Los seis pilares del futuro de los negocios (I)
Las novedades dentro de los negocios del futuro no pasan sólo por la famosa “e” de e-business. PriceWaterhouseCoopers (PwC) ha lanzado un estudio en el que se relatan los seis fundamentos para el futuro de los negocios, en donde el e-business es un puntal más. Según la consultora, habrá que tener en cuenta otros aspectos sin los que el propio negocio electrónico no funcionará: la convergencia de industrias, la economía del conocimiento, flujo de información dentro de las corporaciones, la competición por los mejores recursos humanos y el nuevo escenario para el desarrollo de los negocios: Europa. En esta primera entrega se hablará de esa convergencia de industrias y su relación directa con el e-business.
Convergencia de industrias. A pesar de que el cambio de identidades a industrias propiamente dichas se produjo entre las décadas de los 80 y los 90, para PwC la consolidación de estas industrias todavía tiene que pasar por la convergencia, que indefectiblemente tiene un escalón previo: el cambio de relaciones entre negocios y usuarios. De hecho, esta convergencia debe disolver los límites que tradicionalmente han dejado a ciertos negocios aparte del desarrollo de sus competidores, y redefinir muchas industrias y mercados.
La convergencia se conseguirá gracias al fortalecimiento del propio usuario o cliente con la tecnología: mejor dominio de la misma, mayor relación, intercambio con sus semejantes a través de esa tecnología... Internet está en la cima de ésta, ya que no sólo conseguiría una mejora de las relaciones, sino que permitiría al usuario saber en todo momento cuál es la empresa que más le conviene para solucionarlas. La tecnología llevaría unas mejores condiciones en el usuario que, a la vez, conseguiría dar un balón de oxígeno al desarrollo de esa convergencia y a una mayor unión entre los mismos tipos de productos.
PwC menciona cuatro pasos clave para la consucución de esto:
1.- Las empresas deben redefinir su acercamiento al marketing. A través de él, podrán seleccionar pequeños grupos de clientes, en una especie de empaquetamiento de los mismos, y reconocer así más fácilmente sus necesidades, transmitidas por los clientes mismos.
2.- Explotar sus bases de datos para ganar un mayor conocimiento de las tendencias de esos consumidores, y utilizarlos para reconfigurar las ofertas. No sólo Internet ofrece esta posibilidad: la consultora asegura que hay otras fuentes de información, como los puntos de venta físicos, que servirían también para materializar este objetivo.
3.- Las industrias deben ser mucho más ágiles y flexibles, estableciendo un núcleo principal de negocio y otros periféricos que giren alrededor del primero.
4.- El cuarto paso, y el más importante, es el de basar determinadas estrategias en las industrias y fabricantes más destacados de cada foco de negocio, ya que ofrecerían las claves para entender a esos usuarios, y así ofrecer a los demás una visión sobre el éxito en el negocio.
E-business. Es el gran futuro. PwC también confirma, como otras consultoras, que perderá la “e” y se quedará simplemente en negocio, sustituyendo la concepción que actualmente se posee sobre este término. Los pasos para alcanzar esa migración al e-business los enumera la consultora como sigue:
1.- Podría ser peligroso para actuales industrias abandonar el modelo hasta ahora vigente y trasladarlo en su totalidad a Internet en un primer momento. Con ello, se pasarían por alto cosas tales como mantener a clientes de siempre.
2.- Las capacidades Web deben ser integradas activamente a través de la cadena de valor. Aquí, los usuarios y suministradores deben trabajar juntos para construir esa cadena de valor on-line que mejore los servicios y reduzca los costes.
3.- Posterior migración de todos los negocios a Internet combinando su experiencia y servicios. En este paso, las empresas deben poseer ya la suficiente capacidad para transformar sus estrategias, organizaciones, procesos y sistemas sin traumas.
Tras todo esto, PwC asegura que los límites entre industrias comenzarán a desaparecer, abriendo sus operaciones y reteniendo sólo las más críticas en sus posiciones de mercado. Así, las cadenas de valor cruzadas se convertirán en una, creando organizaciones y mercados más ágiles y flexibles.
Convergencia de industrias. A pesar de que el cambio de identidades a industrias propiamente dichas se produjo entre las décadas de los 80 y los 90, para PwC la consolidación de estas industrias todavía tiene que pasar por la convergencia, que indefectiblemente tiene un escalón previo: el cambio de relaciones entre negocios y usuarios. De hecho, esta convergencia debe disolver los límites que tradicionalmente han dejado a ciertos negocios aparte del desarrollo de sus competidores, y redefinir muchas industrias y mercados.
La convergencia se conseguirá gracias al fortalecimiento del propio usuario o cliente con la tecnología: mejor dominio de la misma, mayor relación, intercambio con sus semejantes a través de esa tecnología... Internet está en la cima de ésta, ya que no sólo conseguiría una mejora de las relaciones, sino que permitiría al usuario saber en todo momento cuál es la empresa que más le conviene para solucionarlas. La tecnología llevaría unas mejores condiciones en el usuario que, a la vez, conseguiría dar un balón de oxígeno al desarrollo de esa convergencia y a una mayor unión entre los mismos tipos de productos.
PwC menciona cuatro pasos clave para la consucución de esto:
1.- Las empresas deben redefinir su acercamiento al marketing. A través de él, podrán seleccionar pequeños grupos de clientes, en una especie de empaquetamiento de los mismos, y reconocer así más fácilmente sus necesidades, transmitidas por los clientes mismos.
2.- Explotar sus bases de datos para ganar un mayor conocimiento de las tendencias de esos consumidores, y utilizarlos para reconfigurar las ofertas. No sólo Internet ofrece esta posibilidad: la consultora asegura que hay otras fuentes de información, como los puntos de venta físicos, que servirían también para materializar este objetivo.
3.- Las industrias deben ser mucho más ágiles y flexibles, estableciendo un núcleo principal de negocio y otros periféricos que giren alrededor del primero.
4.- El cuarto paso, y el más importante, es el de basar determinadas estrategias en las industrias y fabricantes más destacados de cada foco de negocio, ya que ofrecerían las claves para entender a esos usuarios, y así ofrecer a los demás una visión sobre el éxito en el negocio.
E-business. Es el gran futuro. PwC también confirma, como otras consultoras, que perderá la “e” y se quedará simplemente en negocio, sustituyendo la concepción que actualmente se posee sobre este término. Los pasos para alcanzar esa migración al e-business los enumera la consultora como sigue:
1.- Podría ser peligroso para actuales industrias abandonar el modelo hasta ahora vigente y trasladarlo en su totalidad a Internet en un primer momento. Con ello, se pasarían por alto cosas tales como mantener a clientes de siempre.
2.- Las capacidades Web deben ser integradas activamente a través de la cadena de valor. Aquí, los usuarios y suministradores deben trabajar juntos para construir esa cadena de valor on-line que mejore los servicios y reduzca los costes.
3.- Posterior migración de todos los negocios a Internet combinando su experiencia y servicios. En este paso, las empresas deben poseer ya la suficiente capacidad para transformar sus estrategias, organizaciones, procesos y sistemas sin traumas.
Tras todo esto, PwC asegura que los límites entre industrias comenzarán a desaparecer, abriendo sus operaciones y reteniendo sólo las más críticas en sus posiciones de mercado. Así, las cadenas de valor cruzadas se convertirán en una, creando organizaciones y mercados más ágiles y flexibles.
