Miguel Angel Eced, Presidente de AUTEL

"1997 va a ser crucial para las telecomunicaciones en nuestro país"

La liberalización del mercado de las telecomunicaciones es ya un hecho en nuestro país, sin embargo, todavía quedan muchos flecos por concretar que pueden cambiar totalmente su orientación. Para el Presidente de AUTEL, Miguel Angel Eced, ha, sin embargo, unas bases mínimas y una serie de requisitos que deben cumplirse para que exista una igualdad de oportunidades entre todos los actores y para conseguir el nivel de desarrollo que debe tener, en cuanto a servicios e infraestructuras, un país como España

En estos momentos, ¿Cuál es la situación del mercado español de las telecomunicaciones tras las últimas acciones de liberalización que se han llevado a cabo por parte del Gobierno y de la constitución de nuevos grupos operadores?

- En cuanto a legislación, el Decreto promulgado por el Gobierno el pasado mes de Junio de liberalización de las telecomunicaciones actualizó fundamentalmente tres áreas básicas. La primera una actualización de la LOT a la que añadió algunos aspectos que la colocaron al mismo ritmo de liberalización que ya se ha producido en la UE. La segunda tuvo incidencia sobre la Ley del Cable, en la que había algunos temas que era necesario modificar. Y la tercera, y a nuestro juicio muy importante, la constitución de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones, lo único que nos faltaba para asimilarnos al resto de los países europeos en cuanto a la creación de un órgano independiente que hiciera de arbitro del desarrollo de un mercado en régimen de competencia.

En cuanto al marco legislativo, con posterioridad a este decreto se ha hecho público el borrador de la Ley General de Telecomunicaciones que está en estos momentos sometida a información pública, en un trámite previo al parlamentario, y con las correcciones que el Ministerio de Fomento realice se convertirá en Proyecto de Ley que tendrá que ser enviado al Parlamento. Nos parece que esta Ley es un proyecto adecuado, porque defendemos, desde AUTEL, que es necesario contar con dos leyes marco; una que recoja todo lo que se refiere al transporte de las señales, y que ya está incluido en la Ley General de Telecomunicaciones. Y otra, que desde nuestro punto de vista faltaría, y que regule todo el tema de los contenidos, que en estos momentos se encuentra recogida en una legislación enormemente dispersa.

Dentro del capítulo de las licencias y autorizaciones, desde AUTEL hemos manifestado repetidamente que no nos parecía razonable que se aplicará el silencio administrativo negativo en todo lo que se refiere a la concesión de las licencias, que son las de mayor rango administrativo, mientras que para la concesión de las autorizaciones, si se ha establecido el silencio administrativo positivo. En el primer caso, si la administración, en el plazo que marca la ley no resuelva en algún sentido, positivo o negativo la solicitud, se determina que la petición ha sido denegada.

Esto nos parece que es una práctica poco común en el resto de los países europeos y que es una especie de paraguas que se pone la Administración para cubrirse en su propia ineficiencia, deja a la Administración una especie de laxitud en sus obligaciones y no cumplir el plazo establecido.

¿Por qué desde AUTEL se viene afirmando desde hace unos meses que los años 1997 y 1998 van a ser fundamentales para sentar las bases del futuro mercado español?

- El año 1998 va a ser tan importante como en su momento fue 1987 porque es cuando se produce la liberalización de los mercados. Pero lo que AUTEL afirma es que éste es el año de dar el banderazo de salida. Sin embargo, 1997 es el momento en el que debe prepararse el marco legislativo, las condiciones para que la liberalización se produzca con normalidad. Si no ponemos, a lo largo de 1997, los ladrillos para que en el 98 esa liberalización tenga exito, nos encontraremos con que 1998 será el año de la liberalización "de facto", pero no habremos preparado el camino. No es tan importante el retraso del uno de enero de 1998, momento de la plazo liberalización plena de la UE, al 31 de diciembre de 1998, momento en el que tiene que producirse la liberalización en nuestro país, sino lo que es importante es que todas las cosas que haya que hacer para que la liberalización de los mercados tenga exito y se produzca una liberación real se preparen durante 1997.

¿Qué pasos hay que dar durante este año y que no se pueden, de ninguna manera retrasar?

- La primera condición es iniciar el camino de la liberalización con unas premisas conocidas por el resto de los intervinientes, que son los que van a condicionar el exito de la competencia. Se podrían señalar tres grandes aspectos. Primero: las cuotas y las condiciones de interconexión, son cruciales para que pueda haber una competencia real. En segundo lugar, igualdad en el uso de la numeración. Es decir, el segundo operador tiene que tener la posibilidad de numeración similar a la de Telefónica. En un mercado abierto, si un usuario quiere comunicarse con otro a través de una red que no es la de Telefónica, habría que darle un número similar al que ahora tienen por ejemplo, las provincias, y no que se le haga poner, por ejemplo, más numeros, pues esto sería una barreras de entrada que impedirían que el segundo operador pudiera tener una cuota de mercado aceptable. Y en tercer lugar, la portabilidad del número, que nos parece que es muy importante porque sino imposibilita el cambio de un operador a otro, sobre todo para las empresas, ya que cambiar un número telefónico acarrea innumerables gastos, algo que sí es posible hacerlo técnicamente, la inteligencia de la red permite que se pueda portar este número sin ninguna limitación geográfica.

La convocatoria de elecciones generales del pasado año ¿supuso un parón en el desarrollo del mercado de las telecomunicaciones en nuestro país, o sus posibles efectos ya han sido superados?

- Creo que el parón se produjo, no sólo en el 96, sino en la última etapa del gobierno anterior, durante 1995, que fue un año en el que se estuvo peleando por la Ley del Cable y la Ley de las Televisiones Locales, leyes que al final se aprobaron corriendo en diciembre de 1995. Sin embargo, 1996 fue un año de gran impulso y con el Decreto Ley de junio se dio un paso de gigante en todo lo que se refiere al desarrollo de las telecomunicaciones en nuestro país. Sin embargo, la implantación del segundo operador, que era un objetivo para ese año, no fue posible, por toda la problemática que ha existido, si se ha producido un cierto retraso que se está intentando superar en 1997. En general el 96 no fue un mal año desde el punto de vista del desarrollo legislativo, y el 97 está siendo bastante bueno, siempre según las previsiones del gobierno.

¿Qué opinión tienen los operadores internacionales de la actual situación del mercado español de las telecomunicaciones. Están en él porque hay que estar o porque hay realmente posibilidades de negocio?

- El mercado español es atractivo para todos los operadores extranjeros. Es un mercado que todavía tiene mucha capacidad de crecimiento, no estamos aún ni en el número de líneas por 100 habitantes, ni en el número de teléfonos móviles por cien habitnates que tienen otros países de la UE. En todo lo que son los servicios básicos de las telecomunicaciones España es un país con un alto potencial de crecimiento y por tanto, es atractivo para las empresas. Además, se añade una nueva posibilidad, la de entrar a través de España en el mercado latinoamericano, haciendo competencia a la propia Telefónica, y esto puede ser un atractivo para estos grandes consorcios europeos y estadounidenses. Todos ellos están enormemente interesados por el mercado español. Otra cosa distinta es que la estrategia que ha seguido el gobierno para conceder la licencia a un segundo operador, a través de Retevisión, no sea lo más atractivo para ellos, porqu

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

ny2 ACTUALIDAD

ny2 Sociedad de la información

Día de la Movilidad y el BYOD Coffee Break