Los seis pilares del futuro de los negocios (y III)
Según PwC, que Europa está cambiando no es ningún secreto, como tampoco lo es que los negocios están reestructurando sus estrategias para convertirse en unos competidores más agresivos y eficientes dentro del cada vez más integrado mercado europeo. El ritmo de adquisiciones de compañías europeas (y el hecho de que las propias empresas del Viejo Continente no son ya las compradas, sino las que compran), junto a un creciente deseo de competir ofrecen los tres indicadores clave para el futuro desarrollo de esa Nueva Europa:
• Al abrir las privatizaciones y la liberalización de los mercados en una especie de unión paneuropea, muchas compañías globales están aumentando su tamaño y su experiencia incluso hacia terrenos no tratados por ellas habitualmente. PwC pone, como ejemplo, a DaimlerChrysler.
• La armonización de las regulaciones de cada país está ayudando al crecimiento de esa competitividad y a la entrada de nuevos competidores. Así, los sectores de la industria están consolidándose y construyendo grandes organizaciones internacionales mediante fusiones que prometen convertirse en los líderes del mercado. Como caso práctico, PwC menciona las fusiones entre Olivetti y Telecom Italia o la de Vodafone con AirTouch.
• Por último, como el desarrollo de mercados de capital paneuropeos produce la presencia de determinadas empresas fuertes, surgidas especialmente de estas fusiones, las finanzas de esos mercados comienzan a estar dirigidas por apenas una docena de instituciones financieras, que además ofrecen las claves para el desarrollo. Como puntos de apoyo de esta unión paneuropea, de la cual deriva la Nueva Europa, PwC menciona la ampliación de la Unión Europea y la integración de las economías.
Los tres escenarios de 2010
PwC presenta también los tres grandes escenarios en los que se moverá la Europa de los negocios futura, unos escenarios ya consolidados en el año 2010. El primero de ellos consistirá en la interacción entre crecimiento económico continuado, mercados abiertos y avances tecnológicos.
Su contraposición será el segundo escenario, donde el crecimiento no será tan estable debido, fundamentalmente, a la posibilidad de que ese progreso tecnológico llegue un momento en el que se resienta y se ralentice, junto a una fiera competencia que provoque la caída de determinados negocios. De éste se derivará el tercer escenario, derivado de las quejas de los usuarios y civiles hacia los Gobiernos ya que, ante la inestabilidad económica provocada, pedirán medidas de regulación y proteccionismo ante esta competencia difícil de detener. A pesar de estos augurios, PwC asegura que “lo importante de estas predicciones es que deben servir tanto a las compañías como a los usuarios a reconsiderar la actual situación y su desarrollo futuro, en el cual todos se beneficien”.
De hecho, aquellos que dirigirán estos cambios en toda Europa todavía no son conocidos. Sin embargo, PwC formula también los elementos clave para realizar un acercamiento estratégico a este marco de desarrollo económico y tecnológico de las empresas en el continente:
• Diversificación geográfica y alcance global del riesgo económico.
• Flexibilidad operacional (PwC menciona el dicho “lo pequeño es bello”, refiriéndose a la inclusión de pequeñas compañías y unidades dentro de grandes corporaciones).
• Presencia local de las compañías (en contraposición a lo anterior).
• Entorno de inversión y conocimiento.
Como conclusión final a todo su estudio, la consultora asegura que la Nueva Europa ofrecerá enormes oportunidades a los negocios para prepararse de una forma ante los cambios que vendrán en breve.