La televisión se reinventa a sí misma
Telecinco digitaliza su archivo documental de imágenes
Cuando llegó el momento de construir el nuevo plan, explica José Luis Romero, director de la división técnica de Telecinco, se plantearon dos opciones: o empezar a renovar y cambiar toda la tecnología de la cadena de televisión, es decir, pasar todo de analógico a digital, o invertir en mantenimiento y no cambiar nada. Había que tomar una decisión rápidamente así que se convocó un consejo de dirección en el que se decidió “aguantar un poco más el coche, cambiarlo, pintarlo y cambiarle algún tornillo”, asevera el director técnico de la cadena. Se pasó entonces a invertir en una serie de proyectos de renovación cuyo planteamiento era incidir, desde un punto de vista tecnológico, en aquellas unidades o sectores que más lo requirieran. Uno de los sectores más obsoletos era el área de informativos, así que se decidió trabajar en este sentido, lo que derivó en el proyecto de digitalizar la redacción puesto que, según Romero, “los sistemasa que se estaban utilizando en informativos eran la mejor informática del siglo XIX”. Esta obsolescencia en el área de informativos se debía a que la cadena no nació con vocación informativa, señala Romero, sino que la concepción original de Telecinco era más bien comercial. Otro de los problemas que se detectaron en informativos fue la forma en que estaba concebido todo el proceso de producción puesto que, mientras que la sala de edición estaba situada en la planta cero del edificio la planta cuarta albergaba la redacción y, como solamente había un ascensor los periodistas se pasaban el día subiendo y bajando con la consiguiente pérdida de tiempo. Este hecho llevo a una segunda decisión: la construcción de un nuevo edificio de forma paralela a la digitalización de la redacción.
De la informática del XIX a la primera redacción digital
Iniciado el proyecto de digitalización de informativos, llegó el momento de tomar otra decisión crucial que marcaría la referencia para todo el proceso: “o los periodistas editaban y tomaban el control de toda la realización, o se seguía el mismo esquema poniendo, digamos en limpio, la tecnología”, comenta el director de la división técica de la emisora. Finalmente, se decide que el periodista edite y partiendo de esta base se realiza todo el cambio: se instalan servidores de vídeo para sustituir a los magnetoscopios, mesas de edición no lineal, etc.
Una vez tomada esta decisión, el siguiente paso, consistió en la búsqueda de un fabricante de la mano del cual, se pudiera comenzar la digitalización de la redacción, “exploraremos el mercado y contactamos con las cuatro grandes empresas que en aquel momento eran capaces de construir el sistema: Sony, Quantel, Avid y Tektronics”, relata Romero. De todas ellas, la única que permitía que el periodista editara controlara las imágenes, hiciera el “off”, cargara vídeos, etc., es decir, aglutinara todas las funciones y pudiera realizar todas ellas de manera digital, era Tektronics; así que se llegó a un acuerdo con ellos y se definió el proyecto desde la perspectiva técnica. Este proyecto se asentó sobre una premisa fundamental, “crear un sistema para satisfacer las necesidades del usuario y no las de los ingenieros”. La finalización del proyecto, que englobaba la construcción del nuevo edificio, abarcó aproximadamente un año y se puso en marcha en agosto del año pasado; pero, “antes de que la redacción digital entrara en servicio, detectamos que para que el proyecto estuviera completo de una manera global, teníamos que trabajar en tres entornos: la redacción, el archivo y las unidades móviles; en este último decidimos finalmente no actuar porque se nutre de autónomos y no tenía mucho sentido”, afirma Romero.
Digitalización del material documental
La renovación de la redacción de informativos ya estaba en marcha, así que se planteó el único tema que quedaba pendiente: la digitalización del archivo. Según comenta el director técnico de la cadena, “enseguida nos dimos cuenta de que este proyecto era demasiado complejo en aquel momento, así que decidimos esperar hasta que estuviera finalizado el de la redacción; una vez que estuvo terminado, nos dimos cuenta de que habíamos aprendido mucho así que comenzamos a plantearnos el tema del archivo”.
Este era un proyecto muy complejo pues se basaba fundamentalmente en una concepción distinta de la televisión: “queríamos un archivo digital, que estuviera integrado en la redacción y donde no se movieron cintas de vídeo sino ficheros”, afirma Romero. Tras dar las últimas pinceladas a la idea, el equipo técnico de Telecinco se puso de nuevo a buscar un fabricante que pudiera materializar la idea. Primero se entablaron conversaciones con las mismas empresas que se habían barajado a la hora de digitalizar la redacción pero, “ninguna de ellas entendía lo que queríamos hacer”, señala Romero. El problema que encontró Telecinco eraque tenía una idea, existía una concepción muy innovadora de la televisión, un proyecto para revolucionar este mundo y la forma en la que se trabaja en él y, lo que se hacía imprescindible era encontrar un fabricante que pudiera adaptar su tecnología a la idea. Según relata el director de la división técnica, “ni siquiera sabíamos si sería posible convertir lo que era un concepto en una realidad. Consultamos con compañías como Silicon Graphics, Sun, Sony, Panasonic, Tektronics, se estudiaron planos, se llevaron dibujos, llenamos mil pizarras, les explicamos una y otra vez lo que teníamos en la cabeza, explica el director técnico de la cadena, al final ya sólo buscábamos un fabricante que al menos, nos dijera que nos estábamos locos y que nuestro proyecto era factible. Muchos de ellos nos miraban con los ojos como platos pero, finalmente, otros nos hicieron ver que nuestro proyecto se podía materializar”.
Objetivo: asesinar la cinta de vídeo
El proyecto de Telecinco era un proyecto sin precedentes, “ nos habíamos fijado un claro objetivo que era asesinar la cinta de vídeo, quitarla del proceso de producción”, sentencia Romero. Se trataba de reorganizar la actividad de la televisión, continúa, “pues pensamos que la televisión tal y como se concibe actualmente está muerta, es objeto de un museo tecnológico. Est