Las pymes europeas ahorrarían más que las grandes corporaciones al usar la factura electrónica
Las pymes de entre 250 y 499 empleados gastan 11 euros y 8,6 días en procesar una factura entrante, cifras que ascienden a 14,5 euros y 10 días si se trata de una corporación de más de 5.000 empleados.
Las empresas europeas con una plantilla de más de 5.000 empleados tardan más tiempo y gastan más dinero en procesar sus facturas que las que tienen una plantilla de entre 250 y 499 personas, según revela un estudio realizado en España, Alemania, Francia y Reino Unido por Iron Mountain y YouGov.
Los resultados de este estudio indican que muchas compañías siguen utilizando procesos anticuados y controles inadecuados en la gestión de sus facturas. Las cifras facilitadas por los encuestados revelan que, mientras que las firmas con una plantilla de entre 250 y 500 empleados tardan una media de 8,6 días y gastan 11 euros para procesar una factura entrante, estas cifras suben a casi 10 días y 14,5 euros para las empresas con una plantilla de más de 5.000 empleados.
Estos resultados indican una falta de eficiencia corroborada por otros descubrimientos del estudio, como que un 22% de los encuestados que trabaja en empresas de más de 5.000 empleados piensa que tiene a demasiada gente dedicada a la gestión manual de facturas, preocupación que sólo comparte el 9% de los directivos de empresas con una plantilla de entre 250 y 500 personas. De forma similar, el 24% de los encuestados de compañías con más empleados cree que el coste total de estos procesos financieros es demasiado alto, frente a sólo un 13% que tiene la misma impresión en las empresas de entre 250 y 500 trabajadores.
Sin embargo, los directivos de las empresas de menor tamaño son más propensos a expresar su preocupación porque sus sistemas de gestión financiera y gestión documental puedan estar desactualizados: un 13 % frente a sólo un 5% de los que trabajan en compañías de más de 5.000 empleados.
“Una gestión eficaz de las facturas es un proceso crítico para la buena marcha de los negocios, con independencia del tamaño de la empresa”, comenta Ignacio Chico, director General de Iron Mountain. “Cuanto mayor sea la empresa, más facturas tendrá que gestionar, y más posibilidades habrá de que esas facturas lleguen en múltiples formatos, idiomas y moneda. A medida que aumenta el volumen y la complejidad de las facturas, muchos sistemas financieros llegan al tope”.