Primeros resultados de Windows 8
No son buenos augurios para Windows 8. Después de su primer mes completo en el mercado, los resultados de uso del mismo están más cerca de los registros de Vista en 2007 que de los de Windows 7, éste sí fue todo un éxito.
Según Net Aplications, apenas el 1,2 % de los PC Windows utilizan la última versión de sistema operativo a finales de noviembre, muy próximo al escaso 1% que logró Vista en su primer mes de vida. Incluso, este fallido sistema consiguió en su segundo mes quintuplicar su propia marca, mientras que Windows 8 apenas ha doblado las cifras del mes anterior. La diferencia es tan pequeña que puede tener más que ver con la situación de la economía, mucho más boyante a comienzos de 2007 que en la actualidad, además de que hace cinco años los usuarios tenían muy pocas alternativas al PC, ya que los smartphones y los tablets ni siquiera estaban entre los proyectos de ingeniería.
En todo caso, noviembre fue el mejor mes para Windows 8, a pesar de seguir estando lejos de los resultados que obtuvo Windows 7 en 2009, que en su primer mes completo logró un 4,3 por ciento de cuota entre todos los sistemas Windows.
Además, los datos de Net Applications corroboran que Windows 8 no ha propiciado la compra de nuevos PC y, durante sus primeras cuatro semanas de vida, las ventas de PC en Estados Unidos cayeron un 21%, según NPD Group. En la valoración de esta firma, Windows 8 no sólo no ha impulsado la venta de PC sino que ni siquiera ha detenido el lento declive que ha mostrado este mercado en 2012.
Los datos aportados por Microsoft indican que ya se han comercializado 40 millones de licencias del nuevo sistema operativo, cifra que los directivos de Redmon aseguran que está en línea con los registros de Windows 7. Sin embargo, los analistas puntualizan que muchas de estas licencias estaban ligadas a ordenadores personales que aún no han sido adquiridos por los usuarios, por lo que los datos de la compañía no reflejan la venta real del producto.
Además, muchos observadores vaticinan una débil demanda para los próximos meses, debido a la frágil situación económica, al confuso interfaz de usuario dual, y a la fatiga de muchas empresas después de haber migrado hace poco tiempo sus sistemas de XP a Windows 7. Por no hablar de la fuerte competencia que suponen los iPad de Apple.