La madurez de la fuerza de trabajo
En 2050, el 35,6% de los españoles tendrá más de 65 años
Nadie duda de que el factor humano es el activo más importante que tiene una empresa. Es por ello, que ante el progresivo envejecimiento de la población en nuestro país, en 2050 el 35,6% de los españoles tendrá más de 65 años, las empresas que no tomen medidas ante este hecho corren el riesgo de perder competitividad. Al menos así lo recoge el estudio Previsiones de población 2004-2050 realizado por Eurostat, en el que se pone de manifiesto los efectos que tendrán en las empresas el envejecimiento de la población: el número de trabajadores jóvenes para sustituir a los jubilados disminuye (España será el país con menos personas en edad laboral de toda la Unión Europa) y es previsible que se retrase la edad de jubilación ante el aumento de gastos sociales.
Afrontar el reto
Ante este escenario de cambios demográficos las empresas deben prepararse si no quieren perder el tren de la competitividad. Es por ello que ante la escasez de profesionales en activo, la solución radica, según José de Ramón, socio responsable de Soluciones Capital Humano de IBM, “en desarrollar y retener el talento de los empleados de sus plantillas”. De hecho, actualmente, un estudio elaborado por IBM, muestra que el 39% de los directores de RR.HH. de 320 compañías considera que el mayor reto al que se enfrentan las empresas hoy en día es mejorar las habilidades y competencias de las plantillas. No obstante, este mismo estudio refleja también que el 60% de las empresas maduras tiene hoy en día dificultades para identificar el talento y desarrollar las habilidades más importantes. En cuanto al desarrollo del talento de los profesionales, el informe de IBM muestra que aquellas empresas que realizan programas de desarrollo gerencial para el 80% o más de sus directivos tienen aproximadamente una rentabilidad tres veces mayor que las compañías que tiene al 0-60% de sus directivos en esos programas.
Actualmente, señala De Ramón, hay empresas de sectores como el aeronáutico y el financiero que han llevado a cabo una transferencia de conocimiento con la creación de foros específicos e interactivos entre profesionales experimentados y jóvenes. Además, hay empresas que han decido concentrar el conocimiento en la empresa con las creación de universidades internas.
Por su parte, la retención del conocimiento de los empleados debe apoyarse, según el estudio de IBM, en la puesta en marcha de programas de sucesión y el desarrollo de políticas de equilibrio entre la vida personal y profesional que para las personas suponga una aliciente para permanecer en una empresa: horario flexible, teletrabajo, reducción de viajes de trabajo, entre otros.