La Comunidad Europea ha decidido ampliar su programa de investigación en tecnología de microprocesadores para las universidades y las Pymes.
La Comisión encargada del programa Eurochip donde se incluyen las ayudas de investigación para las universidades, ampliará la duración de dicho programa, que en un principio se había planificado a tres años. Eurochip, que originalmente formaba parte del proyecto Esprit, tiene como objetivo la promoción del desarrollo de prototipos de microprocesadores de silicio y programas de software que permitan a las universidades y las pequeñas empresas acceder a la construcción y desarrollo de tecnología informática sin grandes inversiones. El proyecto tendrá a partir de ahora entidad propia, con un servicio pan-europeo que permtirá a las empresas probar los diseños con inversiones muy pequeñas.