La informática toma el testigo de los sistemas manuales de votación

Pese a la tremenda evolución de la técnica y la ciencia en las últimas décadas, España sigue siendo un país bajo el influjo de un sistema electoral de votación clásico, por algo será . Lógicamente Indra, responsable de la práctica totalidad de procesos electorales desde aquél primer año en 1976, ha ido inyectando dosis de tecnología avanzada, con arreglo a las innovaciones y desarrollos que se han consolidado en el panorama español, tanto a nivel de redes como de telecomunicaciones en general .

Ignacio Royo-Villanova, miembro de la unidad de Procesos Electorales de Indra, hace memoria sobre sus comienzos en el área electoral, " en aquellos años trabajábamos con una red denominada Infonet, a una velocidad de 300, y hoy trabajamos con una red que puede sobrepasar las necesidades que requiere el proyecto " . " En las elecciones de 1978 -continúa recordando- no existía el PC, trabajábamos con terminales tontos con emulaciones del 3170 por ejemplo . En Indra nuestro contacto con la tecnología es continuo, pero aún así, nunca hemos acometido modificaciones bruscas en los distintos proyectos que hemos liderados, sin embargo, si ahora echamos la vista atrás, vemos cómo la evolución ha sido abismal, sobre todo desde la aparición de los PC’s e Internet " .

El sistema clásico, la tradición

La dinámica que se lleva a cabo en los procesos electorales bajo un sistema clásico, se materializa en las siguientes pautas: captura del dato, escrutinio y difusión . A pesar de que éstos son fijos, la captura del dato mediante este sistema es susceptible de ser realizada por varios procedimientos, que en su práctica totalidad han sido experimentados por Indra en distintos procesos electorales que ha liderado . Algunos de ellos son: el método manual ( España ) , la transmisión electrónica ( Venezuela ) , a través de faxes ( Argentina ) , etc . Tal como comenta Ignacio Royo-Villanova, " el procedimiento que seguimos en España es un sistema muy tradicional y fiable . Cabe que se produzcan ciertos errores pero, para combatirlos se realiza un primer control que detecta y corrige los que son puramente aritméticos -que el número de votos sea menor o igual censo, que el recuento total sea igual a los votos emitidos a favor de los distintos partidos políticos y los nulos, etc . - . Existe una segunda tanda de validaciones de la que se encarga el poder judicial que valida la totalidad del proceso .

Independientemente del tipo de proceso electoral a desarrollar, el disponer de un censo depurado deviene esencial para el éxito del proyecto . En la edición que se presenta en España, todo está garantizado por el Instituto Nacional de Estadística e Indra lo incorpora a su sistema como base del proceso electoral y su depuración agiliza el diseño del proyecto .

Primeros pasos hacia la mecanización

El sistema desarrollado por Indra para Venezuela consiste en una máquina lectora de votos . La boleta está diseñada con un formato y espacios reservados, de tal forma que cuando el ciudadano ejerce su derecho al voto, la única salvedad que encuentra frente a los procedimientos anteriores es que en lugar de depositarla en una urna, la deja caer en un escáner que actúa a modo de lector óptico . Posteriormente, y de una forma tan sencilla como apretar un botón, tras esperar a que el Presidente de por finalizada la jornada y lea el Acta, se realiza la transmisión de éstas al Centro de Datos .

Después de comprobar el éxito del caso venezolano puede que se pregunten: ‘si la tecnología y los métodos están probados, ¿ porqué no se ha implantado en nuestro país ? La respuesta es muy sencilla nuestra normativa electoral no prevé la votación mecánica .

Siguiendo bajo esta línea, Indra experimentó en las pasadas elecciones en Galicia con unas máquinas de votación, de transmisión de datos . De aprobarse, estaríamos frente a un sistema de votación mixto, que se sometería al escrutinio normal y luego se hace una transmisión telefónicamente por una red conmutada, por una línea punto a punto o cualquier otra .

Frente al sistema de votación clásico, existen iniciativas relacionadas con lo electrónico . Un sistema de transmisión automático logra distinguirse, simplificadamente, porque el voto se efectúa en urnas pulsando un botón, lo que genera de forma automática al cierre de la jornada electoral, la transmisión de los resultados .

Como ya ha quedado de manifiesto, la captura del dato en nuestros país no es electrónica . No obstante, especial mención merecen las pruebas electrónicas que se llevaron a cabo en las últimas elecciones gallegas . Para Ignacio Royo, el sistema mixto propuesto en Galicia, " comenzará a utilizarse en un futuro muy inmediato, dada su sencillez y rapidez . Con él, se abrirá la urna, se confeccionará el Acta, y éstas se transcribirán en una máquina, así se evitan los miles de personas que están grabando " .

Por su parte Brasil es, aparentemente el país más complicado para acometer un sistema de votación electrónico, sobre todo por su extensión y razones culturales, ya que el alto índice de analfabetización dificulta en exceso las tareas de formación en torno a los equipos requeridos . Sin embargo, sus últimos comicios estuvieron marcados por tintes tecnológicos . Los ciudadanos se plantaron ante las máquinas de votación y, mediante la selección de la fotografía del candidato y el anagrama del partido, manifestaron su decisión electoral .

Para satisfacer la curiosidad de los interesados en cuanto a la validez de las estimaciones que se realizan sobre los resultados, conviene saber que éstas son de dos tipos de estimaciones que suelen realizarse en torno a los resultados . Una de ellas es la denominada ‘en boca de urna o puerta de colegio’, donde se le pregunta al votante cuál ha sido su elección y que la experiencia ha confirmado como un proceso poco fiable . El segundo tipo de estimación se lleva a cabo con el recuento de los primeros votos en mesa tras el cierre de la jornada . Sin embargo, para Royo-Villanova, " las alteraciones que se producen bajo esta técnica, simplemente porque no se remuevan las papeletas en la urna -dado que las tendencias del voto varían según la franja horaria en la que se haya realizado la votación-, se traduce en una muestra sesgada " . A pesar de estas técnicas, en la práctica son los resultados de Indra los que se ofrecen como oficiales, pues éstos se toman del escrutinio real de las mesas y se prolonga su captura hasta el cierre de las mesas, momento en el cual los datos recogidos por Indra se encuentran lo suficientemente consolidados, asegurándose el Ministerio, como responsable del escrutinio provisional, . la fiabilidad de los resultados .