Medio ambiente y TIC se dan la mano en Andalucía
La Consejería de Medio Ambiente de la Junta mejora su servicio a los ciudadanos gracias a Internet
Desde que la Junta de Andalucía creara en los años ochenta la Agencia de Medio Ambiente, hoy convertida en Consejería, la preocupación por el entorno ha marcado muchas actuaciones de este organismo. De hecho, la utilización de las TIC ha estado profundamente ligada a esta preocupación. Una de las últimas iniciativas de esta Consejería al respecto ha sido potenciar Internet como medio de concienciación ciudadana en materia de sostenibilidad.
Los sistemas de información de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía han evolucionado significativamente desde que en los años ochenta se creara la Agencia de Medio Ambiente, antecesora de la Consejería. Como señala Nicolás Martínez, adjunto al jefe de Informática de la Secretaría General Técnica de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, “en esos momentos sólo contábamos con un equipo Fujitsu de la serie K, con sistema operativo CSP/FX donde corrían unas cuantas aplicaciones de gestión en Cobol, que también lo hacían en máquinas similares, más pequeñas, en nuestras delegaciones provinciales, conectadas con líneas X25. Para la informática más técnica trabajábamos con sistemas Digital con VMS, ejecutando programas de tratamiento de imágenes de satélite desarrollados por nosotros mismos”. Eran, como asegura Martínez, “tiempos felices”, pues la complejidad, no sólo en lo que respecta a la gestión del medio ambiente sino de los propios sistemas informáticos, ha marcado la evolución de la Agencia luego convertida en Consejería.
“Ahora todo es mucho más complejo y a veces incontrolable. A medida que se han ampliado los servicios que ofrecemos a los usuarios internos y a los ciudadanos, hemos crecido tanto en capacidad de proceso, como en tecnologías diferentes. Desde la Consejería damos soporte a 3.000 usuarios internos y a incontables usuarios externos”, explica Martínez.
Evolución
En todos estos años tanto las comunicaciones como la arquitectura de sistemas han evolucionado mucho en este ente. Para las primeras supuso todo un hito la creación de la red corporativa de telecomunicaciones de la Junta, basada en redes privadas virtuales IP-MPLS y con un gran ancho de banda, tanto para las comunicaciones internas como para el acceso a/y desde Internet.
En cuanto a la informática corporativa, ésta se concentra en los servicios centrales, donde existen unos 90 servidores, además de los 50 que se ubican en delegaciones provinciales para distintos propósitos. Hoy, los principales servidores web con Apache, de aplicaciones con TomCat y de base de datos en los que corren las aplicaciones de Oracle son particiones de máquinas IBM PSeries, concretamente de los modelos P670, P690 y P570. Todo ello hace un total de 32 CPU con 176 GB de memoria. Además, la Consejería cuenta con servidores de ficheros e impresoras, servidores Citrix, de firma electrónica con la plataforma @FIRMA4, de mapas, gestores documentales, de correo, firewalls, antivirus, sistemas de backup... “En la SAN (red de almacenamiento) tenemos conectados dos sistemas de almacenamiento, uno con discos de fibra y otro con discos SATA, con una capacidad total de 80 TB. También contamos con una librería de cintas con seis drives LTO3 y 129 slots. Y actualmente estamos instalando un software de almacenamiento jerárquico para gestionar eficazmente todos estos niveles de almacenamiento”, explica Nicolás Martínez.
Nuevo milenio, nueva web
Pero al margen de toda esta infraestructura, la Consejería siempre ha puesto especial interés en Internet. De hecho, acaba de acometer la renovación del portal y ha incorporado un nuevo gestor de contenidos.
Como explica Martínez, “La primera web del área de medio ambiente de la Junta se puso en marcha en 1995. Ésta, que tenía un contenido muy técnico e información estática y que se creó con desarrollos internos, no se consideraba en absoluto un servicio crítico. Pero cuando en 1998 se produjo el accidente minero de Aznalcóllar, la web pasó a tener un protagonismo inusitado, pues se utilizó como principal medio de difusión de la evolución del suceso y las actuaciones relacionadas. Desde ese momento su crecimiento ha sido constante, tanto en contenidos como en número de accesos, pero de una forma muy desorganizada. Esta situación es la que nos llevó a plantearnos un proyecto web más serio, más orientado a ofrecer servicios que a suministrar información”.
Fue en el año 2000 cuando se puso en producción una nueva web, con una estructura organizativa capaz de soportar el creciente número de usuarios, con una normativa que regula su funcionamiento, un esquema de navegación, un diseño homogéneo y un equipo para mantener la calidad de la información ofrecida. Pero ésta seguía siendo una web estática con unas 3.000 páginas HTML y 13.000 informes y documentos de distinto tipo.
El siguiente paso se dio en 2004, momento en el que se había pasado de 20.000 accesos mensuales a casi 1.000.000 con 15.000 páginas HTML y otros 10.000 ficheros estáticos. “El mantenimiento se hacía imposible, por lo que lanzamos un nuevo proyecto en el que además de mejorar la navegabilidad, la usabilidad y la accesibilidad, se optó por contar con un gestor de contenidos, considerándose que el de la compañía Vignette era el que mejor se adaptaba a nuestras necesidades. Se instaló la plataforma, primero para la intranet y en 2005 para la web con nuevas versiones para gestión de portales. Se actualizó el diseño, se definieron los primeros workflows de aportación de contenidos, se definió una taxonomía creándose veinte tipos distintos de contenido y 25 plantillas de presentación, cumpliéndose los estándares de accesibilidad AA y avanzándose en la oferta de servicios, sobre todo de administración electrónica”, relata Martínez.
Hacia la Web 2.0
El año pasado la Consejería avanzó un nivel más: “Además del mantenimiento de lo existente, desarrollamos un proyecto en el que estamos trabajando actualmente y que aborda la incorporación de herramientas de participación y funcionalidades web 2.0, la mejora del canal de administración electrónica, la personalización y navegación por perfiles de usuarios, es multiidioma y permite la explotación de plantillas basadas en metadatos”, afirma Martínez.
Para este nuevo proyecto también se eligió la plataforma de Vignette, pues en palabras de Nicolás Martínez, “aparte de las evidentes ventajas de trabajar con un gestor de contenidos frente a páginas estáticas, en cuanto a la independencia de los contenidos y su presentación, la plataforma de Vignette es muy estable y no tiene problemas para gestionar grandes volúmenes de información. El diseño ágil y dinámico del árbol de navegación mantiene la coherencia y homogeneidad del sitio y aporta buenas funcionalidades en gestión de roles, permisos de usuario y diseño de flujos de trabajo específicos”.
El desarrollo ha corrido a cargo de la empresa Sadiel que, en opinión de Nicolás Martínez, “presentó una oferta muy equilibrada y ventajosa, tanto económicamente, como en recursos aportados y funcionalidades ofertadas, siendo además una
Los sistemas de información de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía han evolucionado significativamente desde que en los años ochenta se creara la Agencia de Medio Ambiente, antecesora de la Consejería. Como señala Nicolás Martínez, adjunto al jefe de Informática de la Secretaría General Técnica de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, “en esos momentos sólo contábamos con un equipo Fujitsu de la serie K, con sistema operativo CSP/FX donde corrían unas cuantas aplicaciones de gestión en Cobol, que también lo hacían en máquinas similares, más pequeñas, en nuestras delegaciones provinciales, conectadas con líneas X25. Para la informática más técnica trabajábamos con sistemas Digital con VMS, ejecutando programas de tratamiento de imágenes de satélite desarrollados por nosotros mismos”. Eran, como asegura Martínez, “tiempos felices”, pues la complejidad, no sólo en lo que respecta a la gestión del medio ambiente sino de los propios sistemas informáticos, ha marcado la evolución de la Agencia luego convertida en Consejería.
“Ahora todo es mucho más complejo y a veces incontrolable. A medida que se han ampliado los servicios que ofrecemos a los usuarios internos y a los ciudadanos, hemos crecido tanto en capacidad de proceso, como en tecnologías diferentes. Desde la Consejería damos soporte a 3.000 usuarios internos y a incontables usuarios externos”, explica Martínez.
Evolución
En todos estos años tanto las comunicaciones como la arquitectura de sistemas han evolucionado mucho en este ente. Para las primeras supuso todo un hito la creación de la red corporativa de telecomunicaciones de la Junta, basada en redes privadas virtuales IP-MPLS y con un gran ancho de banda, tanto para las comunicaciones internas como para el acceso a/y desde Internet.
En cuanto a la informática corporativa, ésta se concentra en los servicios centrales, donde existen unos 90 servidores, además de los 50 que se ubican en delegaciones provinciales para distintos propósitos. Hoy, los principales servidores web con Apache, de aplicaciones con TomCat y de base de datos en los que corren las aplicaciones de Oracle son particiones de máquinas IBM PSeries, concretamente de los modelos P670, P690 y P570. Todo ello hace un total de 32 CPU con 176 GB de memoria. Además, la Consejería cuenta con servidores de ficheros e impresoras, servidores Citrix, de firma electrónica con la plataforma @FIRMA4, de mapas, gestores documentales, de correo, firewalls, antivirus, sistemas de backup... “En la SAN (red de almacenamiento) tenemos conectados dos sistemas de almacenamiento, uno con discos de fibra y otro con discos SATA, con una capacidad total de 80 TB. También contamos con una librería de cintas con seis drives LTO3 y 129 slots. Y actualmente estamos instalando un software de almacenamiento jerárquico para gestionar eficazmente todos estos niveles de almacenamiento”, explica Nicolás Martínez.
Nuevo milenio, nueva web
Pero al margen de toda esta infraestructura, la Consejería siempre ha puesto especial interés en Internet. De hecho, acaba de acometer la renovación del portal y ha incorporado un nuevo gestor de contenidos.
Como explica Martínez, “La primera web del área de medio ambiente de la Junta se puso en marcha en 1995. Ésta, que tenía un contenido muy técnico e información estática y que se creó con desarrollos internos, no se consideraba en absoluto un servicio crítico. Pero cuando en 1998 se produjo el accidente minero de Aznalcóllar, la web pasó a tener un protagonismo inusitado, pues se utilizó como principal medio de difusión de la evolución del suceso y las actuaciones relacionadas. Desde ese momento su crecimiento ha sido constante, tanto en contenidos como en número de accesos, pero de una forma muy desorganizada. Esta situación es la que nos llevó a plantearnos un proyecto web más serio, más orientado a ofrecer servicios que a suministrar información”.
Fue en el año 2000 cuando se puso en producción una nueva web, con una estructura organizativa capaz de soportar el creciente número de usuarios, con una normativa que regula su funcionamiento, un esquema de navegación, un diseño homogéneo y un equipo para mantener la calidad de la información ofrecida. Pero ésta seguía siendo una web estática con unas 3.000 páginas HTML y 13.000 informes y documentos de distinto tipo.
El siguiente paso se dio en 2004, momento en el que se había pasado de 20.000 accesos mensuales a casi 1.000.000 con 15.000 páginas HTML y otros 10.000 ficheros estáticos. “El mantenimiento se hacía imposible, por lo que lanzamos un nuevo proyecto en el que además de mejorar la navegabilidad, la usabilidad y la accesibilidad, se optó por contar con un gestor de contenidos, considerándose que el de la compañía Vignette era el que mejor se adaptaba a nuestras necesidades. Se instaló la plataforma, primero para la intranet y en 2005 para la web con nuevas versiones para gestión de portales. Se actualizó el diseño, se definieron los primeros workflows de aportación de contenidos, se definió una taxonomía creándose veinte tipos distintos de contenido y 25 plantillas de presentación, cumpliéndose los estándares de accesibilidad AA y avanzándose en la oferta de servicios, sobre todo de administración electrónica”, relata Martínez.
Hacia la Web 2.0
El año pasado la Consejería avanzó un nivel más: “Además del mantenimiento de lo existente, desarrollamos un proyecto en el que estamos trabajando actualmente y que aborda la incorporación de herramientas de participación y funcionalidades web 2.0, la mejora del canal de administración electrónica, la personalización y navegación por perfiles de usuarios, es multiidioma y permite la explotación de plantillas basadas en metadatos”, afirma Martínez.
Para este nuevo proyecto también se eligió la plataforma de Vignette, pues en palabras de Nicolás Martínez, “aparte de las evidentes ventajas de trabajar con un gestor de contenidos frente a páginas estáticas, en cuanto a la independencia de los contenidos y su presentación, la plataforma de Vignette es muy estable y no tiene problemas para gestionar grandes volúmenes de información. El diseño ágil y dinámico del árbol de navegación mantiene la coherencia y homogeneidad del sitio y aporta buenas funcionalidades en gestión de roles, permisos de usuario y diseño de flujos de trabajo específicos”.
El desarrollo ha corrido a cargo de la empresa Sadiel que, en opinión de Nicolás Martínez, “presentó una oferta muy equilibrada y ventajosa, tanto económicamente, como en recursos aportados y funcionalidades ofertadas, siendo además una
