Las TIC en la AGE
De acuerdo con los datos hechos públicos por el Consejo Superior de Informática del Ministerio de Administraciones Públicas, la Administración General del Estado (AGE) destinará este año más de 225.000 millones de pesetas a las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) Una cifra que representa un incremento del 18% respecto al presupuesto del año pasado. El dato, por si sólo, es lo suficientemente positivo como para congratularse; pero si se contempla por separado la cifra de inversiones de este año (superior a los 110.000 millones de pesetas), la apuesta decidida de la Administración Española por las TIC se perfila con mayor claridad: ¡nada menos que un 29% de incremento respecto a 2000 en las inversiones TIC! Parece que la iniciativa Info XXI ha conseguido el milagro de la multiplicación de los panes y los PCs en la Administración... además del evidente incremento de los presupuestos. Este respaldo indirecto a la labor que desarrollan los profesionales TIC de la AGE se convertirá, nadie lo duda, en nuevos servicios que faciliten la relación de los ciudadanos con la Administración. Lo que hace falta es que este incremento en la inversión en TIC no sea un espejismo, sino que se traduzca en una decidida apuesta por la implantación de soluciones TIC en todos los niveles de la Administración. Tradicionalmente, la AGE ha adolecido de una falta de estrategia tecnológica definida a nivel político. Los esfuerzos de coordinación promovidos por iniciativa de los propios técnicos de la Administración han significado, en muchas ocasiones, el único esfuerzo real en la búsqueda de una estrategia tecnológica común ante la ausencia de una dirección política. Así, Info XXI parece haberse convertido en el catalizador de iniciativas que necesitaba la Administración. Falta ver si los políticos lo entienden así y aprovechan este impulso para dar el empujón tecnológico que la AGE está demandando.
