La globalización y su repercusión en las políticas de empleo de las compañías
Uniconsult ofrece alternativas para la gestión de los recursos humanos
Fuertes pérdidas de masa laboral, un aumento significativo del desempleo, un fuerte impacto social y un deterioro de tejido empresarial resumen en gran medida, la preocupante situación a la que se está enfrentando Europa, en gran medida su sector tecnológico.
El traslado de los centros de decisión, marcas pan-europeas o mundiales y la configuración de centros de producción y de logística constituyen algunos de los fenómenos surgidos de la globalización financiera empresarial. Esta situación, presenta a un perfil de inversor que demanda una mayor seguridad y retorno de sus inversiones, de manera que, cuando los analistas financieros anuncian que una empresa no va a cumplir sus objetivos, ésta, para tranquilizar a los accionistas ante una más que probable venta masiva de acciones, anuncia medidas que en muchos casos afectan a sus plantillas, pensando que con un aligeramiento de estructuras provocará un descenso en las pérdidas.
Para Fernando de Salas, presidente de UniConsult, “en muchas ocasiones, la aplicación a nivel local de estas medidas vienen impuesta por la política general de la empresa. Estas imposiciones se producen en consonancia con la marcha de la empresa a nivel global con independencia de los resultados de la división o planta afectada”. Es por ello, que una de las causas de esta situación venga determinada por el impacto de la globalización financiera.
Unificación de criterios
Si bien el Consejo de la Unión Europa lleva varios años tratando de unificar criterios en materia de empleo, la realidad sigue siendo bien distinta. De cara a este año, la UE ha pedido a los estados miembros el desarrollo de políticas fuertes en materia de incremento de las tasas de empleo, aumento de la competitividad y la productividad, reducción de la desigualdad, mejora de la calidad de los puestos de trabajo, modernización de los mercados de trabajo, inversión en formación e inmigración como fuerza de trabajo.
Si circunscribimos la situación a nuestro país, las mejoras deben dirigirse hacia aspectos tan puntuales como el abaratamiento del despido, prolongación de la vida laboral y la movilidad de mano de obra. Es precisamente en este punto, donde España se encuentra muy lejos de sus vecinos europeos. Si bien en EE.UU llega a ser excesiva (1/3 de los norteamericanos cambia de domicilio una vez al año), en nuestro país, afirma Fernando de Salas, “movido porque un 70% de la población es propietaria de su vivienda y un 30% la alquila, contrariamente al resto de Europa, donde el 30% es propietario y el resto es arrendatario, provoca que la inmovilidad en España alcance cuotas muy altas”.
Alternativas a los despidos
Para reducir el impacto negativo de medidas como reducciones de plantilla, traslados, prejubilaciones y expedientes de regulación, las empresas, afirma Fernando de Salas, “deben proporcionar programas de recolocación de los trabajadores despedidos, permitiendo que estos se reincorporen a la vida laboral lo antes posible”.
Bajo esta intención, nace en 1985 UniConsult Integrated Business Services, un grupo empresarial que ofrece soluciones integradas para el ciclo completo del empleo en sus distintas fases: selección, desarrollo, retención y separación. A través de sus programas DBM de recolocación, colocación y gestión del cambio, UniConsult presta apoyo a profesionales, empresas y empleados en procesos de reestructuración, fusiones, adquisiciones y otros procesos de cambio.
Si bien sus servicios se extienden a sectores como la banca, consumo y farmacéutico, el sector tecnológico ha sido el más dramático y evidente, afirma Fernando Salas. A diferencia de otros sectores donde la inversión hubiera sido más paulatina, en el caso del mercado tecnológico, y en parte debido a la explosión de Internet, las empresas se lanzaron en una carrera de inversiones abusivas sin tener en cuenta los hábitos propios del mercado. Dentro del campo tecnológico varias empresas han solicitado los servicios de UniConsult, casos como Unisys, Uni2, Retevision, Xfera y Lucent. En este caso, afirma Fernando de Salas, “en seis meses hemos colocado al 75% del personal de Lucent, una cifra bastante buena habida cuenta de la escasez de puestos que hay en el mercado”. Si bien el tiempo del proceso puede parecer largo, el objetivo de la empresa no es una pronta recolocación sino una de calidad del mismo. En este sentido y, según señala Fernando de Salas, ante la globalización, “las empresas europeas han de dirigirse hacia el empleo de calidad como paso ulterior al pleno empleo”.
Externalizar el proceso de recolocación
“Es una practica cada vez más frecuente entre las empresas tecnológicas”, afirma Fernando de Salas. Cerca del 80% de las empresas tecnológicas que, tienen un departamento de recursos humanos y más de 100 empleados, deciden poner en manos de terceras compañías todo el proceso de recolocación de su plantilla.
El proceso de recolocación, según señala Fernando de Salas, permite preservar la imagen de la empresa demostrando en la práctica su compromiso social y humano”.
Asimismo, este proceso cuida el cliema laboral, ya que al ayudar a la recolocación de los despedidos, los empleados que permancen pierden el miedo a quedarse sin trabajo. También, reduce los costes laborales de la compañía, al minorar el número de acciones legales que los despedidos puedan emprender contra la empresa que prescinde de su colaboración.
Por su pate, los beneficios que reportará en el trabajador la implantación de un proceso de recolocación son igual de beneficiosos que para la empresa, afirma Fernando de Salas. El candidato recibe la formación necesaria para tener éxito en la búsqueda de su nuevo puesto de trabajo, desarrollando sus capacidades y aumentando sus conocimientos.
UniConsult, que facturó en 2001 cerca de 8 millones de euros, espera alcanzar este año los 11,5 millones de euros. En el 2003, “creo que llegaremos cerca de los 15 millones de euros”, señala Fernando de Salas.