KPNQwest extiende por Europa una red de fibra óptica de 19.000 km.
Entre las razones por las que la compañía se ha lanzado a la construcción de esta gigantesca red, disponible para transmisión de datos, imágenes y voz, destaca un ancho de banda insuficiente para las nuevas aplicaciones que se están generando, así como una explosión del número de usuarios tanto de Internet como de comunicaciones en general. Y entre sus objetivos, KPNQwest quiere “poner a disposición de la empresa una nueva generación de fibra óptica, porque las propuestas que existen actualmente tienen los días contados”, comentaba Juan Antonio Esteban, director de KPNQwest España.
Además de alardear de disponer del control de las capacidades de servicio que van a poner sobre la red, la compañía se siente muy orgullosa de su modelo de costes. De cara a abaratar el coste del servicio a las empresas que están llevando su negocio a Internet, KPNQwest ha optado por vender parte de la red de fibra a sus competidores, con lo que consigue recuperar parte de su inversión en los proyectos europeos. En este sentido, destaca el contrato firmado con 360 networks por un montante de 180 millones de dólares mediante el cual KPNQwest suministrará fibra óptica a la compañía, con el anillo Ibérico y el Meridional.
La red europea contará con enlaces transatlánticos de alta capacidad que la unirán a la red de Qwest en EEUU -enlaza más de 150 ciudades-, lo cual permitirá a la compañía ofrecer completos servicios extremo a extremo. A este respecto Esteban afirmaba que “el 90% de los kilómetros que nuestros clientes deben atravesar a nivel mundial para obtener los datos que precisan, se harán por nuestras redes, con lo que aumentaremos nuestro peso específico como operador de Internet”.
Por otro lado, la compañía ha alcanzado un importante acuerdo con IBM Global Services que se extenderá durante los próximos diez años, bajo el que se contempla la creación de 18 CyberCentros dentro de una estrategia global orientada al desarrollo de servicios y aplicaciones e-business en toda Europa. Estos centros de hospedaje webs se sumarán a los 14 que ya están funcionando en todo el continente, y con ellos ambos socios pretenden alcanzar unos beneficios de 665.000 millones de pesetas.