Microsoft recomienda a las empresas sobre el uso del software de segunda mano
Según Microsoft, las compañías pueden minimizar los riesgos consultando previamente al fabricante y tomando una serie de precauciones que ha publicado en su página web.
Microsoft advierte de los riesgos que entraña para las empresas la compra de software de segunda mano. En primer lugar, Microsoft considera que la transferencia de licencias de software está sujeta indiscutiblemente al consentimiento del titular de los derechos de autor. En su caso, la compañía sólo considera legales las transferencias en casos muy concretos, como por ejemplo, cuando dos empresas se fusionan o cuando una empresa se divide en varias.
El riesgo que asumen las empresas que compran licencias de software indebidamente transferido es a menudo subestimado. Si se descubre que la transferencia es ilegal, al cliente se le prohíbe el uso del software hasta que adquiera la licencia correspondiente. Además, en algunos casos incluso puede ser responsable de los daños y perjuicios causados al fabricante.
Microsoft recomienda a las empresas que quieran adquirir software tomen las siguientes precauciones: asegurarse de que el distribuidor está en contacto con Microsoft y sus mayoristas oficiales, y que los productos están completos y son genuinos, confirmar por escrito que los anteriores usuarios de la licencia han borrado todas las instalaciones que tenían y comprobar que el modelo de licenciamiento elegido es la opción más barata a largo plazo y considerar otras opciones de licenciamiento existentes, como el software más servicios, servicios hosteados, etc.
Asimismo, también aconseja a todos los usuarios que cuando compren un ordenador se aseguren de que el software instalado es original. La compañía ofrece una serie de recomendaciones para comprobarlo en su web corporativa. Una forma rápida de hacerlo es asegurarse de que el PC lleva el Certificado de Autenticidad, una etiqueta que acompaña a todos los productos originales de la firma. Además, la compañía recomienda dirigirse a tiendas de confianza, especialmente a aquellas que están certificadas.