La tecnología per se ha dejado de tener valor estratégico en la empresa

Según las conclusiones de una jornada del grupo Penteo

La tecnología no tiene un valor por sí misma, aunque sus ventajas, si el uso de ésta es adecuado, son claras para incrementar la competitividad empresarial. Esta es una de las principales conclusiones extraídas de la XXII Jornada de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones que organiza habitualmente en Barcelona el Grupo Penteo y que esta vez ha tenido lugar en Madrid. En esta jornada, descrita como “un punto de encuentro con los usuarios”, según el director general del grupo, Antonio Maciá, también se destacó el nuevo papel del director de sistemas y tecnologías de la información (CIO) que requiere cada vez más conocimientos del negocio, aunque, eso sí, “sin perder en ningún momento su punto de vista tecnológico”, como apuntó Albert Delgado, director de Penteo Análisis. Éste aportó una visión general del panorama al que se enfrentan los departamentos de sistemas en la actualidad y aseguró que éstos deben asumir un nuevo rol, más allá de la prestación de servicios y asociar la estrategia de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) a la de la empresa, proporcionando mejores servicios externos e internos y una arquitectura sólida, pero ágil al mismo tiempo, que ayude a la compañía a adaptarse a un entorno cambiante, como es el mercado actual. “Los CIOs deben conocer los procesos de negocio y coliderar la transformación de su empresa –manifestó Delgado–. Asimismo, deben orientar sus acciones a la mejora de la relación con el cliente y convertirse en un socio tecnológico del director general para la innovación del negocio”.

Cierta recuperación
Delgado aseguró, a la vista de los datos aportados por los estudios de Penteo, que el gasto en TIC está empezando a remontar y que las predicciones para este año y el próximo son positivas, aunque el gasto no se disparará. “2006 será un punto de inflexión para el sector TIC, ya que hasta entonces no madurarán muchas tecnologías que ahora están emergiendo”. Actualmente, según un informe del grupo, el presupuesto que las compañías dedican a las TIC (al menos un 41% de ellas) oscila entre un 1 y un 2% de su facturación total. En España en general, el gasto en TIC en relación a su PIB (Producto Interior Bruto) es de un 5,43%, frente al 6,43 de Europa Occidental y el 7,9% de Estados Unidos. Esta escasa inversión española en las TIC ha permitido, sin embargo, que las consecuencias de la crisis para el sector tecnológico no hayan sido tan negativas como ha ocurrido. “En cualquier caso, sí se ha producido lo que llamamos la ‘revancha TIC’, es decir, poner a las tecnologías en su sitio, una vez que explotó la burbuja tecnológica y quitarles el papel estratégico que se pensó que tenían”, aseguró Delgado. Para recuperar éste, es necesario “gestionar las TIC como un negocio”.

El rol de las TIC
Por su parte, Fernando Francés, presidente de DMR Consulting, ahondó en la idea de Nicholas Carr de que “la tecnología no importa” pues “no es un elemento diferenciador de las compañías, sino que debe ser un soporte de los cambios organizativos de éstas alineándose con el negocio”. Juan Iranzo, director general del Instituto de Estudios Económicos, alzó, por el contrario, el papel de las TIC, que “están revolucionando el mundo, aunque todavía estamos en una fase tan incipiente que no nos damos cuenta de ello”. Iranzo destacó como las dos grandes aportaciones de las TIC la posibilidad de conectar el mundo en tiempo real y a un coste bajo y mejorar la productividad empresarial. “Las TIC están perfeccionando los mercados y mejorando especialmente el de servicios”. Finalmente, Jesús Banegas, presidente de AETIC y Santiago Cortés, presidente de HP en España, aportaron su visión acerca de la relevancia de la integración de la I+D y las TIC como motor de productividad en proyectos estratégicos.

Viñeta publicada el 20 de febrero de 1870 en La Flaca n.º 35 Tendencias

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