"Nuestro objetivo es enseñar a la organización a usar las TIC"
Antonio Díaz, director de sistemas de información de Sol Meliá
Desde su experiencia, ¿qué cambios ha observado en la visión de su empresa de las Tecnologías de la Información?
- Por un lado, determinadas Tecnologías de la Información están pasando a ser una commodity: son necesarias para el negocio igual que el teléfono, pero no aportan valor diferencial. Se da por hecho que un usuario debe tener cuenta de correo y ciertas aplicaciones y, aunque no se reconoce su valor, tampoco se admite que estos sistemas fallen. Por otro lado, casi todas las iniciativas de negocio pasan por nuevos sistemas o modificaciones de los existentes. Así, el departamento de sistemas debe tener una estructura ágil que le permita reducir el tiempo que se necesita para lanzar una idea al mercado. Este departamento ha desarrollado habilidades y procedimientos que no están tan evolucionados en los demás de la compañía, como la capacidad de orientar su gestión hacia proyectos y la medición de indicadores de esta gestión. El reto al que nos enfrentamos en estos momentos es enseñar a la organización a usar estas herramientas con el fin de implantar eficazmente la estrategia.
Al igual que ha sucedido en otros sectores, ¿han sido las TI una verdadera revolución en el mundo del turismo?
- El negocio turístico es un proceso intensivo en información, especialmente en los procesos de cobertura de la demanda, así que las Tecnologías de la Información son un factor diferencial a la hora de encontrar la mejor combinación de canales para acceder al consumidor. Por otro lado, una vez que el cliente está en el hotel, la tecnología es importante para poner a su disposición el mismo nivel de servicios que tendría en su casa u oficina.
¿Qué tendencias percibe en la industria de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones y cuáles se plantea adoptar su compañía en el futuro que ayuden a mejorar sus procesos?
- Primero Internet como canal de comunicación entre el hotel y el mundo. Por otro lado, los estándares que permiten la conectividad de los sistemas. En turismo resalta Open Travel Alliance (OTA) que, junto a los demás, facilita la comunicación entre empresas y sistemas y permiten a la compañía construirse sus aplicaciones sin adaptarse a un solo fabricante o entorno. En tercer lugar, la existencia de una red de comunicaciones global para los hoteles, gracias a la que las cadenas pueden aspirar al inventario único, para optimizar las decisiones de precio y ocupación y diseñar el modelo de comercialización por canales de forma eficiente. Esta red se extiende al resto del mundo, y la conexión seamless con los GDS a través de compañías de enlace como Wizcom y Pegasus está al alcance de cualquiera. El negocio ya no gira en torno a herramientas tecnológicas, que se convierten en un servicio más que el hotel puede contratar. Estas tendencias hacen que las nuevas tecnologías, que empezaron como instrumento de reducción de costes, sean la columna vertebral de la corporación y condicionen su organización, al gestionarse centralizadamente procesos antes distribuidos.
¿Es aún un reto integrar aplicaciones y datos? ¿Cuál es la estrategia de su empresa en este campo?
- Una vez conseguida la integración de datos, el siguiente reto es mejorar la consistencia de éstos para avanzar en lo que de verdad nos aporta valor: integrar los procesos de negocio.
La informática bajo demanda es una fuerte apuesta de los proveedores, ¿cuál es su percepción de ésta?
- No creo demasiado en ello. No ha pasado de ser un concepto de marketing y apenas hay experiencias que puedan servir de modelo.