La tecnología al servicio del diseño
Elisava Escuela Superior de Diseño
Con la segunda edición del Master en Diseño de Vehículos de Transporte, orientado a diseñadores industriales, “se intenta cubrir un campo con carencias de personal cualificado y en el que los diseñadores tienen mucho que aportar”, afirma Berta Antich, Jefa de programas de masters y postgrados de Elisava. “El curso trata de formar a profesionales capaces de generar ideas innovadoras sobre la base de los últimos conocimientos en el sector, utilizando para ello medios informáticos y de modelaje”. Además, a lo largo de las 1.000 horas que tiene de duración, se intenta profundizar en nuevos conceptos y formas de habitabilidad y uso de vehículo como ejes generadores en el diseño de transportes. El master consiste en la realización de un proyecto final que abarque exteriores e interiores de un vehículo tanto desde un punto de vista CAD (utilizando el programa de diseño Alias) como de modelo de clay (material moldeable). “En Cataluña están emergiendo numerosas industrias de la automoción y es importante que haya gente especializada en este sector”, señala Antich. Puesto que se trata de dar respuesta a una necesidad real del mercado, “es imprescindible la colaboración de empresas del sector que permitan a los estudiantes la realización de prácticas profesionales”. Así se cuenta con la participación de compañías como Seat, Rücker Ibéric, Merck o Nissan. Como infraestructura, la escuela pone a disposición de los alumnos un taller especializado de modelos de clay y un aula informática específica con una serie de prestaciones entre las que destacan estaciones Silicon Graphics Octane y software Alias/ Wavefront Studio V8, Studio Paint 3D, Composer V4, IBM Catia y Photoshop. “La tecnología es imprescindible en la realización de este proyecto pero también se ha de poder realizar después en modelo clay”.
Multimedia y a lápiz
En cambio en el Master en diseño de Interfaces Multimedia interesa trabajar con el producto, no con las herramientas. “Nuestra intención no es formar programadores sino directores de proyecto. Se ha de trabajar el diseño pero no la tecnología ya que es ésta la que soporta el diseño”, puntualiza Berta Antich. Las nuevas plataformas digitales permiten tratar los materiales visuales y acústicos con herramientas informáticas lo que facilita la evolución hacia nuevos productos cada vez más multimedia. “Este curso pretende profundizar en el equilibrio complejo de la visión global necesaria en los proyectos multimedia y la gran dedicación que exigen los medios informáticos utilizados como herramientas para el diseño”. Los estudiantes disponen de un aula multimedia equipada con editores interactivos de imagen, dibujo en 2D, tratamiento de imagen, edición no lineal de vídeo, edición de audio y grabador de CD. En cuanto al hardware, cuentan con Power Macintosh y G3. El curso está orientado a “gente con imaginación que entienda que existe una tecnología pero que sea capaz de transgredirla. Aunque también se busca que sean proyectos viables”. El objetivo final del master es proporcionar a los alumnos la competencia “para que pueda convertirse en diseñadores especialistas en el ámbito de los interfaces multimedia y emplear los conocimientos tecnológicos para la realización de los proyectos”. A lo largo del curso se dará la misma importancia tanto a las ideas conceptuales, gráficas y visuales del diseño como a las ideas técnicas que las fundamentan.
Y es que en Elisava no se desdeñan herramientas tradicionales como el papel y el lápiz. En diseño, el ordenador y por extensión la tecnología “más que imprescindibles son necesarios. Pero utilizada como herramienta: lo importante es tener claro el proyecto y cómo utilizar la tecnología”. Pero para diseñar no es imprescindible el ordenador y un ejemplo es el Master en Diseño de Espacio Público orientado a la realización de proyectos, gestión y estrategias en acontecimientos temporales que se realizan en el espacio público como exposiciones, ferias. Lo imparten profesores de diversas áreas que van desde arquitectura hasta el mundo del teatro “y el proyecto puede ser desde un informe expuesto en clase o un dibujado a lápiz hasta en un soporte multimedia. Se trata de saber escoger la mejor herramienta para conseguir el objetivo que se persigue”.