Los sistemas de información de KPMG evolucionan para alinearse con la estrategia del negocio. La compañía ha llevado a cabo una renovación de su plataforma y aplicaciones en 15 meses. Se ha buscado garantizar la seguridad y la escalabilidad en todos los nuevos desarrollos
KPMG es una compañía de servicios profesionales dedicada al asesoramiento financiero, gestión de riesgos y servicios fiscales, legales y de auditoría. Está presente en 144 países del mundo, trabajando, en cada uno de éstos, como firmas independientes afiliadas a KPMG Internacional. En nuestro país, la compañía tiene oficinas en 16 ciudades, a las que se suma la de Andorra, que depende de KPMG España. Unos 1.900 expertos en estas 17 oficinas buscan dar respuesta a diversas necesidades de clientes de sectores muy distintos.
Desde 2005, la nueva dirección de la compañía está otorgando una creciente importancia a las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) como un valor clave dentro del negocio de los servicios profesionales, lo que ha llevado a tomar conciencia de la necesidad de una renovación en profundidad de sus recursos tecnológicos.
La directora de IT services & knowlledge de KPMG, Rosa Ortuño, quien desembarcó en septiembre de ese año para impulsar este proceso de renovación explica que los sistemas necesitaban una renovación tecnológica para poder dar respuesta al cliente interno, pero además era necesario un cambio en la forma de trabajar. Por eso, el departamento que dirige pasó de llamarse “departamento de sistemas” a llamarse IT services y su plantilla creció en poco más de un año de 28 a 39 personas. “Hemos pasado a estar al lado de la estrategia del negocio, lo cual era indispensable para realizar cualquier cambio. Hemos tenido mucha suerte, porque la dirección general ha creído en nosotros y nos ha dado apoyo incondicional”, explica Ortuño quien, al mismo tiempo, reconoce que el plan de sistemas puesto en marcha ha sido un trabajo “muy duro” y “muy ajustado”, en cuanto a plazos y a personal. El presupuesto para TIC de KPMG España supone el 4% de la facturación de la compañía al final del año fiscal.
Alineación con el negocio
El principio director básico ha sido, según explica la directiva, poder contar con tecnología como un factor habilitador del negocio, que permita su crecimiento y nunca ejerza un efecto limitador.
“La irrupción de las nuevas tecnologías en el competitivo y cambiante mercado de las empresas de servicios profesionales ha supuesto un revulsivo a la hora de aprovechar las posibilidades de alcanzar ventajas competitivas, además de ayudar a cumplir con las estrictas regulaciones a las que se encuentra sometida la actividad”, explica Ortuño.
En este sentido, la directora considera que el estar alineado con el negocio y conocerlo en profundidad “hace que sepamos dar con la herramienta adecuada”. El equipo humano involucrado para realizar el proyecto y la planificación del mismo es, igualmente, imprescindible.
“Considero que los fracasos en implantaciones y proyectos en general se dan por no tener una visión genérica del negocio; esto hace que se cubra sólo la necesidad de cada momento, lo que a la larga se paga”.
Junto con la alineación con el negocio, Ortuño considera que los factores más críticos para el departamento TIC de una compañía como KPMG son la seguridad y la escalabilidad.
“La seguridad es crítica. Es necesario mantener unos elevados estándares de protección de datos y gestión de riesgos tecnológicos en un entorno de amenazas cambiantes, ya que nuestros clientes nos confían sus datos. Por otro lado, la falta de escalabilidad de la tecnología puede llegar a limitar la capacidad de la firma para desarrollar nuevas ideas de negocio”.
Nuevos desarrollos
Desde septiembre de 2005 hasta la fecha se ha podido realizar gran parte del plan de sistemas; se han puesto en marcha numerosos proyectos con un presupuesto relativamente ajustado, gracias a que se han implantado internamente.
El departamento de IT Services ha buscado mejorar las capacidades de trabajo de los usuarios de la compañía y ofrecer un mayor control de riesgos, al tiempo que se ha puesto el acento en la seguridad, los sistemas de backup y la trazabilidad de los datos.
En primer lugar, la implementación de un sistema de gestión documental ha permitido archivar todos los documentos en formato electrónico y centralizado, con control de versiones y de cambios incorporados; el objetivo era garantizar la trazabilidad y la disponibilidad de todos los documentos. Gracias a este proyecto, el workflow de aprobación de documentos se ha acelerado, a través de un alto nivel de automatización de los procesos de trabajo que además reduce el riesgo de error humano.
La mejora de las comunicaciones y la movilidad ha sido otro hito. “En una firma como la nuestra, las comunicaciones son la base de todo nuestro servicio, en especial si consideramos que tenemos más de 1.000 profesionales fuera de nuestras oficinas, trabajando con clientes”, señala Ortuño, quien añade que, por esta razón, se cambió la frame relay por una MPLS, con capacidad de proporcionar conectividad a los usuarios dondequiera que se encuentren y con unos estrictos estándares de seguridad: encriptación de las comunicaciones de acceso remoto, autenticación y discriminación de privilegios de acceso a red mediante perfiles de usuario.
En cuanto a movilidad, se ha equipado con Blackberry a todos los profesionales. Además, a todos los empleados en teletrabajo se les ha provisto de ADSL.
Otro proyecto puesto en marcha ha sido el de recruiting. Este sistema de gestión de empleados ha permitido la centralización en una plataforma única del proceso de selección, teniendo un seguimiento desde la creación de vacantes y disminuyendo los costes administrativos y de recursos humanos.
e-learning
Según explica Ortuño, acostumbrar a todas estas novedades al resto de la organización costó en principio, “sobre todo con la gestión documental o con el hecho de reportar incidencias a través de una herramienta que tenemos para ello”. Según añade “fue necesario un cambio cultural, tras el cual se han percibido los importantes beneficios generales del proyecto de reingeniería y la implantación de las herramientas nombradas”.
El departamento de IT Services se ha encargado también de liderar, junto con el área de recursos humanos, el proyecto de e-learning de KPMG, cuyo objetivo es poder ofrecer a todos los empleados de la compañía la formación que necesitan en todo momento desde su entrada. Se realiza mediante catálogo, por disciplina y categorías y asegurando el control y gestión de la carrera profesional.
“Ha sido uno de los proyectos estratégicos de la firma, la cual está desarrollando grandes inversiones a nivel de gestión del talento”,