
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1.- Relacionar el estudio continuado con las estrategias comerciales clave que sirven de guía e impulso a la Tecnología de la Información
2.- Combinar el desarrollo personal y profesional
3.- Instituir como parte de cada plan comercial el tiempo necesario para el estudio
4.- Promover la lealtad y fidelidad de los empleados
5.- Promover el respeto por los individuos
6.- Integrar la tecnología con la formación
7.- Evaluar en qué medida está contribuyendo la formación al rendimiento individual, funcional y organizacional
8.- Determinar cómo se está aplicando la formación a nivel individual, funcional y organizacional.
9.- Aumentar la comunicación y la colaboración mediante eventos dedicados a la formación
10.- Medir el rendimiento comercial y no el éxito en la “formación
Resolver la primera cuestión puede hacer mucho más fácil obtener una solución para la segunda. Es más probable que los empleados permanezcan en una empresa cuando se sienten valorados, observan que se invierte lo necesario en ellos y consideran su trabajo como un desafío. Aunque el dinero es importante, los empleados están dispuestos a ceder algo en ese aspecto si observan que tienen posibilidades de progresar profesionalmente y de ejercer un verdadero impacto en la empresa. Un estudio reciente realizado por las empresas CIO Communications e Icex sobre prácticas de recursos humanos apoya la idea de que las empresas que abordan de forma sistemática el desarrollo personal de sus empleados observan que son menos los que las abandonan.
Crear un entorno adecuado para la formación y el progreso profesional continuado en áreas comerciales y personales -un entorno de mayor alcance y más flexible que los programas de “formación y desarrollo” típicos- puede resolver estas dos cuestiones. Hay una nueva energía entre los profesionales TI, una energía que procede de aprender cosas nuevas.
Una compañía puede llevar a cabo de muchas formas la creación de un entorno de formación y progreso profesional permanentes.
Visión de futuro
El valor comercial de la formación no consiste sólo en conservar a los profesionales TI, sino también en poder aumentar sus niveles de rendimiento. Algunas empresas utilizan tres expresiones básicas para resumir su visión de una formación y progreso profesional permanentes, que pueden servir de guía para diseñar un entorno de rendimiento excepcional:
Aprender a crear un futuro mejor: Una actividad de estudio basada en el deseo de cada persona de desarrollarse y progresar a niveles tanto profesionales como personales.
Aprender lo que hay que saber en cualquier parte, en cualquier lugar. Crear unas herramientas de formación determinadas por la demanda y que estén disponibles cuando se necesiten (y no bajo un plan de fechas predeterminado) y en cualquier parte en la que se encuentre una persona.
Aprender fuera de los límites de la organización TI. Comprender que no todos en la empresa realizan actividades TI al mismo nivel y que el entorno de formación permanente no debe estar limitado a la organización TI ni a las clases en las que se imparte la enseñanza. Cualquiera que realice una actividad TI deberá aprender continuamente.
Muchas organizaciones TI recurren a sus departamento de recursos humanos para crear sus cursos de formación. No obstante, dada la complejidad y el riesgo de promover profesionalmente y retener a los profesionales TI, ¿No sería conveniente para el departamento TI convertirse él mismo en propietario de este esfuerzo? Asumir personalmente la propiedad del programa de estudios es la única forma de crear la confianza y el compromiso necesarios para el desarrollo profesional de los empleados. Al desplazarse cada vez más el desarrollo de nuevos conocimientos desde los cursos de formación al lugar del trabajo, mejorar el rendimiento continuará siendo la tarea más importante. Por lo tanto, el aprendizaje y la formación deberán ser (y deberán considerarse) como parte del trabajo.
Posibilidad de elegir
“El principio básico para el progreso y el crecimiento está en la capacidad de elegir que tienen los seres humanos”, escribió la novelista Mary Ann Evans, más conocida como George Eliot, hace 122 años. Una mayor capacidad de elegir la forma de progresar ayuda a las personas a hacerse dueñas de su actividad de formación y a controlar su propio futuro. En algunas organizaciones se aconseja a las personas del departamento de TI que participen en proyectos innovadores en los que puedan probar nuevos roles y conocimientos dentro de un entorno en el que se les ofrezca el apoyo necesario. Así, algunos directores de proyecto pueden ofrecerse a gestionar nuevos proyectos, y los desarrolladores de aplicaciones mainframe pueden optar por formar parte de un proyecto cliente/servidor. Además, se induce a las personas a establecer una agenda de actividades personal y aprovechar aquellas oportunidades que indican con claridad cuáles son sus oportunidades de progreso profesional.
Confiar en el orden natural
Un entorno de formación permanente da lugar también a un cambio cultural. Al cambiar la cultura de una empresa, hay un principio que es necesario seguir: Deberá abordarse la empresa allí donde está y hacerla avanzar paso a paso. Respetar el orden natural de las cosas significa implementar un entorno de formación y progreso permanentes, dividido en varios niveles:
Nivel I: Crear la infraestructura adecuada para adquirir los conocimientos TI necesarios (es decir, una red de formación permanente, un sitio Web, cursos bajo demanda).
Nivel II: Crear el entorno apropiado para que los profesionales TI aprendan y progresen en sus conocimientos sobre el negocio y en sus “skills” o capacidades “blandas” (es decir, un sentido del valor que tiene el tiempo para el estudio, la colaboración, la comunicación y la capacidad de elegir).
Nivel III: Incorporar el nuevo proceso de formación a la cultura de la empresa, evaluar los resultados y reforzar las actividades mediante mecanismos de apoyo, como asesores y proyectos innovativos).
Quienes abordan con seriedad la formación -que es lo que todo el mundo desea que hagan los profesionales TI- necesitan herramientas que permitan que esa formación resulte fácil, agradable y productivo.
Todo el mundo se esfuerza por crear en su empresa la capacidad de formación necesaria. Este esfuerzo es esencial para retener a las personas más capacitadas en Tecnología de la Información y para conseguir que su capacidad aumente en el futuro.
Progreso continuo
Diez principios que sirven de guía al sólido
proceso de estudio y a la cultura corporativa
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1.- Relacionar el estudio continuado con las estrategias comerciales clave que sirven de guía e impulso a la Tecnología de la Información
2.- Combinar el desarrollo personal y profesional
3.- Instituir como parte de cada plan comercial el tiempo necesario para el estudio
4.- Promover la lealtad y fidelidad de los empleados
5.- Promover el respeto por los individuos
6.- Integrar la tecnología con la formación
7.- Evaluar en qué medida está contribuyendo la formación al rendimiento individual, funcional y organizacional
8.- Determinar cómo se está aplicando la formación a nivel individual, funcional y organizacional.
9.- Aumentar la comunicación y la colaboración mediante eventos dedicados a la formación
10.- Medir el rendimiento comercial y no el éxito en la “formación
