Los portales corporativos triunfan
Su penetración en el entorno empresarial español aumenta
Un portal es una herramienta que permite acceso personalizado a un rango de información, aplicaciones o herramientas con un objetivo concreto, desde crear un escritorio integrado a partir de aplicaciones, proporcionando una identificación común del usuario y la distribución de contenido relevante a esa persona en particular, hasta la construcción de un interfaz personalizado en función del rol de la persona en la organización.
Pero la realidad de los portales en la sociedad española va más allá. Según los datos aportados por Accenture, es posible, en el momento actual segmentar los portales en función de diferentes criterios. Por sus objetivos, es decir la creación de portales según el objetivo o la razón de “negocio” del portal. Esto incluye portales públicos en la web, portales de empresa, workspaces para trabajo colaborativo.
En función del canal que se utilice para acceder a él: Internet/intranet, wireless, voz o sus funcionalidades: portales horizontales y verticales. Las soluciones horizontales son las tecnologías de conectividad incrustadas en el portal y las verticales son las específicos de cada tipo de negocio o actividad dentro de la empresa, (“vortals”). Y por último la audiencia, dependiendo de si el portal busca conectar: clientes (B2C), otras empresas (B2B) o empleados (B2E).
Elementos tecnológicos
Sea cual sea el contenido del portal y su orientación, hay una serie de elementos comunes a todos ellos, tales como portlets o contenedor configurable, y usualmente interactivo, de información que se incluye en la estructura del portal.
Por su parte, los web services permiten a las aplicaciones compartir información e incluso invocar funciones de otras aplicaciones independientes, sin importar el sistema operativo, plataforma en la que se ejecuten o incluso el dispositivo que se utilice para acceder a ellos.
Pero también, como no podía ser de otra forma, la seguridad es un elemento imprescindible de los portales, algo que se alcanza a través de distintas soluciones diseñadas por diferentes empresas y que cubren todos los aspectos del portal. Entre las más utilizadas, según los datos que maneja Accenture, destaca SSL (Secure Socket Layer), protocolo diseñado por la empresa Netscape Communications, que permite cifrar la conexión, incluso garantiza la autentificación. Se basa en la criptografía asimétrica y en el concepto de los certificados. Firma digital: en la transmisión de mensajes telemáticos, método criptográfico que asegura la integridad de los mismos así como la identidad del remitente o https, versión segura del protocolo http y por último, servidores de correo, aplicación que permite enviar mensajes de unos usuarios a otros con independencia de la red que estén utilizando.
Pasarelas de pago: también llamada TPV (Terminal Punto de Venta) virtual, cumple en Internet la misma función que los sistemas tradicionales de cobro mediante tarjeta de crédito y permite que los clientes puedan pagar una compra utilizando una tarjeta de crédito. Por último, pero no menos importante, la movilidad, que se está descubriendo como una de las aplicaciones estrellas de los portales. Los más avanzados ya cuentan con sistemas personalizados de acceso y proceso móvil de información corporativa adaptados a las diversas necesidades de múltiples empresas y sectores.
Según los expertos de Accenture, en los próximos meses veremos la incorporación de tecnologías como streaming que permite la reproducción de sonido o vídeo sin que sea necesario descargar previamente todo el archivo de recurso, herramientas de BPEL (Business Process Execution Language, BPM (Business Process Management), ESB (Enterprise Service Bus) o UML (Unified Modelling Language).
El futuro
Señalar por último que no existe un solo producto que dé la solución completa a los requerimientos de gestión de todo tipo de contenidos: normalmente hay que integrar productos, y existe una convergencia clara entre el mercado de portales y el de gestión de contenidos. El término “portal” como producto independiente tiende a desaparecer. Los portales empiezan a ser parte de la infraestructura y poco a poco dejarán de ser un producto diferencial que incluso llega a ser gratis.
Sin embargo, todavía no existe una opinión unánime por parte de los analistas a la hora de categorizar las herramientas de portales. El mercado y las necesidades de las empresas marcarán el camino que éstos van a tomar.