Manuel Escuin, director general de Tissat

"Nuestra estrategia de crecimiento está basada en la oferta de servicios de alto valor añadido"

Fundada en 1990 de la mano de la Generalitat Valenciana, Telefónica y el Grupo DRAC, Tissat vivió un auténtico renacimiento en 1996, cuando se dió entrada a nuevos socios en el capital de la compañía (IBM e Iberdrola) y se definió una ambiciosa estrategia de expansión cimentada en el desarrollo de soluciones basadas en tecnología avanzada, que ha llevado a Tissat a consolidarse como una de las compañías españolas más innovadoras. Manuel Escuín, Director General de Tissat desde 1996 y artífice de la transformación de la compañía, explica en esta entrevista el proceso de transformación de la empresa y su apuesta de futuro.

¿Cómo es la Tissat que encuentra usted en 1996?
- Era una compañía que no tenía nada que ver con lo que hoy en día es Tissat. Entonces teníamos cinco empleados y facturábamos 600.000 euros. Pero a partir de 1996 se plantea una nueva estrategia que se concreta en cuatro puntos. Primero: la compañía tenía que tener tecnología propia. Segundo: era necesario llevar a cabo un desarrollo potente de la propia compañía par a crear empleo en la Comunidad. Tercero: la tecnología desarrollada tenía que revertir a la propia sociedad valenciana con el objetivo de favorecer la creación de nuevas empresas. Cuarto, y último, estabamos comprometidos con una política de I+D muy potente, ligada a los resultados de la compañía. Existía un último principio no escrito pero que estaba muy claro en la mente de todos: que Tissat no iba a tener ningún trato de favor por parte de la Generalitat. A partir de ahí iniciamos una política de crecimiento exponencial que nos ha llevado en la actualidad a una plantilla de 154 personas; un nivel que consideramos adecuado para la estrategia de crecimiento que queremos desarrollar, basada en la oferta de servicios de alto valor añadido.

Al analizar el reparto accionarial de Tissat sorprende el 11% del capital que controla IBM. No suele ser muy habitual que IBM no controle la mayoría del capital de las empresas en las que participa...
- Se trata de la primera vez en muchos años en que IBM decidió entrar en el accionariado de una compañía sin tener la mayoría del capital. Esta entrada se produce cuando decidimos dar un vuelco a la compañía y dar entrada a socios tecnológicos. Con aquellos partners que no podían entrar en el capital de Tissat –Sun, Oracle– se firmaron acuerdos de colaboración tecnológica. Pero IBM e Iberdrola sí tenían posibilidad e interés por invertir en la propia Tissat y así lo hicieron. A partir de ahí se creo un grupo de I+D que empezó a trabajar en Java ¡en 1996!

¿Intuición o casualidad?
- Ni una cosa ni otra. Yo tenía en AT&T mucha relación con los Laboratorios Bell donde ya se estaba trabajando con Java en el área de programación de comunicaciones, y cuando se planteó el proyecto InfoVille, vimos que la única opción pasaba por Java. En aquel momento no teníamos nada que perder porque no teníamos nada hecho, y podíamos permitirnos el lujo de equivocarnos. La verdad es que la apuesta –aunque arriesgada en su momento– se ha demostrado totalmente acertada.

Y siempre con iSUM, con el producto estrella de Tissat...
- Sí. La verdad es que iSUM ha vivido tres etapas aunque el producto siempre ha mantenido la misma filosofía. La primera etapa está caracterizada por la utilización de una tecnología Java muy propietaria; posteriormente, en la versión 2, se apostó por una programación Java clásica; y, a partir de 1999 se cambió toda la programación y se desarrollo iSUM partiendo de cero con JavaBeans. Aquella fue la versión3, actualmente estamos en la 5 y preparando la versión 6 que se lanzará en verano de este año.

Siempre se ha asociado a Tissat con InfoVille, tanto que parece que es lo único que ha hecho la compañía...
- Es realidad, el proyecto InfoVille nunca ha representado más del 5% de la facturación total de Tissat. Lo que ocurre es que se trata de un proyecto paradigmático, que en su momento –estamos hablando de 1996– fue muy rompedor.

Entonces fue una auténtica revolución...
- La idea original de InfoVille fue estudiar cómo respondían los habitantes de una ciudad cuando se ponían a su disposición todos los medios para participar en la Sociedad de la Información de manera activa. Además de un auténtico experimento sociológico, se desarrolló también todo un experimento tecnológico. El proyecto vive una primera fase entre 1996 y 1997; posteriormente InfoVille se extiende a otras seis localidades entre 1997 y 1999; y en 2000 la Generalitat decide lanzar InfoVille XXI como un producto realmente novedoso –en cuanto a sus aspectos técnicos– para lo que es habitual en Internet. Así, toda la información de InfoVille XXI está centralizada en nuestros servidores, pero la administración está totalmente descentralizada. Es un modelo que permite trasladar la experiencia de un lugar a otro y reutilizar el conocimiento.

¿Qué porcentaje de la facturación de Tissat se genera en la Comunidad Valenciana?
- Aproximadamente el 40%. En la Comunidad gestionamos dos proyectos emblemáticos: el 112 (Centro de Emergencias de Valencia) y el InfoCentre (Gestor de la Generalitat Valenciana).

Pero Tissat está realizando proyectos en Francia...
- Efectivamente, en Alençon, en la Bretaña francesa, hemos implantado en tres meses un proyecto con las funcionalidades de InfoVille. Pero tenemos más ejemplos: en Birmingham nos llevó sólo tres meses poner el piloto en marcha; el portal de la ciudad de Berlín se desarrolló en dos meses... Nuestra tecnología iSUM facilita la parametrización y personalización del portal en todos sus aspectos, y una gestión posterior muy sencilla. Tissat ya realizó en 1996 un esfuerzo por desarrollar un modelo basado en la personalización; en aquel momento estaba muy bien, pero se trataba de un modelo muy estático. Comprendimos entonces que había que desarrollar un modelo mucho más potente basado en las predicciones. Así, el sistema es capaz de predecir, basándose en el comportamiento de los usuarios, los servicios que van a demandarse en cada momento.

¿El sistema crea sus propias reglas?
- Sí. Primero descubre las reglas de recomendaciones, después descubre las reglas de patrones de navegación y les asigna “pesos” y por último, el sistema es capaz de determinar –basándose en toda esta información– el segmento al que pertenece cada usuario y actuar en consecuencia. Existe un cuarto modelo en el que se asigna un agente inteligente a cada usuario.

¿Ese gestor inteligente está embebido en iSUM?
- Sí, aunque se puede desacoplar.

¿Cómo puede una compañía como Tissat competir en I+D con las grandes multinacionales?
- Cuando nuestros potenciales clientes nos plantean esa cuestión les decimos que a través de iSUM Center podemos montar un portal empresarial en modo ASP en 72 horas. Les pedimos que lo comprueben por sí mismos. De hecho, a través de iSUM hemos facilitado en InfoVille la “clonación” de portales, que permite replicar toda la estructura de un portal, incluidos los servicios asociados, sin escribir una línea de códig

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

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