Metro de Madrid apuesta por la transparencia de las subastas electrónicas
Ahorra millones de euros con una herramienta informática
Según señala Víctor Jiménez, responsable de la Unidad de Contratación de Metro de Madrid, “en años posteriores quise probar otras plataformas electrónicas, como la de Isoco en Barcelona, pero no quedé satisfecho en cuanto a resultados”. Jiménez explica que “las plataformas son bastante similares en cuento a funcionalidades pero detrás está la gente, los técnicos que lo manejan, y en ese sentido BravoSolution ha sido nuestra mejor elección”. La similitud de todas ellas también afecta al precio, que según el responsable, “es muy caro, aunque nosotros hemos conseguido rebajar el precio a través de comprometernos con un número mínimo de subastas al año”.
A pesar de la similitud descrita, el responsable de Contratación sí recalca alguno de los aspectos específicos de solución de su partner, como “la posibilidad de combinar tanto los aspectos económicos como técnicos, porque en muchas otras tan sólo es posible ir a precio”. Asimismo, Jiménez subraya también las ventajas de disponer de otras funcionalidades como el diálogo competitivo o el sistema dinámico de adquisición, sobre todo cuando el objeto de la subasta es material de oficina, precisa.
Ahorros significativos
Desde que la plataforma de BravoSolution arrancar con la subasta de suministro eléctrico, Metro de Madrid la ha empleado para otros ámbitos, desde la contratación del suministro del gas, el suministro de las ruedas para trenes o, incluso, las vacunas para la Gripe A.
Entre los principales beneficios que aporta la plataforma, además de una mayor transparencia para todos los participantes, Jiménez subraya los ahorros que proporciona: “Como media, entre un 15 y un 20% del presupuesto total y en los contratos de obra, casi sin puja, ya hay bajas del 40% por ofertas temerarias”. En ocasiones, como sucedió recientemente en una subasta, “de las ocho ofertas presentadas todas ellas eran temerarias”, tras analizarlas según su volumen económico y el coeficiente de dispersión, esto es, las diferencias económicas entre cada una de ellas.
El gran hito en cuanto a ahorro y que mejor ilustra lo manifestado por Jiménez “fue en marzo de 2009, cuando llegamos a ahorrar 18,5 millones de euros sólo en energía”, una cifra muy a tener en cuenta considerando que Metro de Madrid mueve alrededor de unos 300 millones de euros en este tipo de convocatorias de suministros.
Por otro lado y dada la experiencia con la que ya cuentan en la Unidad de Contratación, su responsable indica que aprovecharon “para realizar un completo estudio de materiales y proveedores, reclasificándolos, analizando variables como los tiempos de entrega, etc.”. Trabajo que les llevó cerca de un año pero que sirvió, por ejemplo, “para descubrir algún error de fórmulas en el SAP que teníamos instalado, además, de poder ajustar todas las existencias del almacén en función del volumen económico”.
La Unidad de Contratación de Metro de Madrid es una fiel defensora de las subastas electrónicas, al considerarlas el método más transparente en los procesos de adjudicación; en alguno de estos procesos, precisa, “hemos llegado hasta las 400 pujas”. Víctor Jiménez asegura, muy satisfecho, que “hasta donde yo sé, estamos a la cabeza en este tipo de tecnología, por delante de cualquier organismo de la Administración Pública. Prueba de ello es el hecho de que desde 2004 ni un solo concurso público de Metro de Madrid ha traído aparejado un solo papel”.