La certificación, una buena propuesta en momentos de crisis
La Fundación EXIN trabaja en el desarrollo de programas de certificación en "cloud computing" y "green IT"
A pesar de que la formación sigue siendo la primera partida sacrificada dentro de las empresas en tiempos de crisis, “muchos de los profesionales que han perdido su empleo han optado por la formación y la certificación, a nivel Foundation, como la mejor manera de mejorar su competitividad y volver lo antes posible al mercado laboral”, señala Santiago. De hecho, “me atrevería a señalar que hemos compensado la pérdida de formación y certificación a nivel empresa con la individual”, asegura Santiago. Esta tendencia ha hecho que varias universidades como son la Politécnica de Madrid y la Politécnica de Valencia decieran incluir en sus programas académicos la certificación en ITIL o ISO 20000. Según Santiago, “muchos alumnos han visto en la certificación profesional un valor añadido a sus estudios oficiales”.
Es el momento del ISO 20000
Una vez que ITIL se ha convertido en una obligación para cualquier empresa, “se da por hecho”, asegura Santiago, la certificación ISO 20000 surge como una ventaja competitiva aunque a diferencia de Estados Unidos, donde este estándar es un requisito imprescindible en las adquisiciones que se realicen con el Departamento de Defensa, en nuestro país, salvo en Cataluña donde sí se ha incluido en alguna oferta pública, no es la tónica habitual. “En España no es una obligación pero en muchos casos puntúa para ganar un proyecto público”, señala Santiago. Con todo ello, el directivo confía que en dos años todos los proveedores de servicios dispongan de la ISO 20000 si quieren acceder a un concurso público”.
Además de ITIL, ISO 20000 e ISO 27000, EXIN está trabajando en el desarrollo de nuevos programas de certificación en lso campos del cloud computing y el Green IT.